C 1080 es una de las agrupaciones más esperadas en el concurso oficial cada carnaval. Los grandes espectáculos que brindó en los últimos tiempos dejaron la vara bien alta y la expectativa para cada febrero de qué va a hacer Cuareim este año. Y para 2023, la idea del hilo conductor del espectáculo fue mutando hasta llegar a “Madraza”.
Si bien el show candombero arranca a todo trapo con un homenaje a los 100 años de Carlos Páez Vilaró y a toda su obra, la propuesta gira hacia la historia de una Mama Vieja, que desde el balcón y la puerta de su casa va recorriendo su vida y la de otras mujeres como ella. Hace hincapié en todo lo que simboliza la figura de la “reina de la comparsa” para el ambiente del candombe y la comunidad.
Valeria Ferreira, actriz y cantante, que llegó el año pasado para sumarse a la comparsa del Barrio Sur, es quien caracteriza a esa madraza de la 1080. La artista lleva adelante los diálogos intermedios junto a Nacho Cardozo y es protagonista en casi todos los cuadros, en un contexto de sutil despliegue y puesta en escena de calidad, como ya es habitual en la agrupación.
Tras su primera pasada por el Teatro de verano, Ferreira habló con la diaria sobre la recepción que tuvo el espectáculo en el público: “Por lo que vi, la gente piró. Ya en los ensayos nos venían diciendo que esto era algo novedoso, que nunca se había contado la historia sobre un personaje típico de la comparsa. Cuando traen la idea allá por agosto, le tenía como un respeto especial y me preguntaba si era la persona indicada para hacerlo. El equipo técnico confió en mí. Hubo mucho trabajo de campo, meterse en la tierra, preguntar”.
“Metimos mano en el texto, como que lo maceramos mucho. Era el homenaje que le queríamos hacer a esta mujer”, señala Ferreira, quien trabajó en la elaboración del personaje junto a Nacho Cardozo, encargado de la puesta en escena y su partenaire en la obra. Pablo Pinocho Routin, guionista del espectáculo, y el propio Mathías Silva, uno de los directores de la comparsa y jefe de cuerda.
Durante el proceso creativo, los técnicos de C 1080 también entrevistaron a dos mamas viejas icónicas del carnaval uruguayo: Yully Da Chaga, conocida como Biga Mama, y Faustina Avelino, la popular Tía Tina, quien fuera declarada ciudadana ilustre de Montevideo en 2017. Ambas fueron invitadas por la comparsa el miércoles en el Ramón Collazo y presenciaron el espectáculo en primera fila.
Respecto de la responsabilidad artística que le tocó asumir, Ferreira reconoce: “Al principio pensé que era enorme para mí. Y se los dije sinceramente. Es mi segundo año en comparsas recién. Pero querían a alguien que pudiera cantar, bailar y actuar. Había que definir medio rápido y querían probar conmigo. Es un gran desafío, porque a nivel interpretativo te coloca en otro lugar”.
Más identificada con el mundo de la comedia musical, la artista desembarcó en la comparsa a través del maestro Juan Steiner, su director musical: “Yo entré gracias a Juan. Había trabajado con él y es como una garantía de que se empieza a ensayar con puntualidad, de que hay un orden, de que las cosas van a estar buenas. Con la comparsa se trabajó espectacular, con mucho profesionalismo. Si bien es un equipo combinado, donde hay gente que no es profesional y otra que sí, pudimos dialogar muy bien y el resultado es el que se vio. No hay magia”.
El respeto
“Mire que no por colgarse un tambor la gente se hace negra de golpe, y mire que por ser bajita, negra y gordita, cualquiera se transforma en Mama Vieja”, afirma la Madraza en una de sus escenas. La comparsa también se anima a lidiar con un tema que hoy por hoy vuelve a estar sobre la mesa, como el de la participación y protagonismo de las personas que no son negras dentro del candombe.
“Es una manera que tenemos de decir que, si bien es una comparsa de Negros y Lubolos y el candombe está mucho más abierto, hay que acercarse desde el respeto. Es un poco el camino que hice, humildemente. Saber de qué va esto. ¿Qué es una Mama Vieja? No fue ponerse una pollera y empezar a bailar. Hay un camino y mucha historia detrás de estas mujeres”, asegura Ferreira.
“Todos son bienvenidos al candombe, pero interiorizándonos de qué se trata. Que es parte de nuestra cultura y el patrimonio inmaterial que tenemos en nuestro país. Vamos a defenderlo desde el amor y desde el respeto”.
La actriz, en definitiva, se muestra “agradecida” al carnaval, al que define como “una fiesta para compartir, para conocer. Yo estoy conociendo a muchos artistas y colegas. Es una oportunidad de acercarnos a la gente y de llevar espectáculos de calidad, que por lo que hemos visto son muchos los que están muy bien”.
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