En una entrevista con medios locales consignada por la agencia de noticias AFP, el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergéi Lavrov, manifestó que los objetivos militares de su país en Ucrania no están centrados en este momento “únicamente en el este del país” debido a que el permanente suministro de armas por parte de las potencias occidentales al gobierno de Kiev obligó al Kremlin a cambiar de planes.
“No se trata únicamente de las repúblicas de Donetsk y Lugansk, sino también de la región de Jersón, la de Zaporiyia y otros territorios”, aseguró Lavrov al referirse a los objetivos fijados por los mandos militares rusos en el marco de la guerra que comenzó hace ya casi cinco meses. El máximo jerarca de la diplomacia rusa advirtió que, si las potencias occidentales siguen enviando armas capaces de golpear a larga distancia, como los lanzacohetes múltiples estadounidenses, seguirán revisando sus objetivos militares.
“No podemos permitir que, en la parte de Ucrania controlada por [Volodímir] Zelenski o su reemplazante, se encuentren armas que pueden amenazar directamente nuestro territorio o el de las repúblicas que declararon su independencia o quieren elegir su futuro solas”, manifestó Lavrov.
En el mismo contacto con los medios, en un tono muy duro, el diplomático descartó de plano la posible reanudación de las negociaciones de paz con los ucranianos en estos momentos.
Lavrov expresó que los últimos contactos directos entre las partes, en abril, demostraron, a su criterio, que Ucrania no tenía “deseo de discutir nada en serio”. “[Las conversaciones de paz] no tienen ningún sentido en la situación actual”, sentenció el alto jerarca del Kremlin.
En el terreno militar, este miércoles los ataques rusos impactaron en varios puntos de Ucrania, el más cruento de ellos en la ciudad de Járkov, la segunda más importante del país, situada en el noreste, muy cerca de la frontera con Rusia, donde los bombardeos provocaron la muerte de 13 civiles, entre ellos un niño de 13 años.
El manifiesto predominio ruso en las acciones militares está generando múltiples reacciones a nivel mundial. El miércoles, el principal vocero del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Kirby, dijo que Rusia está sentando las bases para la anexión de partes del territorio ucraniano y está instalando funcionarios afines en áreas bajo su control, ya que busca ejercer un control total sobre los territorios que conquistó en el este del país.
De acuerdo a lo que consignó Reuters, el funcionario estadounidense dijo en una conferencia de prensa en la Casa Blanca que Moscú ya está poniendo en marcha un plan para establecer el rublo como la moneda oficial en las zonas ocupadas y obligar a los residentes a solicitar la ciudadanía rusa.
Primera dama en Washington y anuncios europeos
En el marco de su visita a Estados Unidos, la primera dama ucraniana, Olena Zelenska, brindó un discurso ante el Congreso en el que llamó a los legisladores a que apoyen al gobierno de Joe Biden y prosigan enviando armamento para afrontar la guerra contra Rusia. “Estoy pidiendo armas, armas que no se usarían para librar una guerra en el territorio de otros, sino para proteger el hogar de uno y el derecho a despertar con vida en ese hogar”, expresó Zelenska en tono emotivo, según informaron agencias internacionales.
Tanto el presidente Biden, con quien se reunió el martes, como el Congreso mostraron desde el comienzo del conflicto bélico una determinación prácticamente unánime de apoyar militarmente a Kiev.
Desde que empezó la invasión rusa a Ucrania, el 24 de febrero, Estados Unidos envió al gobierno que preside Volodímir Zelenski aproximadamente 7.000 millones de dólares en equipamiento militar.
Hablando sobre este tema, la Unión Europea (UE) anunció este miércoles que proporcionará 500 millones de euros en asistencia militar a Ucrania. Según dijo el jefe de la diplomacia europea, el español Josep Borrell, la asignación de este nuevo paquete de ayuda militar servirá para “apoyar aún más a las fuerzas armadas de Ucrania”, y destacó que la UE sigue “enfocada y firme” en su apoyo a Kiev.
Además, informó eldiario.es, la UE también se dispone a adoptar un nuevo paquete de sanciones contra Moscú, el séptimo desde que empezó la guerra. De acuerdo a lo que consignó el periódico español, los países del bloque comunitario acordaron la prohibición de las importaciones de oro de origen ruso, incluidas las joyas; la congelación de los activos del banco Sberbank; más sanciones a personas y entidades; y el “compromiso de que las sanciones no pondrán en peligro la seguridad alimentaria y energética en todo el mundo”.