El XII Congreso del PIT-CNT no cambió la correlación de fuerzas del Secretariado Ejecutivo de la central, y los dirigentes que actuarán allí serán prácticamente los mismos que ya estaban haciéndolo. Pero la jubilación de una de las tres coordinadoras, Beatriz Fajián, generó un nuevo problema en la central: entre los 13 dirigentes y cuatro suplentes del Ejecutivo no hay ni una sola mujer.
La presencia femenina no ha sido uno de los fuertes de la central. Fajián era la única mujer en el Secretariado hasta entonces, y si bien era una de los tres coordinadores del PIT-CNT, tenía un perfil mucho más bajo que los otros dos (Fernando Pereira y Marcelo Abdala), e incluso que otros dirigentes de su propia corriente sindical, como el ahora flamante vicepresidente de la central, Joselo López.
El tema preocupa a la central doblemente, porque además Fajián era quien encabezaba la Comisión de Género del PIT-CNT. La situación llegó al punto de que algunos dirigentes quieren que una mujer de la Mesa Representativa se incorpore con voz y sin voto al Secretariado y que sea quien presida la Comisión de Género. El nuevo Secretariado aún no ha sesionado, y una de sus primeras tareas será enviarle a la Mesa Representativa sus propuestas de designaciones para cada uno de los departamentos y comisiones. Ayer, en declaraciones a Televisión Nacional, Abdala aseguró que habrá “representación femenina” en la conducción del PIT-CNT.
Los propios integrantes del Secretariado reconocen que están en deuda con la situación, aunque apuntan a que es más un problema de los sindicatos que del PIT-CNT. A la hora de elegir este cuerpo, afirman, se suele optar por los principales referentes de cada sindicato, y en ese nivel no es común que se visibilicen mujeres. “No es justo asignarle toda la responsabilidad al PIT-CNT”, argumentó López, quien admitió que la situación es un “problema”.
Ricardo Cajigas ilustró la situación: “Si para integrar el Secretariado tenés que elegir entre los dirigentes de los sindicatos, pero esos dirigentes son todos hombres, entonces tenemos un problema”. Esa situación ocurre, agregó, incluso en gremios en los que la mayoría de los afiliados son mujeres. Para Cajigas, se trata de una situación “multicausal” y “grosera”, en la que también existe una “falta de conciencia de la igualdad entre el hombre y la mujer”.
La opinión femenina
El VIII Congreso del PIT-CNT, celebrado en 2003, estableció que en los sindicatos “no puede existir menos de un 30% ni más de un 70% de trabajadores de un mismo sexo, ya sea en cargos de dirección, cupos de formación o negociación colectiva”. Según la ex integrante de la entonces comisión de Género y Equidad del PIT-CNT Noelia Millán, esta norma “nunca se pudo aplicar”.
Alma Fernández, una de las coordinadoras de la Secretaría de Género, Equidad y Diversidad del PIT-CNT hasta este Congreso, también definió el tema como un debe.
En tanto, Flordeliz Feijo, del Sindicato Único de la Aguja, sostuvo que “más allá de de que el Secretariado se conforma por corrientes de opinión, éstas deberían haber respetado la cuota y haber puesto mujeres, al menos en las alternas”. “Sin participación de las mujeres en los ámbitos de dirección no es posible un camino que conduzca a la cultura del trabajo ni a la democracia. Y una democracia sin mujeres no tiene posibilidad de construir la sociedad ni de transformarla”.