Una iniciativa para que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) reconociera a Palestina como uno de los estados que la integran naufragó este jueves en el Consejo de Seguridad debido al anuncio de Estados Unidos de que aplicaría su derecho a veto.

Para que el reconocimiento fuera aprobado y puesto a consideración de la Asamblea General, se requería el apoyo de al menos nueve de los 15 países que integran el consejo y que ninguno de sus miembros permanentes –Estados Unidos, Rusia, China, Francia y Reino Unido– lo vetara.

La resolución, presentada por Argelia en nombre de varios países árabes, recibió 12 votos a favor y dos abstenciones, las de Reino Unido y Suiza, mientras que Estados Unidos fue el único en votar en contra.

Esta se convirtió en la cuarta vez que Estados Unidos aplica su poder de veto alineado con Israel. Antes lo hizo para rechazar tres resoluciones que pedían un cese del fuego inmediato.

El representante palestino ante la ONU, Ziad Abu Amr, argumentó durante el debate que el ingreso de Palestina como miembro pleno de esa organización –que actualmente integra en calidad de Estado observador– facilitaría el avance hacia “una paz real basada en la justicia” y permitiría a los palestinos tener “una vida digna dentro de un Estado independiente”. Señaló, además, la importancia de alcanzar la paz en un momento en que el conflicto palestino-israelí “impacta a otras regiones en Oriente Próximo y el mundo”.

“¿Cómo se reconoció el Estado de Israel? Mediante una resolución de la ONU, la número 181”, recordó Amr, y pidió lo mismo para los palestinos.

Gilad Erdan, el embajador de Israel ante la ONU, dijo que ese reconocimiento causaría “destrucción durante años y perjudicaría cualquier posibilidad de diálogo futuro”. Erdan señaló, además, que actualmente la Autoridad Palestina “no tiene control sobre Gaza”.

En otra iniciativa para reconocer a Palestina, el ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi, pidió una conferencia de paz internacional “para abrir camino a la solución de dos estados”.

Durante una visita a Indonesia, llamó a Estados Unidos a que deje de lado su “arrogancia” y trabaje junto a otros países de la ONU para poner fin a las hostilidades entre Israel y Hamas.

Cerca de 34.000 muertos en Gaza

Mientras el Consejo de Seguridad sesionaba, el Ministerio de Salud de la Franja de Gaza informó que el número de muertos que dejó la guerra en este enclave palestino hasta ahora es de 33.970 personas, entre ellas 14.685 menores de edad y 9.670 mujeres.

Reportó que los heridos ya suman 76.770 y que la ofensiva israelí contra el complejo médico Al Shifa dejó un millar de desaparecidos. Allí se encontraron este jueves unos 30 cuerpos enterrados en una fosa común, frente a la emergencia del hospital.

De acuerdo con el ministerio, había cuerpos de mujeres y ancianos, algunos esposados y otros sin ropa. Habían sido enterrados en una fosa “profunda” y después “se arrojaron desechos sobre ellos”.

Salama Maarouf, jefe de la Oficina de Medios de las autoridades de Gaza, dijo que el hospital de Al Shifa “ha sido bombardeado, quemado y arrasado” como parte de una guerra “que destruye todos los medios de supervivencia dentro de la Franja de Gaza”. El funcionario llamó a la fiscalía del Tribunal Penal Internacional a investigar las acciones israelíes en ese hospital.

Israel e Irán

El primer ministro Benjamin Netanyahu, que enfrenta protestas en las calles y tensiones en la coalición de gobierno, llamó a Israel a unirse frente a la “amenaza total” que representa Irán y advirtió que “las naciones se quiebran por dentro”.

“La división interna debe desaparecer ahora porque estamos bajo una amenaza existencial”, dijo, según citó Europa Press. “Estamos comprometidos con derrotar al eje terrorista en Gaza, tanto para liberar a los rehenes como para repeler la amenaza total que llega de Irán”, agregó.

Su gobierno también agradeció a los países que sancionaron a Irán por el ataque lanzado contra Israel el sábado –en respuesta al bombardeo de su consulado en Siria– y llamó a formar un frente contra ese país.

El gobierno británico anunció este jueves sanciones contra 13 personas y entidades iraníes, entre ellas el ministro de Defensa, Mohammad Reza Ashtiani. A su vez, Estados Unidos sancionó a 16 personas, incluido Ashtiani, y dos entidades: el Ministerio de Defensa y la Guardia Revolucionaria.

Para el canciller israelí, Israel Katz, esta “es nuestra oportunidad de formar un frente global y una coalición regional contra Irán junto a Estados Unidos, la Unión Europea, los países árabes moderados, y así frenar la cabeza de serpiente que amenaza la estabilidad global”.

Mientras tanto, el secretario general de la ONU, António Guterres, advirtió ante el Consejo de Seguridad que cualquier “error de cálculo” podría llevar a un conflicto “devastador” e “impensable” en Medio Oriente y llamó a terminar con “el sangriento ciclo de represalias”.