La Audiencia Nacional de España habilitó a que se juzgue al expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) Luis Rubiales y al exseleccionador femenino Jorge Vilda, por el acto de acoso a la jugadora Jennifer Hermoso en la final del mundial en Australia el 20 de agosto de 2023, y las coacciones posteriores, respectivamente.

Lo que la Sala considera para habilitar el juicio es que los hechos denunciados se acoplan a un delito contra la libertad sexual y otro de coacciones -del 172.1 del Código Penal español-.

En ese sentido, el tribunal indicó que las consecuencias jurídicas “del beso y del consentimiento no pueden ser objeto de valoración en este momento” y advierte a los recurrentes que no pueden pretender en este trámite procesal confrontar las declaraciones como si se tratase del juicio oral, lo que deriva en la habilitación al juicio.

Por ende, el desafío probatorio corresponderá a la fase del plenario y no a la instrucción, “que se limita a determinar si existen indicios y si son subsumibles en un tipo penal. Ambas exigencias se cumplen en el auto recurrido”.

Medios españoles aseguran que en su escrito de acusación, la Fiscalía solicita una pena de dos años y medio de prisión para Rubiales por los delitos de agresión sexual y coacciones, y un año y medio de prisión por coacciones para los otros procesados. Además de la pena de prisión, la fiscal pide para Rubiales inhabilitación para trabajar en el ámbito deportivo mientras esté cumpliendo la condena, además de dos años de libertad vigilada y la prohibición de comunicarse con la jugadora y acercarse a ella a menos de 200 metros durante cuatro años. Por otra parte, solicitarán que indemnice a Hermoso con 50.000 euros.