En el marco del Mes de las Personas con Discapacidad, que se realiza en diciembre, el titular del Ministerio de Desarrollo Social (Mides), Martín Lema, anunció que desde el lunes el servicio de orientación a mujeres en situación de violencia de género 0800 4141, del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), es accesible para mujeres sordas. “Es un paso más para presentar una mayor accesibilidad en diferentes características y modalidades”, expresó Lema al portal de Presidencia durante la inauguración de obras en la sede central del Mides.
A través de una videollamada al 092 626 928, de lunes a viernes entre las 9.00 y las 14.30, las mujeres sordas “podrán contar con una intérprete que se contactará con las operadoras especializadas en violencia del servicio para consultar, informarse y recibir información cuando estén en una situación de violencia doméstica”, explica un video publicado en Twitter por la Secretaría Nacional de Cuidados y Discapacidad del Mides. El material difundido aclara que no es un servicio “para denunciar emergencias” ni “pedir ayuda urgente”.
ATENCIÓN
— Secretaría Nacional de Cuidados y Discapacidad (@SNCDuy) December 12, 2022
A partir de este lunes, el servicio de orientación a mujeres en situación de violencia doméstica del @midesuy también es accesible para mujeres sordas.
Videollamada de lunes a viernes de 9 a 14:30 hs.
092 626 928 pic.twitter.com/5u60rDBnB6
Durante el evento del lunes, la directora de Discapacidad de la secretaría, Karen Sass, dijo al portal de Presidencia que la incorporación de este servicio es un avance para que los servicios de respuesta a la violencia de género sean accesibles efectivamente para todas las mujeres. A su vez, apuntó que las mismas operadoras que asesoran “al resto de las mujeres” serán las que orientarán a las mujeres sordas. También informó que el servicio contará con seis intérpretes.
Un “debe importante”
En diálogo con la diaria, la coordinadora del sistema de respuesta a la violencia basada en género de Inmujeres, Adriana Fontán, explicó que la iniciativa surgió a partir de las demandas de mujeres sordas ante la dirección de Discapacidad del Mides por las “barreras en la comunicación” que enfrentan para acceder a distintos servicios, entre ellos el asesoramiento y orientación en situaciones de violencia.
A la vez, la coordinadora señaló que en el proceso de elaboración participaron integrantes del instituto, de la dirección de Discapacidad, intérpretes del Centro Nacional de Discapacidad Visual y mujeres sordas para garantizar que la atención funcionara de forma adecuada. “La llegada a la población objetivo del servicio es fundamental. Entonces, en diferentes instancias, levantamos sus aportes y compartimos con ellas los avances que veníamos realizando”, contó.
“El proceso fue muy participativo en el sentido de que requirió la puesta en común de aspectos metodológicos en el abordaje en violencia doméstica, pero también técnicos para las videollamadas y poder comunicarse oportunamente con la operadora del 0800 para tener su intervención. Por fin pudimos lograrlo y poner este servicio a disposición”, expresó Fontán.
La coordinadora subrayó que este “no es un servicio para denunciar” situaciones de violencia de género pero que, en el caso de que una mujer plantee su decisión de iniciar un proceso judicial, va a recibir asesoramiento para poder hacerlo. Además, remarcó que tampoco es un servicio para emergencias. “En esas situaciones siempre se debe llamar al 911”, recordó. De todas formas, aseguró que, “si la situación requiere una coordinación urgente con la Policía, se puede hacer”.
Las operadoras del servicio también realizarán la coordinación correspondiente en las situaciones en que las mujeres sordas requieran una atención presencial y se comunicarán con el Centro Nacional de Discapacidad Visual para que cuenten con una intérprete en el momento de la consulta. Si bien esto ya ocurre, el servicio permitirá agilizar este trámite, explicó Fontán.
La coordinadora sostuvo que para el sistema de respuesta a la violencia basada en género de Inmujeres es una “gran alegría” habilitar este servicio porque tenían “un debe importante con esta población de mujeres”.