La edición número 32 de Divercine, que comenzó el 1º de agosto, ya transita su segunda mitad. Este año el festival abrió con la celebración de los diez años de la película de animación uruguaya Anina (Alfredo Soderguit, 2013) y cerrará el sábado 26 –igual que el año pasado– con la actuación de Ruperto Rocanrol en el Centro Cultural de España (CCE, Rincón 629), con entrada libre. Después del cierre del festival y de la entrega de premios, la banda de Roy, Bruno y Pablo Berocay pondrá la música para divertirse y bailar juntos las canciones ya convertidas en clásicas y otras recién estrenadas.
El festival ha convocado a más de 600 niñas y niños en las dos funciones de extensión que ofrece cada miércoles en Cinemateca, y ha tenido una muy buena recepción en las diversas localidades de todo el país a las que ha llegado. Todavía quedan funciones en Cinemateca, el CCE, la sala Lazaroff, el castillo Idiarte Borda, el Espacio Cultural Las Bóvedas, La Experimental de Malvín, Crece, el Centro Cultural Artesano, la Facultad de Ciencias y también en el interior del país (restan funciones en Parque del Plata y Chuy); la programación se puede consultar en www.divercine.com.uy .
Tótem
Se destaca la proyección, este sábado a las 16.00 en Cinemateca, de la película neerlandesa Tótem (Sander Burger, 2022), recomendada para niños y niñas de diez años en adelante, que se ofrece subtitulada al castellano. La protagonista, Ama, es una niña de diez años, hija de refugiados senegaleses. Ella se siente completamente neerlandesa –identidad que se manifiesta de forma paradigmática en su dominio fluido de la lengua, algo que contrasta con el resto de su familia– y la película narra su periplo por la ciudad de Róterdam en busca de su padre, luego de que detienen a su madre y a su hermano menor para deportarlos a su país de origen. Ama es una buena alumna en la escuela, sueña con ser nadadora olímpica como su admirada Ranomi Kromowidjojo y es, de toda su familia, la más adaptada a la sociedad en la que vive y de la que siente que forma parte.
La aprehensión de su madre y su hermano –y de todos los que viven en su edificio en idénticas condiciones– desencadena el conflicto: al tiempo que es buscada para ser deportada junto a su familia, ella busca a su padre porque lo que desea es permanecer en Holanda junto a él. El drama de los refugiados africanos en una Europa que no los acoge, o que los acoge de una manera y con límites que siempre resultan arbitrarios e inhumanos al mirarlos de cerca, aparece al desnudo en esta historia que se centra en la rebeldía de la niña y en sus avatares.
En ese periplo, a Ama la acompaña un extraño amigo –un puercoespín gigante– que le indica el camino, la consuela, le hace compañía, la calma, se deja mimar. Es el tótem del título, que evoca creencias que la conectan con sus orígenes y que le da una clave mágica a la película. Esa criatura fantástica, invisible para el resto, le permite a Ama mantener la esperanza de llegar a buen puerto, y a nosotros, los espectadores, dejarnos llevar por la fantasía, acurrucarnos –también– en su ternura.
En la narración se entrelazan distintas búsquedas: la de Ama, la del padre, la de la madre policía de Thijs, el mejor amigo de la niña, la del propio Thijs. Hay en la huida de Ama un camino de autodescubrimiento y reconocimiento de su identidad tanto neerlandesa como senegalesa, y de defensa de su cultura. Hay, también, una historia de amistad que termina siendo fundamental en el desenlace. También es protagonista la ciudad, que detrás de su orden y pulcritud muestra su rostro más hostil, que no siempre ofrece abrigo.
Tótem ofrece la oportunidad de acercarse a un asunto de dolorosa actualidad desde una perspectiva honesta, de la mano de un elenco que muestra muy buenas actuaciones (se destaca, por supuesto, la de la protagonista, encarnada por la joven actriz Jean-Philippe Amani), que nos conmueven y nos permiten ir a su lado.
Animación a la lectura
Desde este sábado hasta el 11 de noviembre, los sábados de 11.30 a 13.30 en el Centro Cultural de España (Rincón 629) se llevará a cabo la segunda edición del espacio de animación a la lectura a cargo de la escritora cubana Yumié Rodríguez. Esta vez el abordaje será desde el teatro: lectura, actuación, narración, expresión corporal, voz, dicción y música serán parte de la propuesta para recrear personajes en el escenario, con la consigna de que “leer no es obligatorio, es una diversión”. La actividad está dirigida a niñas y niños de seis a nueve años y es con entrada libre hasta agotar los cupos; se recomienda la participación en los diez encuentros.
Encanto al Alma en la Zitarrosa
La banda de música para la infancia, liderada por Leticia Passeggi, vuelve a la sala Zitarrosa, en el marco del ciclo Jarana, el domingo a las 17.00. Allí presentará el espectáculo Encanto de nuestra tierra, que se estrenó en sala Hugo Balzo con cuatro funciones colmadas en mayo de este año. Encanto al Alma es una propuesta de canciones para niños, niñas y familias que cuenta con cinco discos, diez espectáculos estrenados (entre ellos El plan colibrí, que recibió el premio Florencio en la categoría espectáculo infantil en 2022), videos de sus canciones que suman más de siete millones de reproducciones en Youtube, y una fuerte presencia en instituciones educativas del país y la región. Las entradas están a la venta por Tickantel a $ 500.