Las posiciones dentro del Frente Amplio (FA) en torno a cómo se conformará el equipo que conducirá la fuerza política hasta las elecciones internas del año que viene permanecen incambiadas, y todo parece indicar que el sábado 8, cuando se retome la reunión del Plenario Nacional, no habrá consenso y se impondrá quien tenga mayoría.
El Frente Liber Seregni (FLS), el Partido Socialista (PS), Casa Grande y la Vertiente Artiguista (VA) proponen la continuidad de la presidenta del FA, Mónica Xavier, durante la transición, pero el Movimiento de Participación Popular (MPP), el Partido Comunista (PCU) y la lista 711 prefieren que se nombre un colegiado que sustituya al equipo actual de presidencia, integrado también por los senadores Rafael Michelini (Nuevo Espacio-FLS) e Ivonne Passada (MPP) como vicepresidentes. Juan Castillo (PCU), que también ocupa una de las vicepresidencias, ya no cumple más ese rol desde que asumió como director nacional de Trabajo. Consultado por la diaria sobre su situación, Castillo informó que su renuncia está “en poder del PCU”, aunque todavía “no se hizo efectiva”. “Tiene que ver con no meter un elemento más en la interna del FA. Espero que se tome una decisión en equipo, porque siempre funcioné en equipo”, expresó.
El MPP, el PCU y la 711 mantienen la posición adoptada por un Plenario Nacional en febrero de 2012 de considerar incompatibles el ejercicio de la presidencia del FA y de otro cargo institucional.
El presidente de la VA, Daoiz Uriarte, consideró que “lo más conveniente” para el FA “es que se prorrogue la continuidad” de Xavier, pero aclaró que su sector “está abierto a la solución de una dirección colegiada” si en ella participa la actual presidenta.
El jueves pasado, en la comisión especial que analiza la transición, el PS presentó la propuesta de hacer un plebiscito entre los frenteamplistas para resolver la continuidad de Xavier. En la iniciativa, se argumentó que Xavier “fue electa como resultado de una elección nacional interna” entre todos los frenteamplistas y que “ese acto fortaleció la tradición democrática” de la fuerza política. “El objetivo es poder resolver este punto de forma de que el Frente Amplio en su conjunto salga fortalecido y así encarar las sucesivas etapas y responsabilidades que le han sido encomendadas como fuerza política de gobierno”, se sostiene en la propuesta, que invoca el artículo 11 de los estatutos del FA, según el cual, “por razones políticas”, el Plenario Nacional, por dos quintos de sus miembros, puede convocar a un plebiscito para tomar una decisión.
El MPP no comparte el planteo del PS y va a intentar incidir para que el sábado el tema quede resuelto definitivamente. El diputado Jorge Meroni (MPP) recordó que la resolución de incompatibilidad en el ejercicio de cargos fue previa a la elección de Xavier, y agregó que si el electo presidente del FA, en mayo de 2012, hubiera sido Ernesto Agazzi (candidato del MPP), “él habría renunciado a su banca de senador”. Meroni confirmó que ésa es la posición que mantiene el MPP. Anunció que el 8 de agosto Passada presentará su renuncia a la vicepresidencia del FA y que el MPP impulsará que la transición la dirija un colegiado conformado, “en lo posible, por personalidades independientes, y si no, de otros sectores”. “El MPP no quiere estar en ese colegiado”, afirmó.
Por su parte, Michelini, quien pidió el cuarto intermedio del Plenario Nacional, dijo a La República que el FLS aceptaría que la dirección quedara conformada por “un equipo más ampliado”, pero incorporando a Xavier, para acercarse, de este modo, a la posición de la VA. Además, advirtió que “si se articula en esta transición cualquier otra solución que no la incluya [a Xavier], el FLS se abstendrá” de participar en esa conducción.
Consultado sobre esta afirmación, Meroni dijo que “es una decisión” del FLS y que “el MPP y el Espacio 609 no van a cambiar de posición” por eso.
Las bases de Montevideo tampoco han variado su postura y se mantienen en la “inconveniencia de la doble función”. “Nadie cuestiona el desempeño de Mónica Xavier, pero lo que se resolvió es que el FA necesita una dedicación exclusiva”, explicó María Ema Alba, de la departamental capitalina.