La posibilidad se venía manejando en los últimos días y lo terminó de confirmar ayer el canciller de Paraguay, Eladio Loizaga, en declaraciones al diario local Última Hora: su país propuso eliminar el cargo de alto representante del Mercosur en la última reunión de cancilleres del bloque, el jueves en Buenos Aires. Paraguay debía designar un candidato para desempeñarse en esa responsabilidad por los próximos tres años, en reemplazo del brasileño Florisvaldo Fier, más conocido como Doctor Rosinha, pero eso finalmente no se concretará.
Según Loizaga, el alto representante “no cumple el objetivo que tiene que cumplir”, y por eso les planteó a los otros tres cancilleres del bloque (la argentina Susana Malcorra, el uruguayo Rodolfo Nin Novoa y el brasileño Aloysio Nunes Ferreira) la alternativa de suprimir el cargo de forma definitiva.
Fuentes de la cancillería uruguaya confirmaron a la diaria que Paraguay planteó esa posición y que los cancilleres consideraron que se trata de una alternativa “aceptable”; de todas maneras, la eliminación del cargo de alto representante se oficializaría recién en junio, en el marco de la cumbre del Mercosur que se llevará a cabo en Argentina. En la reunión de cancilleres se manejó la idea de que se trata de una figura “que no es imprescindible y que implica muchos recursos presupuestales”. “Paraguay lo propuso y en principio hubo respuesta positiva, pero se analizará durante el semestre. Lo que está claro es que no se nombrará ahora un reemplazante de Rosinha”, comentaron desde la cancillería.
Las fuentes del Ministerio de Relaciones Exteriores aclararon que este camino “no va en desmedro del Mercosur social”, algo que Uruguay “no estaría dispuesto a aceptar”. Según dijeron, Uruguay intentará incidir durante estos meses de negociación para que los recursos presupuestales que hoy se destinan al denominado Mercosur social, por ejemplo los de la Unidad de Participación Social del Mercosur, dependiente hasta ahora del alto representante, se sigan ejecutando “desde otros ámbitos institucionales”.
Por otra parte, también aclararon que la posición de los cuatro cancilleres de eliminar el cargo “no tiene que ver con la tarea que desempeñó Rosinha, sino con una cuestión institucional”.