Pablo Mieres, que está en su último día al frente del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, concurrió este miércoles al acto del PIT-CNT por el Día de los Trabajadores porque dijo que “escuchar todas las voces es parte de la construcción democrática”, pero al retirarse cuestionó el discurso del presidente de la central sindical, Marcelo Abdala.

En términos generales, manifestó que tiene “enormes diferencias, enormes, ideológicas, sobre qué modelo de país se pretende construir, también programáticas, y además hubo afirmaciones equivocadas sobre las realidades que existen hoy en la vida laboral”, resumió.

Comentó que sobre el manejo de “datos que no son correctos” hablará esta tarde en la conferencia de prensa que el gobierno convocó por el Día de los Trabajadores, pero aseguró que, por ejemplo, “no es verdad que el desempleo de los jóvenes sea cinco veces más que el de la población en general; es tres veces más. Igual es muy dramático, y no es de ahora, viene de hace décadas, lamentablemente”.

Ante la consulta por los reconocimientos que hizo el PIT-CNT, por ejemplo sobre la recuperación este año del salario real, dijo que “es obvio, porque estamos 2,5 por arriba de 2019”, y también aseguró que en empleo Uruguay “no está en 2019, está en años anteriores, está más arriba, mucho más arriba. ¿Eso significa que está todo bien? Por supuesto que no, hay cosas pendientes”.

Sobre la propuesta que tiene el PIT-CNT de reducción de la jornada laboral a 40 horas semanales, Mieres dijo que es un tema “que tenemos que seguir trabajando”, pero consideró que es “imposible pensar en una ley que reduzca de 48 horas a 40, manteniendo los sueldos de 48 horas. Es no vivir en el país proponer esa idea”.

Además, Mieres fue crítico, como en otras oportunidades, con el plebiscito que propone la central sindical, que apunta a bajar la edad jubilatoria, subir las jubilaciones mínimas y eliminar las Administradoras de Fondos de Ahorro Previsional (AFAP).

“Es una propuesta que dramáticamente pone en riesgo el sistema de seguridad social de Uruguay, que genera una situación de confiscación de ahorros de los uruguayos, y que además genera un déficit en la seguridad social, que para pagarlo va a implicar lamentablemente un aporte adicional de todos los trabajadores uruguayos, y además va a impedir que se pueda invertir dinero y recursos en cosas tan fundamentales como reducir la pobreza infantil, como mejorar la transformación educativa y lograr que los jóvenes uruguayos tengan una mejor inserción laboral en el futuro”, afirmó.