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Rescatistas ucranianos en un edificio residencial dañado por un bombardeo, en la ciudad de Chasiv Yar, el 10 de julio, en la región de Donetsk, Ucrania.

Foto: George Ivanchenko, EFE

Ucrania espera que Rusia intensifique su ofensiva sobre las zonas del Donbás que aún no están bajo su control

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Zelenski pidió a jefes militares que elaboren planes para reunir un ejército de “un millón de hombres” para recuperar los territorios perdidos en el sur.

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Leído por Mathías Buela.
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Autoridades militares ucranianas advirtieron que Rusia se está preparando para intensificar los combates en las ciudades que aún no están bajo su control en el óblast (provincia) de Donetsk, en el este del territorio ucraniano.

“Hay indicios de que las unidades enemigas se preparan para intensificar las operaciones de combate en los frentes de Kramatorsk y Bajmut”, expresaron desde el Estado Mayor, refiriéndose a dos ciudades de Donetsk que aún están bajo el control de Kiev, informó la agencia AFP. Esta zona del país sigue siendo el foco principal de una ofensiva rusa que lleva varias semanas y que sigue a la toma de Lugansk, el óblast que junto a Donetsk conforman la región del Donbás. En el marco de esta ofensiva las fuerzas rusas perpetraron un feroz ataque contra una zona residencial de la pequeña localidad de Chasiv Yar, que ya costó la vida de 33 personas.

Desde Moscú, el portavoz del Ministerio de Defensa, Igor Konashenkov, hizo este lunes una referencia bastante difusa sobre el ataque. El funcionario del Kremlin, cuyas declaraciones fueron consignadas por la cadena panárabe Al Jazeera, afirmó que “más de 300” combatientes ucranianos habían muerto en un ataque ruso cerca de Chasiv Yar, pero no dio la fecha ni ningún otro detalle sobre esta incursión bélica.

Pero si bien los rusos están centrando la mayor fuerza de sus ataques en esa zona, también bombardearon otras ciudades ucranianas. El lunes la oficina del fiscal general de Ucrania informó que por lo menos seis personas murieron como consecuencia de misiles que cayeron en la ciudad de Járkov, la segunda más grande de Ucrania, ubicada en el noreste del país, muy cerca de la frontera con Rusia. La ciudad y sus alrededores vienen padeciendo numerosos ataques desde el comienzo de la invasión, hace más de cuatro meses, pero la región sigue bajo control ucraniano. Luego del ataque del lunes el alcalde de Járkov, Ihor Terekhov, dijo que los bombardeos alcanzaron infraestructuras civiles, incluyendo una propiedad comercial y un taller de reparación de neumáticos. Se trata de “lugares que no tenían importancia militar”, se lamentó el jerarca.

Mientras los ataques rusos persisten y la población civil ucraniana está abandonando las zonas de combate a pedido de las autoridades, el presidente, Volodímir Zelenski, pidió a los jefes militares que elaboren planes para reunir una fuerza de combate de “un millón de hombres”, equipada con buenos armamentos para recuperar los territorios perdidos a manos de los rusos en el sur del país, dijo el ministro de defensa del país, Oleksii Reznikov. En una entrevista con el periódico británico The Times, Reznikov dijo que el presidente había dado la orden de recuperar las áreas ocupadas alrededor de la costa del mar Negro que son vitales para la economía del país.

“Entendemos que, políticamente, es muy necesario para nuestro país. El presidente ha dado la orden al jefe militar supremo de elaborar planes. Después de eso, el personal general está haciendo su tarea y dice que para lograr este objetivo necesitamos determinados elementos”, expresó el ministro ucraniano.

Reznikov dijo también que estaba manteniendo contactos con sus homólogos de los países socios para hablar sobre este plan. El ministro manifestó que primero deben explicar “por qué necesitamos este tipo de armamento para luego tomar las decisiones políticas”.

Por su parte, otro alto funcionario ucraniano, el secretario del Consejo de Seguridad y Defensa Nacional, Oleksiy Danilov, dijo este lunes en declaraciones consignadas por el portal Europa Press que el suministro de armamento por parte de las potencias occidentales ya está “cambiando el curso de la guerra”, a pesar de que apenas han comenzado a llegar. Estas declaraciones, como así también las realizadas por Reznikov respecto al plan de Zelenski de recuperar el sur ocupado por las fuerzas rusas, parecen ser poco realistas en este momento, cuando los avances de las tropas de Moscú son evidentes, y más allá de puntuales victorias parciales de las fuerzas ucranianas en alguna localidad, la derrota militar de Kiev se asoma en el horizonte como el único destino posible de esta guerra.

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