El Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) volverá a tratar este martes la situación en la Franja de Gaza y, en particular, la necesidad de que ingrese más ayuda humanitaria a este territorio palestino. En sesiones anteriores, Estados Unidos vetó dos resoluciones que pedían un alto el fuego.

La nueva iniciativa, propuesta por Emiratos Árabes Unidos, llama a un “cese de hostilidades urgente y sostenido” que permita el ingreso de ayuda humanitaria, y se enfoca en los mecanismos para hacerla llegar a la población. Mientras tanto, se suman llamados a proteger a los habitantes de la Franja de Gaza.

El alto representante para la Política Exterior de la Unión Europea, el español Josep Borrell, pidió este lunes una “pausa humanitaria” de manera “urgente” y manifestó en su cuenta de X que ya murieron “demasiados civiles” en la ofensiva militar israelí en ese territorio, tal “como señalaron, entre otros, los ministros de Relaciones Exteriores de Francia, Alemania y Reino Unido”.

“Ciertamente, estamos siendo testigos de una terrible falta de distinción en la operación militar de Israel en Gaza”, afirmó. “La iglesia de la Sagrada Familia y el Convento de la Caridad, refugios para desplazados, fueron atacados”, agregó Borrell. “Durante las operaciones militares más recientes han muerto fieles, tres rehenes israelíes y cientos de otros civiles”, dijo.

La secretaria general de Amnistía Internacional, Agnès Callamard, pidió a Estados Unidos que acepte la resolución propuesta en el Consejo de Seguridad porque “cualquier uso del veto significará más matanzas, hambre y sufrimientos”.

Otra organización que trabaja en materia de derechos humanos, Human Rights Watch, manifestó en un comunicado citado por Efe que “las fuerzas israelíes están bloqueando deliberadamente el suministro de agua, alimentos y combustible” a la población civil. El director de la organización para Israel y Palestina, Omar Shakir, dijo que esta política es “impulsada o respaldada por altos funcionarios israelíes y refleja la intención de matar de hambre a los civiles como método de guerra”.

La necesidad de que ingrese más ayuda humanitaria a la Franja de Gaza también fue abordada este lunes por el secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, que se reunió en Israel con el primer ministro, Benjamin Netanyahu.

A su vez, la Autoridad Nacional Palestina, que gobierna en Cisjordania, reclamó que accedan a Gaza mil camiones diarios con asistencia, que incluya alimento, combustible y equipos de emergencia. Se trata de una cifra muy superior a la que ingresa actualmente.

El vocero del Ejército de Israel, Daniel Hagari, emitió un mensaje en el que negó que su país restrinja el ingreso de ayuda humanitaria y afirmó que sus fuerzas militares utilizan “muchas medidas para tratar de minimizar el daño y el sufrimiento de los civiles”.

“Abortamos los ataques cuando vemos una presencia civil inesperada. Elegimos la munición adecuada para cada objetivo, para que no cause daños innecesarios”, dijo, e insistió en que “siempre que sea posible” se advierte a los civiles que va a lanzarse un ataque.

De acuerdo con los últimos datos del Ministerio de Salud de la Franja de Gaza, controlado por el movimiento islamista Hamas, la ofensiva israelí ya causó la muerte de 19.453 personas.

Ataques de rebeldes hutíes

Durante su visita a Israel, el secretario de Defensa estadounidense dijo que convocó para este martes una reunión por videoconferencia con países de Medio Oriente para discutir la posibilidad de dar una respuesta común a los ataques de rebeldes hutíes de Yemen en el mar Rojo.

Al igual que el gobierno de Israel, Austin abogó por conformar una coalición internacional para enfrentarlos.

Varias empresas de transporte marítimo suspendieron en los últimos días sus operaciones en la zona debido a los misiles y los drones que los rebeldes hutíes –que son aliados de Irán– lanzan contra el sur de Israel y contra buques con bandera de ese país en el mar Rojo.

Un portavoz de los hutíes dijo el sábado que con esta ofensiva intentan presionar al gobierno israelí para que cese sus ataques contra Gaza.

Este lunes, Borrell manifestó que “la Unión Europea condena enérgicamente los ataques de los hutíes en el mar Rojo”, y afirmó que “la perturbación de la navegación internacional y la seguridad marítima es inaceptable y debe cesar”.

También el secretario general de la ONU, António Guterres, pidió mediante su vocero, Stéphane Dujarric, que se terminen los ataques en el mar Rojo, que impiden la navegación y el flujo comercial y podrían causar un desastre si impactan contra un buque petrolero.