El viernes 3 de noviembre el teatro Solís tendrá un reencuentro y una visita de lujo cuando vuelva a subir a su escenario el Ballet Contemporáneo del Teatro San Martín luego de una ausencia de más de una década. La excusa será el espectáculo Cantata, del coreógrafo italiano Mauro Bigonzetti, uno de los mejor considerados en su rubro.
La obra, creada originalmente en 2001 para el Ballet Gulbenkian de Lisboa, es descripta por la información oficial como “una coreografía que bulle con los típicos y vibrantes colores del sur de Italia. Sus gestos apasionados y viscerales evocan el estilo de belleza del Mediterráneo. Con una danza instintiva y vital, Cantata explora las diferentes facetas de una relación”. Cantata será interpretada por una compañía de 24 bailarines, con un estilo coreográfico poco visto en nuestro país.
El texto oficial también califica al Ballet Contemporáneo del Teatro San Martín como “la compañía de danza más importante de la Argentina”, y a eso refirió en charla con la diaria su directora, Andrea Chinetti. “No hay muchas compañías de danza contemporánea en Argentina. Estamos nosotros, está el Ballet Nacional, y después hay grupos independientes. Esta compañía ya tiene 46 años de trayectoria, con mucho repertorio bailado, y sí, es la más importante”.
Para Chinetti, dirigir la compañía es un orgullo: “Se siente muy bien. Tratando de mantener siempre el repertorio, el nivel, dando nuevos elementos a los bailarines para que sigan creciendo. Es una gran responsabilidad. Yo crecí en esta compañía, estudié en la escuela de esta compañía, así que para mí es un orgullo estar ahí, tratando de que todo salga lo mejor posible”.
“Cantata es una obra que programé porque me gustaba el estilo y de qué trataba. Son canciones italianas antiguas que hablan de toda la belleza de la Italia mediterránea, de sus colores, sus personajes y sus pueblos, y de los conflictos entre los hombres y las mujeres de esos pueblos. Cuando programo voy buscando cosas que nos vayan enriqueciendo”, afirmó la directora.
Bigonzetti montó la obra y regresó a Europa, así que Chinetti se encargó de ver y corregir durante los ensayos. “Él es el coreógrafo, yo dirijo todo lo que es el montaje, el estar en el escenario y el entrenamiento de los bailarines. Se fue súper contento, le encantó trabajar con este equipo, bailarines, asistentes, maestros. Estaba muy feliz de que los bailarines interpretaran muy bien lo que quería mostrar, desde lo latino y esta sangre italiana que nosotros también tenemos. Es muy importante para él mostrar lo que son esos pueblos y quedó con muchas ganas de volver a montar algo en la compañía”.
La directora también se refirió al regreso a nuestro país, que se da en el marco de un convenio entre el Complejo Teatral de Buenos Aires y la Intendencia de Montevideo, que incluyó la coproducción de Fausto por el elenco de la Comedia Nacional y la presentación de Constante en el teatro San Martín. “Nos sentimos muy felices. Quiero agradecer por el esfuerzo que han hecho tanto Uruguay como Argentina, nuestra dirección y la dirección del Solís, y todos los que hicieron posible que esto sucediera en un momento tan difícil para mover una compañía de casi 30 personas viajando", dijo.
“Estamos súper contentos de poder ir nuevamente. Me encantaría que pudiera ser todos los años, pero eso no depende de mí. Montevideo me encanta, yo trabajé muchísimo con el Sodre montando obras de Mauricio Wainrot, y me han invitado a la Escuela del Sodre a dictar cursos, así que conozco muy bien toda la danza en Uruguay”, dijo Chinetti y remató: “Cuando fuimos la vez anterior, hace 11 años, estuvimos en el Solís, así que conozco muy bien el teatro. Es hermoso, muy bello”.
Cantata, el viernes 3 a las 20.00 en el teatro Solís. 70 minutos. Entradas desde $ 500 a $ 1.800 en Tickantel y boletería.