La profundización de la reforma de la salud será tema de debate en los próximos días. Mañana en la sede del PIT-CNT, la central obrera, junto a organizaciones de usuarios de la salud y la Organización Nacional de Asociaciones de Jubilados y Pensionistas del Uruguay, presentará una plataforma programática en la que proponen cambios económicos, sociosanitarios y de gestión al sistema de salud, como un aporte al Diálogo Nacional en Salud impulsado por el Ministerio de Salud Pública (MSP). Al mismo tiempo, el PIT- CNT evalúa llevar a cabo una movilización a fines de julio para respaldar estas propuestas. El 1º de agosto, la Federación Uruguaya de la Salud, impulsora de la plataforma, realizará un debate a nivel nacional para discutir las iniciativas en Montevideo, Tacuarembó, Colonia, Florida y Rocha, mediante teleconferencias.
El documento que se presentará mañana se denomina “Aspectos programáticos a incluir en un debate sobre el proceso del sistema de salud en el Uruguay”. Allí se señala que si bien la concreción de la reforma de la salud “tuvo en su aspecto económico el principal avance en materia de universalidad, accesibilidad y justicia social en la carga financiera sanitaria”, quedan objetivos pendientes. Las organizaciones de trabajadores y de usuarios proponen, en primer lugar, igualar el gasto per cápita de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) con la media mutual. A ASSE le faltan aproximadamente 120 millones de dólares para igualar el gasto per cápita de las mutualistas.
Las organizaciones también reclaman una “política de igualación de tasas en todos los prestadores”. El costo de la realización de estudios, por ejemplo, es en algunos casos tres o cuatro veces mayor en una mutualista que en otra. En el documento se propone además contemplar las diferencias en materia de ingresos y exonerar totalmente del pago de tickets y órdenes a los usuarios con ingresos más bajos, así como una exoneración parcial para la franja siguiente de ingresos.
Al mismo tiempo, reclaman el ingreso de los trabajadores municipales al sistema de salud, en línea con las exigencias planteadas por el PIT-CNT en sus últimos actos públicos, y piden la definición de metas asistenciales de carácter territorial a nivel municipal o departamental.
Dar y recibir
Por otra parte, los trabajadores y usuarios señalan la necesidad de una mayor complementariedad asistencial en el sistema. Para avanzar en esa dirección, sugieren que la Junta Nacional de Salud (Junasa) fije precios de referencia para las prestaciones sanitarias que son objeto del intercambio asistencial en el sector privado o entre el sector público y el privado, como la ocupación de camas en los CTI. Proponen también que existan mecanismos de compensación de prestaciones entre prestadores, “de manera de garantizar la atención de todas las personas en cualquier lugar del país”. Finalmente, sugieren que se elabore un proyecto de ley que establezca la obligatoriedad de la complementariedad en determinadas condiciones como parte de los contratos de gestión.
Otro reclamo de las organizaciones apunta a fortalecer una política “de uso racional” de los medicamentos y la tecnología. “El uso acrítico y no protocolizado de medicamentos y tecnología, las presiones para incorporar toda la medicación de alto precio que va surgiendo a nivel internacional, son funcionales al lucro dentro del sector y van en desmedro de la calidad de la atención”, advierten trabajadores y usuarios.
Proponen asimismo realizar campañas de promoción y educación para la salud en los medios utilizando el mecanismo previsto en la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, que dispone la gratuidad de las campañas de bien público.
Finalmente, en términos de gestión, sugieren fortalecer la rectoría del MSP en las políticas de salud, con un desarrollo mayor de las funciones de control y fiscalización y con un presupuesto “acorde a sus responsabilidades en un sistema de la complejidad y dimensiones del SNIS [Sistema Nacional Integrado de Salud], con personal altamente calificado, remuneraciones adecuadas, dedicación exclusiva”.
Sugieren que ASSE se integre a la Junasa para “fortalecer el rol” de este último organismo, crear redes de salud por territorio y estimular la participación mediante la creación de un Premio Nacional a la Participación Social en Salud, que sirva para difundir experiencias exitosas.
A nivel de recursos humanos, las organizaciones proponen que se diseñe un plan a 25 años. Recomiendan que se defina un “Plan para completar estudios”, tendiente a que todos los funcionarios puedan completar bachillerato, y sugieren que el sistema se trace la meta de lograr 1.000 nuevos licenciados en enfermería por año a nivel nacional. Recomiendan asimismo que se promueva una investigación “sobre los factores de enfermedad, insatisfacción y estrés en el trabajo”, y que, a partir de los resultados de dicho estudio, se evalúe la necesidad de aplicar un “régimen jubilatorio bonificado” para algunos sectores.
A dedo, no
Las organizaciones proponen establecer el llamado a concurso como mecanismo de acceso a todos los cargos medios y altos, hasta un nivel a definir, en las instituciones de salud. Sugieren establecer “topes razonables” a los ingresos gerenciales en el sector, así como dictaminar la dedicación exclusiva para los cargos de dirección. Se procura de este modo “asegurar la transparencia y combatir el conflicto de intereses en la gestión de todas las instituciones de salud públicas y privadas”.