Entre banderas violetas y bajo el reiterativo grito de “¡viva la libertad, carajo!”, un centenar de personas estuvo presente en la apertura de la sede central del nuevo partido La Libertad Avanza (LLA), agrupación política surgida a la sombra de su símil argentino y partido de cabecera del presidente Javier Milei. Este partido logró a comienzos de agosto el mínimo de firmas necesarias para obtener el aval de la Corte Electoral.
El lugar que supo ser en el pasado una discoteca, ubicado en Cerro Largo casi Arenal Grande, pasó a denominarse “Suiza de América” y ahora se encuentra atestado de alusiones al libertarianismo. En sus paredes cuelgan cuadros de quienes son los referentes internacionales de la agrupación: los presidentes de Argentina, Javier Milei; de El Salvador, Nayib Bukele; y el estadounidense Donald Trump.
Un conjunto de hombres de traje recorría el lugar. Sus solapas adornadas con escarapelas de colores rojo, azul y blanco anticipaban la llegada de quien sería el orador principal de la noche: el chileno Axel Kaiser. En la entrada, otro hombre, luciendo un broche con el escudo oficial del gobierno argentino, supervisaba el ingreso de quienes llegaban al evento.
Tanto la planta baja como el segundo nivel, donde se desarrollaría el acto principal, se encontraban repletos de personas, en su mayoría jóvenes, que cada tanto arengaban consignas libertarias. Sólo eran interrumpidos por un militante de LLA con una gorra con la frase “Las fuerzas del cielo” (como se identifican los grupos libertarios), que atendía a los presentes.
Kaiser es un abogado y columnista chileno conocido por su defensa del liberalismo económico inspirado en la Escuela Austríaca. Proveniente de una familia de defensores de las ideas libertarias, son conocidos por sus vínculos con otros referentes de la extrema derecha iberoamericana y el movimiento MAGA (Make America Great Again), asociado a Trump.
Su hermano, Johannes Kaiser, fue candidato a la presidencia de Chile por el Partido Nacional Libertario y logró quedar cuarto en la contienda con 14%, sobrepasando a la candidata de la derecha tradicional chilena, Evelyn Matthei. De hecho, previo a las elecciones, algunas encuestadoras comenzaron a especular con la posibilidad de que Johannes lograse pasar a la segunda vuelta, por encima del otro candidato de extrema derecha, José Antonio Kast.
Antes del comienzo de la oratoria, un audiovisual proyectó una ráfaga de imágenes de las que pueden deducirse los referentes del partido: Friedrich Hayek, Milton Friedman, Hannah Arendt, Giorgia Meloni, Donald Trump, Javier Milei y, sobre el final, el expresidente uruguayo Jorge Batlle.
Kaiser era seguido y filmado por un hombre que llevaba puesto un sombrero alusivo a la Fundación Faro, presidida por el chileno junto al argentino Agustín Laje, que el pasado febrero se vio envuelta en el caso de la estafa de la criptomoneda $Libra. La polémica surgió luego de que Milei recomendara su uso como método de inversión, lo que derivó en pérdidas millonarias de miles de usuarios que siguieron la recomendación del presidente argentino. De acuerdo a lo informado por medios de prensa argentinos, la fundación dispuso sus cuentas bancarias en el extranjero para canalizar las ganancias obtenidas de la criptomoneda.
El chileno señaló que es importante que la LLA “se consolide en toda América Latina”, porque el día en que “ya no existan condiciones de ganar a través de resultados civilizados, terminás en guerra civil o una dictadura”, y presentó como ejemplos a Venezuela, Nicaragua y Cuba.
“No hay ningún país exento de la tentación totalitaria, existe en todas partes”, afirmó Kaiser y señaló que “esa gente es mala y demoníaca”. El abogado consideró que los grupos de izquierda, a quienes llamó “terroristas”, casi destruyen Chile, en referencia al estallido social de octubre de 2019.
Asimismo, Kaiser arengó a los presentes a “combatir en todos los niveles”, como redes sociales, medios de prensa, universidades y escuelas, en las plazas. “El primer combate es intelectual y espiritual; el segundo es comunicacional, mediático y político; y el tercero, si es que fallan los dos anteriores, es con la espada”, sentenció. “Estos miserables no dudan en usar la espada para masacrarnos como están haciendo en todos lados a donde llegan al poder. Seamos conscientes de lo que enfrentamos”, afirmó el chileno, y señaló que la creación de LLA es un “esfuerzo para mantener la vía civilizada de convivencia”.
El “peso oro” de la Suiza de América
Acto seguido tomó la palabra Gonzalo Nova, fundador de LLA, quien explicó que la idea de nombrar al recinto como Suiza de América tiene como finalidad recordar “el pasado glorioso de Uruguay”, así como “marcar el rumbo y el lugar a donde queremos llegar”.
“Fuimos a la Suiza de América desde 1831, que comenzamos ese país, hasta fines del siglo XIX, fuimos forjando con nuestros primeros padres, con trabajo, con comercio libre y con moneda sana, uno de los lugares más importantes del mundo”, afirmó Nova.
“La otra cosa que hacía rica a las naciones era una moneda fuerte, nuestro peso oro uruguayo, que tuvimos en aquel tiempo. No solamente el comercio libre, también hubo una moneda sana, que era nuestro bien de intercambio indirecto. Esa moneda estaba basada en el oro”, explicó el ingeniero, quien propuso que Uruguay debe volver a esa modalidad. Opinó que luego de la fundación del Banco República, en 1907, el peso comenzó a “deteriorarse cada vez más”. “Así siguieron con todas nuestras libertades, con las sucesivas constituciones que fueron modificando y quitando las libertades”, afirmó Nova.
El método Bukele
Sobre el final, el líder de LLA, Nicolás Quintana, presentó al equipo que dirige la agrupación, entre los que se encuentra su propio padre, al que presentó como “experto internacional en seguridad” y uno de los redactores de las propuestas que impulsará su partido.
Quintana afirmó que presentarán lo que llaman el “método Bukele”, inspirado por la política contra la delincuencia impulsada por el presidente de El Salvador y que fuera epicentro de acusaciones de violaciones de derechos humanos en recintos carcelarios. No obstante, el líder de LLA advirtió que esto no significa aplicar lo mismo que en el país centroamericano, sino tomar aquello que pueda adaptarse a la realidad uruguaya.