La Comisión de Presupuesto integrada con Hacienda de la Cámara de Representantes recibió a una delegación del Instituto de Investigaciones Biológicas Clemente Estable (IIBCE), una unidad ejecutora del Ministerio de Educación y Cultura (MEC). Los investigadores de este centro explicaron a los diputados que mientras otras unidades del Sistema Nacional de Ciencia y Tecnología reciben sus respectivos aumentos presupuestales, el incremento para el IIBCE es nulo.
Las autoridades del instituto sostienen que desde el MEC se les había asegurado que recibirían un aumento presupuestal, pero lo prometido no apareció en ninguno de los 708 artículos del proyecto de ley de presupuesto que entró hace diez días al Parlamento. En el IIBCE incluso se conjetura que la medida es una suerte de condena por la oposición que se había demostrado desde allí a la propuesta de sustituir su actual dirección académica por una dirección política designada directamente por varios ministerios.
“Vamos a esperar la venida de la ministra [María Julia Muñoz] para que explique por qué parece que se castiga a la institución”, dijo el nacionalista Gustavo Penadés. “Como se opusieron a la dirección técnica, les sacaron los artículos del presupuesto”, dijo su par nacionalista Jorge Gandini. La diputada del MPP Lilián Galán aseguró que los legisladores del Frente Amplio conversarán con el MEC para analizar la situación, y que también se buscará “algún tipo de financiamiento” para la institución. “Genera gran preocupación, porque es el único centro de investigación aplicada y científica con una trayectoria de 90 años, y produce 20% de las publicaciones científicas en Uruguay”, observó, y describió, además, los minúsculos salarios de los investigadores del centro. Mucho más reservado se mostró su compañero de bancada Alfredo Asti (Asamblea Uruguay) a la hora de hacer una valoración: “Esto no implica que no pueda seguir funcionando como lo ha hecho hasta ahora. Mucho incisos tampoco tienen aumento. No es un tema particular del IIBCE”.
Ayer también fueron a comisión las autoridades del INAU, que explicaron la necesidad de incorporar 400 funcionarios calificados, aspecto que también fue criticado por los nacionalistas.