La Asociación Sindical de Cooperativistas y Obreros del Transporte (Ascot), que agrupa a trabajadores de Ucot y Coetc, resolvió detener los servicios por 24 horas hasta la noche del miércoles luego de que un conductor de la línea 370 de Ucot resultara herido en un intento de rapiña. A través de un comunicado, el sindicato denunció que hubo “cuatro episodios de robos y agresiones” en menos de diez días.

En diálogo con la diaria, Martín Burgues, secretario general de Ascot, dijo que las agresiones en el transporte “se están dando cada vez más seguido y con más violencia”. Afirmó que el propósito de la medida del paro, que “lamentablemente perjudica a cierto sector de la población”, es avanzar en medidas concretas “antes de que pase una situación más grave, un hecho fatal”.

El martes, un conductor de la línea 370 de Ucot fue atacado con un cuchillo en un intento de rapiña en el barrio Malvín Norte. Sufrió dos cortes: uno en la espalda y otro en la mano. “Suben y le piden el dinero amenazándolo con un cuchillo. Cuando el compañero se lo iba a entregar recibe un puntazo y al intentar defenderse se traba en lucha y recibe otro puntazo en la espalda. Por suerte, está bien”, comentó Burgues. El trabajador fue trasladado en ambulancia al Banco de Seguros del Estado, pero está estable y fuera de peligro.

Tras reunirse en asamblea gremial, los trabajadores de Ascot se movilizaron en ómnibus de Ucot hacia la sede del Ministerio del Interior para “exigir más seguridad”. Burgues señaló que el ministerio “había quedado comprometido a poner 80 policías más en el seguro”, lo cual “ayudaría bastante para tratar de minimizar estos hechos que no solamente nos afectan físicamente sino también psicológicamente”. Aunque aclaró que existe diálogo con las autoridades de la cartera, “siempre que golpeamos la puerta nos han atendido”, reclamó “soluciones concretas”.

“Si en su momento estaba el compromiso de 80 policías más, bueno, que de repente no sea de un día para el otro, pero sí avanzar en ese sentido. Nosotros no somos el centro del mundo, pero hay un sector dentro del Ministerio del Interior destinado a cubrir esos servicios para darle más seguridad a los ómnibus, tanto al usuario como al trabajador”, afirmó.

Consultado sobre el dinero en efectivo en los ómnibus, Burgues opinó que “no pasa por eso”, ya que “ahora se está manejando muy poco efectivo”. “Nos han robado servicios nocturnos que prácticamente andan sin plata”, indicó; y agregó que también existieron robos “de forma violenta” a los pasajeros.

Según el secretario general de Ascot, estos hechos delictivos se dan “en cualquier lado de la ciudad”. Aunque “a veces no sale a la opinión pública”, aseguró que el sindicato realiza las denuncias correspondientes y procura “generar reuniones para avanzar en una solución, que no va a ser definitiva, pero seguramente va a ayudar a que no se dé con tanta frecuencia”. Semanás atrás, mediante un comunicado a la opinión pública, Ascot había alertado sobre las “intensas y frecuentes pedreas” que reciben los ómnibus en algunas zonas de Montevideo. Al respecto, Burgues señaló que los ataques con piedras suponen “un riesgo más que importante”, “porque adentro del ómnibus van bebés y personas mayores”.

Agregó además que “si le tiran al parabrisas corre riesgo un tercero, porque podemos perder el control del coche y ocasionar un daño mayor”. “Todos los días estamos teniendo esa situación. Tiran al barrer. Algunas veces no lastiman a nadie, pero otras veces sí”, expresó.

Los servicios de las cooperativas de transporte volverán a su frecuencia habitual a partir de las 22.00 del miércoles en el turno nocturno.