Este martes de mañana la Comisión de Salud del Senado recibió al arzobispo de Montevideo, el cardenal Daniel Sturla, para escuchar su postura sobre el proyecto de ley de eutanasia, denominado “de muerte digna”, por cerca de 45 minutos. “La posición de la Iglesia es bien conocida, en defensa de la vida y contraria al proyecto de ley de eutanasia”, dijo Sturla en una rueda de prensa luego de salir de la comisión.
Señaló que en la sesión expuso que “el principal problema de Uruguay es espiritual, tiene que ver con el sentido de la vida y con la desvalorización de la vida humana”. Para el cardenal, este proyecto de ley, “en lugar de contribuir a valorizar la vida, contribuye a pensar que hay vidas descartables”, y por eso cree que es “fundamentalmente negativo”.
La prensa le señaló que es un hecho que el proyecto se terminará aprobando, a lo que Sturla respondió que es posible, así como también se aprobaron otras leyes con las que no concuerda. “Pero nosotros presentamos nuestra postura, que ha sido recibida muy bien por la Comisión de Salud, con mucho respeto”, agregó.
Sturla sostuvo que en el proyecto hay alguna cosa para cambiar, “sobre todo el nombre”, y planteó que discrepa “radicalmente” con que se llame de “muerte digna”, porque “da una confusión a la gente”, porque, entonces, “¿cómo clasificamos las otras muertes?”. A su modo de ver, debería llamarse ley de eutanasia: “Si lo que se va a aprobar es eso, hay que llamar a las cosas por su nombre; que se llame como lo que es”.
El cardenal dijo que la idea de “muerte digna” crea una “pendiente resbaladiza”, ya que “se abre algo donde después se abren muchas puertas, que a veces no se tienen en cuenta a la hora de defender el valor de la vida humana”. Consultado, entonces, sobre cuál piensa que debe ser el camino para quien sufre una enfermedad irreversible e incurable, contestó: “Los cuidados paliativos”.
“Cuidar, respetar, amar, atender a las personas. Yo puse el ejemplo de una institución que ha nacido hace dos años en la Iglesia católica, el Hospice San José, donde van personas cuyas familias no las pueden atender, en trance de morir, y ahí reciben atención, cariño y cuidados paliativos, y transcurren los últimos días, semanas o meses en paz, dando gracias por las atenciones recibidas”, agregó.
Por último, Sturla dijo que, “obviamente, siempre habrá situaciones muy dolorosas, muy dramáticas”, que las respeta “totalmente”, pero entiende que esta iniciativa “va mucho más allá de lo que serían las situaciones más dramáticas que a veces se presentan para tener argumentos para aprobarla”.
Pereyra: “No hubo ningún elemento nuevo” en el Senado
Por su parte, el senador del Partido Nacional Martín Lema, integrante de la comisión, dijo en una rueda de prensa que ya están en la etapa final del tratamiento del proyecto: calculan que a mediados de octubre se votará en el plenario de la cámara alta. Como ya lo había anunciado, recordó que no lo apoyará porque “es un mal proyecto, que no presenta garantías jurídicas ni clínicas”.
Además, sostuvo que el Ministerio de Salud Pública, que compareció hace pocos días a la comisión, “no tiene una postura sobre el tema”, por lo tanto, “no avala institucionalmente esta iniciativa”, y “eso también genera una cantidad de dudas”. “No toma una postura; debería jugársela, porque es un proyecto que habilita a poner fin a la vida de una persona. Aparte, poniendo fin sin la intervención de un psiquiatra”, subrayó.
Por otro lado, el senador del Frente Amplio Aníbal Pereyra, integrante de la comisión, señaló en diálogo con la diaria que Sturla ha sido contundente con su postura contraria a la eutanasia “no de ahora”. De todas maneras, el senador resaltó la importancia “de generar todos los espacios para que todas las opiniones sean planteadas”.
Destacó que es un proyecto de ley que tiene cinco años de trabajo (porque en el período pasado se trató una iniciativa similar, que naufragó), “de muchos aportes”, y hay acuerdo en seguir avanzando. Pereyra dijo que en la comisión se plantearon seguir trabajando en régimen de dos sesiones por semana. Este jueves recibirán a la Agrupación Evolución Médica y al Sindicato Médico del Uruguay, que son las dos delegaciones que faltaban de las que solicitaron ser recibidas, y luego empezarán con el análisis del proyecto. El senador oficialista ratificó que la idea es que se trate en el plenario a mediados de octubre.
Pereyra subrayó que leyeron las versiones taquigráficas de la Comisión de Salud de Diputados, la cámara en la que ya se aprobó el proyecto, y “no hubo ningún elemento nuevo” en esta instancia, por lo tanto, “capaz que lo más novedoso fue la presencia del cardenal”, pero la postura de la Iglesia católica “tampoco es nueva con respecto a una ley de estas características”, insistió. Por último, dijo que la voluntad del FA es que el proyecto se apruebe tal como llegó de Diputados.