El teatro Solís anunció la puesta en funcionamiento de una serie de dispositivos que permiten que las personas sordas o hipoacúsicas puedan acceder a una experiencia más completa de los espectáculos escénicos.
Se trata de chalecos que, mediante una conexión con la consola de sonido de la sala, “traducen” las señales de distintos instrumentos o voces y las envían a diferentes placas adosadas a la vestimenta. Aunque el Gran Teatro Nacional de Lima hizo una prueba con aparatos similares en 2023, el Solís será el primero de la región en incorporarlos integralmente a sus espectáculos.
“Trabajar en accesibilidad ha sido un eje prioritario de esta gestión y el abordaje de estas líneas parte de la conciencia del acceso a las artes escénicas y la cultura como un derecho humano”, explicó a este medio Malena Muyala, directora del Solís.
“Desde inicios de 2022 comenzamos a implementar un plan de acción que nos ha llevado a generar acuerdos con referentes como UNIT, realizar reformas edilicias, incorporar diferentes herramientas de lectoescritura, capacitar al personal. Fuimos la primera institución de América del Sur en arribar a un acuerdo integral de innovación en accesibilidad con Timmpi, empresa líder en el tema, radicada en Francia, presente desde 2014 en más de 100 festivales y salas de conciertos de Europa y América”, agregó.
“Este modelo de chaleco se ha ido perfeccionando en los últimos tiempos, con mayor cantidad de transductores de frecuencias, llegando hoy a reproducir una parte importante del espectro perceptible, privilegiando la conducción ósea”, explicó Muyala. En 2022, el Solís empezó a probar los equipos con personas sordas e hipoacúsicas, en un estudio que también incluía la viabilidad de las frecuencias utilizadas.
Magela Brun, responsable del área de Cultura Inclusiva de la Secretaría de Discapacidad de la Intendencia de Montevideo, fue una de las personas que testearon el sistema. “Volver a sentir música suave, completar el tema de Zitarrosa 'Candombe del olvido' luego de más de 15 años hizo que fuera una experiencia mágica. Me di cuenta de que todas aquellas músicas de mi juventud, aquellas que ya no podía oír ahora podía hacerlo mediante el chaleco, percibiéndolas mediante vibración. La tecnología avanzada, cuando se emplea para concretar derechos humanos como es el acceso a algo tan maravilloso como la música, sencillamente se vuelve mágica”, dijo en su momento.
Adaptable
Para los usuarios, el sistema no requiere nada especial, más allá de la colocación del chaleco. Cada espectador podrá ajustar algunos parámetros de acuerdo a sus preferencias. Su uso no tendrá un costo extra.
“Haber logrado prescindir de cables y enchufes gracias a la tecnología en ondas VHF desarrollada por Timmpi permite la autonomía de la persona durante la experiencia, por lo que el lugar a elegir en la sala no tendrá ninguna restricción ni costo extra”, agregó Muyala.
El equipo del Solís está ajustando el protocolo de uso de los seis chalecos adquiridos, que tendrá una “presentación en sociedad” próximamente. El acuerdo que permitió la adquisición de los dispositivos vibratorios de baja frecuencia fue posible gracias a la Fundación de Amigos del Teatro Solís.