Las autoridades entrantes del Ministerio de Transporte y Obras Públicas, encabezadas por la ministra designada, Lucía Etcheverry, recibieron este jueves por la tarde a la Unión Ferroviaria, sindicato que nuclea a los trabajadores de la Administración de Ferrocarriles del Estado (AFE). Según dijo en rueda de prensa su presidente, Washington Sánchez, en la reunión el sindicato extendió a la ministra designada un conjunto de propuestas que abarcan tanto el servicio de transporte de pasajeros como “el modo ferroviario en general”.
Entre otras cosas, propusieron a Etcheverry reforzar el servicio de transporte de pasajeros de AFE, así como “tratar de aprovechar la infraestructura del Ferrocarril Central” para desarrollar un servicio eficiente dentro del área metropolitana. Sánchez se refirió a la posibilidad de reactivar el servicio de pasajeros entre las localidades de San José y 25 de Agosto, un tramo de 25 kilómetros que necesitaría una conexión con el ramal del Ferrocarril Central.
De igual manera, Sánchez nombró una “propuesta alternativa” al proyecto de tranvía que conectaría Ciudad Vieja con el Pinar, que consiste en la recuperación de un tramo del ramal a Rocha, que también se debería conectar con el Ferrocarril Central.
Sánchez dijo que, “lógicamente”, y “como recién está asumiendo”, la futura ministra no adelantó demasiada información al sindicato, aunque afirmó que estaría de acuerdo en “desarrollar” el servicio de transporte de pasajeros “dentro del Ferrocarril Central”.
También se refirió a la problemática que implicó la pérdida de un coche motor que se incendió mientras recorría el trayecto que conecta las ciudades de Rivera y Tacuarembó, que evidencia el “desmantelamiento” del ente, aseguró. Según dijo, producto del incidente, de tres coches sólo uno podrá “correr el servicio” a la brevedad.
El dirigente sindical dijo que “hay que reponer una flota nueva” para AFE y manifestó su deseo de que la próxima gestión “pueda comprar coches motores nuevos y ponerlos a funcionar”. También agregó que la realidad del ente es “muy compleja”, algo que atribuyó a las “diferentes reformas” llevadas a cabo por sucesivos gobiernos, y denunció que la plantilla del organismo comprende a 68 trabajadores y sólo tres mecánicos “para atender el servicio de pasajeros”, por lo que se necesita “un ingreso de personal rápido”.
“La continuidad de AFE pende de un hilo y es necesario tomar algunas iniciativas de forma rápida”, sintetizó.
Confederación de Sindicatos Industriales se reunió con Cardona
También este jueves, las autoridades entrantes del Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM) recibieron a representantes de la Confederación de Sindicatos Industriales (CSI), quienes ya habían sido recibidos por el futuro ministro de Trabajo y Seguridad Social, Juan Castillo, días atrás.
En una rueda de prensa celebrada tras la reunión, su presidente, Danilo Dárdano, dijo que el MIEM es una cartera clave para la confederación, y remarcó la importancia de mantener una comunicación “abierta y directa” con la ministra designada por Yamandú Orsi, Fernanda Cardona, aunque luego recalcó que lo importante no es sólo “el diálogo, sino concretar”.
En la reunión, la CSI hizo entrega de un documento con 12 propuestas, sobre las que Dárdano dijo que esperan que se pueda “ir avanzando” en un “corto plazo”. Según afirmó el dirigente, el sindicato le dará “un espacio de tiempo no muy largo” al futuro gobierno antes de concretar, hacia el primer semestre del año, un ámbito en el que se “discuta el desarrollo productivo y la industria nacional”.
Entre otros planteos, Dárdano dijo que es necesario aprobar una ley que genere un fondo industrial con aportes patronales y de los trabajadores que permita “elaborar proyectos y diagnósticos que ayuden al desarrollo industrial”, que posibilitaría que, a la hora de “asumir desempleos por cierre o reestructura”, se complemente “el seguro de desempleo con una partida obligatoria” que deje a los trabajadores reorientarse a “industrias de nuevo tipo”.
Dárdano dijo que el “cambio de signo” político, que “de alguna manera” implica “una mejor manera de entender a los sectores populares”, no significa que la CSI no se continúe movilizando. “Lo hicimos en los 15 años de gobiernos frenteamplistas y lo vamos a continuar haciendo”, resumió.