El sumo pontífice se encuentra en Canadá, en donde pidió perdón por los abusos cometidos contra niños indígenas en escuelas católicas desde fines del siglo XIX hasta 1990. Francisco aprovechó la ocasión para anunciar el inicio de la gira mundial más extensa que haya emprendido un papa. “Durante los próximos meses voy a visitar 97 países, a los que voy a ir a pedir perdón por numerosos actos reñidos con la moral cometidos por instituciones católicas. Quiero dejar en claro que no son todos los países a los que debería ir a pedir perdón, pero ocurre que soy una persona que ya tiene sus años, así que tampoco podría recorrerme el mundo entero”.
La mayoría de los pedidos de perdón de Francisco estarán relacionados con casos de pedofilia y abuso sexual, aunque también habrá lugar para los episodios de complicidad o pasividad ante regímenes autoritarios, como el nazismo o la dictadura argentina. “Para un católico, pedir perdón por los pecados cometidos es algo que refuerza su fe. Así que yo, tras la gira, pienso volver al Vaticano cuatro millones de veces más católico”, sostuvo.
El futuro: Francisco aclaró que pedirá perdón solamente por los pecados cometidos hasta ahora. “Los que se están cometiendo o se van a cometer se los dejo al próximo papa”.