Pasaron 19 etapas del Tour de Francia y la carrera está sentenciada. Nadie más como Tadej Pogacar se merece el maillot jaune, el que ganará por cuarta vez en seis ediciones. Estamos, sin dudas, ante un nombre que será recordado en todos los manuales de la historia del deporte, más allá de que el esloveno todavía sea un joven de 26 años.
Pogačar (UAE) no sólo resistió todos los ataques que le propuso su máximo contrincante, Jonas Vingegaard (Visma), sino que, muy por el contrario, planteó una carrera agresiva. Ya en la primera semana dejó en claro que iba a apostar a ganar etapas, cuando en la cuarta, una que ni siquiera era de montaña pura y dura, estampó su firma como primero. Porque Pogačar tiene hambre y no le alcanza con el título máximo del Tour de Francia: quiere ir por los récords de etapas ganadas. En este de 2025 ya conquistó cuatro, lleva 21 en total (104 en todas las carreras) y contando.
Vingegaard, que lo intentó entre jueves y viernes, en dos etapas durísimas de montañas pirenaicas, parece haber tirado la toalla: “Ha sido el más fuerte, merece ganar. Hay un momento en el que tienes que aceptarlo y lo acepto”, dijo el danés al termino de la competencia del viernes. Y es así, porque los casi cuatro minutos y medio de ventaja en favor de Pogačar son imposibles de descontar en dos etapas, salvo alguna tragedia.
En la pantalla
La etapa de sábado (va por Disney+ y ESPN) va de Nantua a Pontarlier, será de media montaña, tendrá 184.2 kilómetros con un desnivel de 2.900 metros. Un infierno si se toma en cuenta que los físicos de los ciclistas en estos momentos están al borde de sus posibilidades.
Es un recorrido típico para clasicómanos –aunque van quedando pocos en competencia–. Habrá un pequeño perfil montañoso con un puerto de tercera categoría prácticamente en el inicio, a 25 km de la largada, después de ese descenso habrá otro puerto de cuarta categoría, y tras un recorrido sinuoso durante 90 km más, en los últimos 50 km los esperan un puerto de segunda y al final otro de cuarta categoría. Será una carrera ideal para la fuga.
La última etapa vuelve a París. Parece raro decirlo porque la capital francesa es un clásico en las llegadas, pero el año pasado no recibió el final –fue en Niza– porque estaban preparando la ciudad para los Juegos Olímpicos.
Los Campos Elíseos esperarán al pelotón –o a los escapados, por qué no–. Será un espectáculo hermoso para ver en la TV, con siete vueltas por los lugares más icónicos de París, pero además con la sorpresa de que las tres últimas serán con pasaje por Montmartre, donde la subida de la colina –a los efectos del ciclismo tiene una pendiente de un km al 6%–, seguramente tendrá a una multitud en la calle, tal como se dio en la competencia de ciclismo de los Juegos Olímpicos parisinos.
Será un broche de oro.
Los ganadores
La clasificación general tiene a Pogačar como primero y será él quien se vista de amarillo al final del Tour, lo que cuenta para los libros. En estos momentos le lleva 4’24 a Vingegaard y 11’09 al tercero, el alemán Florian Lipowitz (Bora). Este parece ser el podio final, porque Lipowitz en la etapa de ayer estiró diferencias sobre el cuarto, el británico Oscar Onley (Picnic), a quien le sacó un minuto y tres segundos. Felix Gall (Decathlon), Tobias Halland Johannessen (Uno-X), Kévin Vauquelin (Arkéa), Primoz Roglic (Bora), Ben Healy (EF) y Ben O’Connor (Jayco) serán quienes integren el nunca despreciable top 10 de la general.
Pogačar, además, es muy factible que gane el premio de la Montaña, donde aventaja a Vingegaard por siete puntos y a Lenny Martinez (Bahrain) por 20; de seguir todo así, Lipowitz será el ganador de la clasificación de los jóvenes; el italiano Jonathan Milan (Lidl) ganará el maillot verde de la clasificación por puntos; mientras que por equipos los mejores serán el Visma, aunque no se puede descuidar de un UAE que está a 24’26 minutos.