El ambiente musical rioplatense está de luto: ha muerto Rodolfo García, cofundador de Almendra, posiblemente la banda más influyente para el rock predictaduras. La noticia no fue imprevista, porque hace unos días, el 28 de abril, el baterista habría sufrido un accidente cerebrovascular que lo obligó a internarse. Finalmente, murió en la mañana del martes, a los 75 años.
Su seminal cruce con Luis Alberto Spinetta en el barrio bonaerense de Belgrano ocurrió cuando tenía 17; el Flaco tenía 13. Educado como acordeonista pero apasionado de la batería, García emprendió distintas formaciones rockeras con ese guitarrista y poeta precoz, que en 1967 confluyeron, junto al guitarrista Edelmiro Molinari y el bajista Emilio del Guercio, en Almendra. Sus compañeros esperarían a que García regresara del servicio militar para grabar y lanzar en 1969 su primer simple, “Tema de Pototo”, y luego el larga duración epónimo Almendra, ese que traía, contrabandeado entre himnos serenos como “Muchacha (ojos de papel)” y “Plegaria para un niño dormido”, locomotoras como “Ana no duerme”.
La ductilidad y el rango de García, que podía tocar blues y jazz con soltura, eran buena compañía para el expansivo universo lírico y melódico de Spinetta, y la combinación de sus talentos sintonizaba con la nueva cultura juvenil de fines de los 60, entre revolucionaria y masificada. De entre todos los músicos que acompañaban ese cambio de sensibilidad, tal vez los Almendra hayan sido quienes más contribuyeron a instalar la idea de que había un rock “progresivo” (por oposición a la música juvenil comercial) que iba a acompañar las transformaciones de la sociedad.
La carrera de Almendra fue breve, y luego del igualmente influyente disco doble Almendra II (1970), la sociedad musical se desbandó: Spinetta siguió solo y armó Pescado Rabioso, mientras que Del Guercio y García formaron Aquelarre. Ambos músicos volvieron a colaborar con Spinetta en Artaud (1973), considerado uno de los picos creativos del Flaco.
Spinetta y García se cruzaron en muchos escenarios -además de en la reunión ochentera de Almendra- y siempre manifestaron la continuidad de su admiración mutua y amistad. García permaneció activo y en 2019 había vuelto a grabar con Jaguar, su banda de jazz rock.