El primer ministro israelí Benjamin Netanyahu anunció este lunes que congelaría temporalmente el proyecto de ley que impulsa su gobierno, que básicamente pretende darle al Parlamento (Knésset), un mayor control sobre el Poder Judicial.
En un mensaje emitido por la televisión local, el mandatario dijo que estaba dispuesto a brindar una “oportunidad para un diálogo real” sobre la controvertida reforma, que llevó al país a una situación de tensión interna inédita.
Según informó The Jerusalem Post, la declaración de Netanyahu se produjo después de horas de tensas negociaciones con el ministro de Seguridad Nacional, el extremista de ultraderecha Itamar Ben-Gvir, quien amenazó con dejar el gobierno si la legislación no avanzaba según lo previsto, y mientras decenas de miles de opositores a la reforma judicial protestaban frente a la Knesset. Igualmente, y pese a su anuncio, el primer ministro dijo que, de cualquier manera, su gobierno llevaría adelante una reforma que “devolverá el equilibrio que se perdió entre las ramas [del gobierno]”, mientras “salvaguarda e incluso fortalece los derechos individuales”.
Netanyahu dijo además que el país estaba en un “camino peligroso” y que no permitiría que la situación termine en una guerra civil.
De acuerdo a lo que informó el portal israelí Aurora, el líder de la oposición, Yair Lapid, expresó dudas sobre la autenticidad del paso del primer ministro y señaló que el diálogo para una reforma acordada debe terminar con la elaboración de una Constitución.
Israel no la tiene, sino que se rige por un conjunto de leyes básicas, lo cual le da mucho poder a la Corte Suprema, que es el que tiene la última palabra en cuestiones judiciales.
“Si la legislación realmente se detiene, de manera genuina y total, estamos listos para iniciar un diálogo genuino”, dijo Lapid.
“No necesitamos poner un vendaje sobre las lesiones, sino tratarlas adecuadamente”, agregó. “Necesitamos sentarnos juntos y escribir la Constitución israelí basada en los valores de la declaración de independencia. Necesitamos dejar que el presidente determine un mecanismo para el diálogo y confiar en él para que sea un mediador justo”, expresó Lapid en referencia a Isaac Herzog, el presidente israelí.
En la misma línea se posicionó el exministro de Defensa Benny Gantz. Hablando poco después del anuncio de Netanyahu, Gantz dijo que está dispuesto a comenzar las negociaciones en la residencia presidencial “con el corazón abierto, no para derrotar, sino para estar de acuerdo”.
El diario Haaretz informó que Gantz habló con Netanyahu luego del anuncio de la detención de la reforma y le pidió que mantuviera en el cargo al ministro de Defensa, Yoav Gallant, calificándolo de esencial para la seguridad nacional y para calmar las tensiones en este momento. El domingo, la destitución de Gallant por haberse manifestado públicamente en contra de la reforma judicial generó una reacción espontánea de la población que forzó a Netanyahu a realizar el anuncio del lunes.
Mientras tanto, en las calles este lunes en el marco de la huelga general determinada por la Federación General de Trabajadores de la Tierra de Israel -la principal central obrera del país-, conocida como Histadrut (por su acrónimo en hebreo), miles de personas siguieron protestando contra el gobierno. Pero también hubo grandes manifestaciones en favor del Ejecutivo de extrema derecha, lo que degeneró en serios incidentes.
Medios israelíes informaron que en Tel-Aviv hubo violentos choques entre los manifestantes, ante lo cual entraron en acción las fuerzas policiales que reprimieron a los movilizados con gases lacrimógenos. Se informó además que en las manifestaciones contra el gobierno en Jerusalén, la Policía incautó varias banderas palestinas, siguiendo las órdenes del ministro Ben-Gvir.
Además, también en Jerusalén, se informó que integrantes de la organización de extrema derecha La Familia, conocidos por ser la facción más violenta y radical del club Beitar, atacaron a un taxista palestino.
Según la Policía, los extremistas rodearon el auto y el conductor trató de escapar mientras era perseguido. Durante el incidente, el taxista en su huida golpeó e hirió levemente a un transeúnte y chocó contra un auto que estaba estacionado. Fuentes policiales informaron que tres personas fueron detenidas por este hecho.