Julio Pintos (Partido Socialista, PS), más conocido como Nino, fue el primer frenteamplista en ocupar la titularidad de la Intendencia Departamental de Paysandú (IDP), entre 2005 y 2010. El Frente Amplio (FA) no pudo retener esa comuna en el siguiente período. Ahora, Pintos es, junto a Juan José Domínguez (Movimiento de Participación Popular, MPP) y Guillermo Caraballo (Vertiente Artiguista), uno de los candidatos que aspiran a recuperar la IDP para el FA.
En diálogo con la diaria, opinó sobre la derrota del FA en Paysandú en 2010, la gestión del actual intendente del Partido Nacional (PN), Bertil Bentos, y prometió medidas a los sanduceros.
-¿Por qué el FA perdió la IDP en 2010? ¿Se siente responsable de esa derrota como ex intendente?
Ninoficha
Pintos tiene 61 años y es oriundo del barrio Rampla (Paysandú). Es casado, tiene cuatro hijas y tres nietas. Es productor rural, se dedica a la apicultura y está por terminar de cursar una licenciatura en Desarrollo. Militante socialista desde muy joven, fue preso político de la dictadura entre 1972 y 1976. Fue vicepresidente de la Comisión Nacional de Fomento Rural, diputado suplente y el primer intendente de Paysandú perteneciente al FA. En esta campaña lo apoyan su partido (lista 90), Democracia Avanzada (lista 1001), el Partido Obrero Revolucionario (lista 871), Baluarte Progresista (lista 800) y el grupo departamental Renovar e Innovar para Cambiar (lista 1961).
-Sería una irresponsabilidad no sentirme responsable. Fui el conductor del gobierno, pero fue un gobierno del FA, porque en el gabinete, donde se tomaron las grandes decisiones, estaban representados todos los sectores. Asumí la responsabilidad en un Plenario Departamental en el que se analizó el resultado electoral. Cuando se pierde una elección por pocos votos hay múltiples factores. Había mucha expectativa sobre nuestra administración y tuvimos que asumir en un momento muy crítico, en un país pobre, un departamento empobrecido y con un presupuesto tres veces menor que el que tiene hoy la IDP. La intendencia estaba en un estado calamitoso, con inviabilidad institucional por los recursos que recibía del gobierno central y porque la recaudación había bajado, producto de la crisis. En esa situación, fijamos prioridades para los primeros dos años en el acompañamiento al gobierno nacional con la implementación del Plan de Emergencia, y se logró sacar de la pobreza a 33.000 personas. Pero la gente no entendió nuestras prioridades del todo y pagamos ese costo. Tampoco estuvimos cerca de la gente desde el punto de vista político. La gestión estuvo, pero faltaron actores políticos que explicaran a la gente ese proceso. No hicimos cambios en el equipo de gobierno, lo que también fue un error. Además, al FA le faltó organización en el interior del departamento para enfrentar la descentralización de los municipios. En la ciudad se ganó por 1.500 votos y se perdió por 2.800 en el interior. Agrego que la campaña que hicimos fue muy polarizada en la interna y eso defraudó a muchos frenteamplistas, que terminaron votando en blanco, como sucedió en Montevideo. La gente se contagió en Paysandú, pero no se dieron cuenta de que no había un colchón de votos como en la capital y que estaba en riesgo la elección.
-¿Esa polarización que se generó con la candidatura de Salomé Wolman (MPP) se ha superado?
-No fue una tarea fácil la que llevaron adelante distintas presidencias [departamentales] del FA, haciendo el proceso de evaluación y encarando ese proceso tan doloroso. Luego hubo reuniones bilaterales entre el PS y el MPP y antes de empezar el proceso electoral actual hubo reuniones importantes. La presencia de Domínguez como candidato del MPP es importante, porque ha hecho un trabajo muy bueno. Es una campaña con mucha sintonía, en la que juegan de memoria los tres candidatos. Los problemas se superaron y estamos en buenas condiciones.
-El intendente Bertil Bentos (Partido Nacional) está siendo cuestionado por el FA y el Partido Colorado (PC) por presuntas irregularidades en la organización de la Semana de la Cerveza. ¿Hay intencionalidad política en presentar las denuncias ahora, o se debe a los tiempos políticos en los que sucedieron las cosas?
-El principal responsable de que esto pase ahora es Bentos. Durante un año no respondió a los pedidos de informes y hubo que hacer un pedido a la Justicia para acceder a ellos; tampoco concurrió a un llamado a sala a la Junta Departamental. Pasó todo al Tribunal de Cuentas (TC) para hacer un auditoría que llevó medio año, porque fue difícil encontrar la información y hay datos que nunca se encontraron. Hay que sacar la política de lado. El del TC es un informe técnico hecho con conciencia por abogados y contadores, pero además el TC, por unanimidad, estaba observando esto desde 2011. Bentos tuvo tres años para corregirlo y el tema nunca se trató. Por primera vez en la historia del departamento, un intendente se va sin haber tratado ninguna de la cuatro rendiciones de cuentas que hay que hacer en el período. Ayer [por el lunes] se reunieron la bancadas del FA y del PC y resolvieron hacer denuncias penales; que sea la Justicia la que determine si hubo delito. Lo mas grave es que Bentos nunca inició una investigación administrativa ni un sumario a los funcionarios que habían estado involucrados en faltantes de dinero de decenas de miles de dólares.
-¿Cuáles son los ejes programáticos del FA en Paysandú y cuáles los énfasis de Pintos?
-Los ejes son cuatro: el Paysandú de la convivencia, que tiene que ver con preparar el departamento para que la gente viva mejor; el Paysandú de los derechos, dedicado a la articulación de los derechos y a facilitar el acceso a la educación, salud, deporte, recreación, cultura; el Paysandú productivo, que tiene que ver con la aplicación de los proyectos de desarrollo del gobierno nacional, y un cuarto eje que es el gobierno para todos, que tiene que ver con generar una institución pública que gobierne para toda la sociedad y no para un partido, como sucede ahora.
Vivimos un retroceso democrático tremendo. Hoy se gobierna para los amigos y los familiares del intendente y sus correligionarios. Hubo 700 ingresos a dedo en el período, más todos los cargos políticos.
Estamos proponiendo un plan de obras que duplique la cantidad de cuadras de tratamiento bituminoso que se están haciendo. Nosotros hicimos 1.300 cuadras y Bentos, con el doble de presupuesto, hizo 1.300. Ordenando los recursos financieros se pueden hacer entre 400 y 500 cuadras por año. Proponemos hacer dos o tres intervenciones grandes que cambien la ciudad: el saneamiento en colaboración con OSE, para continuar la obra, y una vez que esté hecho, empezar a consolidar los barrios desde el punto de vista urbano, con calles, cordón cuneta y arbolado. Empezaremos a trabajar el proyecto de los accesos al puerto de Paysandú, que implica la obra de acceso y el reordenamiento de familias que están en zonas inundables. En el interior la gente no tiene transporte público, y a medida que ha mejorado su condición de vida y tiene más recursos, quiere salir. Nuestro compromiso es estudiar un sistema de transporte municipal en áreas donde la actividad privada no llega por temas de rentabilidad, y acercar a las personas hasta donde pasa el transporte actual.