Las gotas comenzaron a caer de a poco, pero el espíritu festivo no se vio alterado. En el carnaval de La Pedrera la variable climatológica no incide, como tampoco lo hace la falta de pomos o de disfraces. Antes de que cayera el sol en la avenida principal de este balneario rochense, donde cada año se vive una fiesta masiva que no separa a espectadores de carnavaleros, pues son todos parte de una misma masa eufórica, dos mujeres fueron atacadas por grupos de jóvenes que se paseaban por allí.
En uno de los casos, según pudo saber la diaria, una mujer fue víctima de acoso. “Me levantaron la pollera y me tiraron espuma”, relató. A raíz de este episodio, la joven resolvió permanecer al margen del carnaval. Pero a La Pedrera en estas fechas nadie va a descansar. Insultos, gritos y espuma lanzada a cualquier parte del cuerpo, contó otra de las agredidas, también fueron parte del escenario en la víspera de la primera noche de Carnaval, además de las tradicionales bombitas de agua.
“Esto es una fiesta, no una batalla”, advertía en la antesala el alcalde de La Paloma, José Luis Olivera, según publicó este lunes Montevideo Portal. Para prevenir complicaciones de cualquier índole, desde las 17.00 de ayer, a instancias de una resolución de la Intendencia Departamental de Rocha (IDR), no dejaron ingresar más vehículos al balneario, al tiempo que prohibieron el ingreso de alcohol por parte de consumidores y vendedores ambulantes. En coordinación con el Ministerio de Salud Pública (MSP), el Ministerio del Interior (MI), el Ministerio de Defensa Nacional (MDN) y la Junta Nacional de Drogas (JND), se llevaron adelante algunas acciones de contención. Militares trabajaron durante todo el día para dejar prontas las tres carpas de “achique”, donde los presentes podrán tomar un poco de aire durante un lapso corto para posibilitar el recambio de gente. Por otra parte, se desplegaron 120 baños químicos y carpas para la atención en salud.
El carnaval de La Pedrera se prepara para recibir a más de 20.000 personas que no sólo llegan de Uruguay, sino también de otras parte del mundo. En los últimos años, debido sobre toda a la difusión del desfile de carnaval, este balneario vivió una suerte de masificación de la fiesta.