El presidente ruso, Vladimir Putin, ordenó este miércoles la movilización de 300.000 reservistas del Ejército para apoyar las operaciones militares en territorio ucraniano. En un mensaje emitido por la televisión rusa, el mandatario advirtió a las potencias occidentales que, si continuaban con su “chantaje nuclear”, Moscú respondería con el poder de todo su vasto arsenal.
“Si la integridad territorial de nuestro país se ve amenazada, utilizaremos todos los medios disponibles para proteger a nuestro pueblo”, dijo Putin, según lo consignado por la agencia Reuters.
El ministro de Defensa ruso, Sergéi Shoigú, dijo que la movilización parcial conllevará la convocatoria de 300.000 reservistas y que serán llamados eventualmente para ir al frente únicamente aquellos que hayan hecho el servicio militar obligatorio. La movilización parcial ordenada por Putin, un paso esperable, intensifica significativamente el conflicto con Ucrania y se produce en un momento en el que Rusia se enfrenta a una contraofensiva ucraniana que obligó a sus tropas a replegarse y a ceder algunos de los territorios que habían sido ocupados, específicamente en la región de Járkov, en el noreste del país, muy cerca de la frontera entre ambos países.
Putin dijo que la movilización militar parcial tenía como único objetivo defender la soberanía de Rusia y sus territorios, y expresó que los países que están financiando la guerra no quieren que haya un acuerdo de paz.
Durante su discurso el presidente ruso manifestó que los gobiernos de Estados Unidos, la Unión Europea y Reino Unido estaban presionando a Kiev para que “transfiriera las operaciones militares a nuestro territorio” con el objetivo de “saquear completamente nuestro país”.
En lo que va de la guerra que comenzó el 24 de febrero el ejército ucraniano atacó algunos objetivos dentro de Rusia utilizando armas de largo alcance suministradas por Occidente, principalmente por Estados Unidos.
“También se ha utilizado el chantaje nuclear”, dijo Putin, citando la central nuclear ucraniana de Zaporiyia, la mayor de Europa. Tanto Rusia como Ucrania se acusaron mutuamente de realizar ataques sobre las inmediaciones de la planta.
Putin también acusó a altos cargos de las principales naciones que integran la OTAN de hacer declaraciones sobre “la posibilidad y la pertinencia de utilizar armas de destrucción masiva contra Rusia: armas nucleares”.
“A los que se permiten tales declaraciones respecto a Rusia, quiero recordarles que nuestro país también dispone de diversos medios de destrucción y en algunos componentes más modernos que los de los países de la OTAN”, subrayó el presidente ruso.
Putin reafirmó que su objetivo era “liberar” la región industrial del Dombás, en el este de Ucrania, y que la mayoría de los habitantes no querían volver bajo el “yugo” de Ucrania.
Pocas horas después de este anuncio de Putin, el presidente estadounidense, Joe Biden, dio su discurso en el marco de la 77ª Asamblea de las Naciones Unidas y dedicó buena parte de sus palabras al conflicto en Ucrania.
El líder demócrata calificó la guerra en curso como “brutal e innecesaria” y sostuvo que fue decidida por un solo hombre: Vladimir Putin.
“Hablemos claro: un miembro permanente del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas invadió a su vecino, intentó borrar un Estado soberano del mapa. [...] Rusia violó descaradamente los principios básicos de la Carta de la ONU”, dijo Biden, de acuerdo a lo que consignó el portal oficial de las Naciones Unidas.
El mandatario estadounidense acusó a Rusia de las “amenazas irresponsables” de utilizar armas nucleares y del llamado de las reservas militares anunciado en la mañana del miércoles en el Kremlin.
“Una guerra nuclear no se puede ganar y nunca se debe pelear”, advirtió, y añadió que “nadie amenazó a Rusia y nadie más que Rusia buscaba el conflicto”, destacando en contraposición el apoyo financiero y militar que recibió Ucrania “para su defensa” de unos 40 Estados miembros de la ONU.
Por otra parte, Biden criticó el derecho de veto que Rusia utilizó en el Consejo de Seguridad de la ONU en el marco de la guerra con Ucrania y pidió la expansión de este órgano “para que pueda responder mejor a las necesidades del mundo de hoy”. Además, Biden recordó que los miembros permanentes del Consejo de Seguridad –incluido su país–, deben abstenerse de ejercer su derecho de veto, “salvo en situaciones extraordinarias”.
De acuerdo a la postura de Biden, África y América Latina y el Caribe deberían tener puestos permanentes en el Consejo de Seguridad y se deberían incluir más miembros no permanentes, entre otros, para “las naciones que hemos apoyado durante mucho tiempo”.