El jueves pasado, un adolescente de 13 años mató a su padre, de 41 años, en una casa que funcionaba como una boca de venta de drogas en Florida, en el barrio Prado Español. Pasadas las cinco de la mañana, la Policía fue a la vivienda ubicada en la calle Batlle y Ordóñez y se encontró al hombre asesinado sobre una cama, con una herida de arma de fuego en la cara.
Su hijo había viajado hasta el lugar y luego retornado a Montevideo, donde se entregó tras contarle a su madre lo que había sucedido. La Fiscalía de Florida de segundo turno se hizo cargo del caso. El adolescente fue imputado por homicidio especialmente agravado por el vínculo de parentesco.
Según informó Telemundo, el adolescente actuó en defensa propia tras una discusión con su padre, que le apuntó con un arma. La discusión se dio porque el adolescente le pidió a su padre que dejara de fumar pasta base y arrojó al piso la droga que el hombre había comprado, por lo que este reaccionó, lo tomó del cuello y le pegó. Luego, le apuntó con un arma.
Forcejearon y el adolescente se hizo del arma y le disparó. Luego, se tomó un ómnibus a Montevideo y cuando llegó a su casa le contó a su madre lo que había pasado. Junto a la mujer, se entregó en una dependencia policial, donde confesó la autoría del crimen.