Este martes en la sede del PIT-CNT se realizó una reunión de consulta con la mayoría de las filiales sindicales de la central de trabajadores para informar de primera mano sobre los contenidos de la propuesta del Poder Ejecutivo de lineamientos salariales para la 8ª Ronda de Consejos de Salarios. El plan de pautas fue presentado a trabajadores y empresarios por el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Pablo Mieres, y la directora de la Asesoría Macroeconómica del Ministerio de Economía y Finanzas, Marcela Bensión, en la primera reunión del Consejo Superior Tripartito convocada por el gobierno del presidente Luis Lacalle Pou, que se hizo el viernes 5.
En la presentación realizada, se remarca la situación de “contexto económico global inesperado”, a partir de la pandemia de covid-19, marcada por una “fuerte caída de la producción 2020”, “la peor desde 1929”, y una “incertidumbre macroeconómica”, que en Uruguay se concretaría en una caída estimada del producto interno bruto (PIB) “en torno a 3%” y en la fuerte afectación de algunos sectores como “restaurantes y hoteles, ventas de automóviles, ventas de combustible, entre otros”. El documento del Poder Ejecutivo también constata que 200.000 trabajadores fueron enviados a seguro de paro, y que en febrero de 2020 se registró una tasa de desempleo de 10,5%, que afecta “fuertemente a mujeres y jóvenes”. Señala que el país está con un endeudamiento elevado equivalente a 70% del PIB, y que se propone una regla fiscal: “Guardar para tener en momentos como el actual”.
En síntesis, lo que el Poder Ejecutivo plantea es que a fines de este mes “corresponde otorgar aumentos salariales por inflación pasada, conforme a lo acordado en la séptima ronda salarial”, que se estima que ronden “entre 1% y 5%, dependiendo del sector de actividad”. Se estima que para los sectores calificados como “medios” en esa misma ronda (cerca de 70% del total), “el correctivo por inflación a aplicar se ubicaría en torno a 3,5%”.
“Debido a la delicada situación del mercado laboral, por el arrastre de los últimos años y por la crisis sanitaria que atraviesa el país, se entiende conveniente simplificar la negociación salarial y atender al empleo”, por lo que se establece el plazo de un año, que “para la mayoría de los sectores” iría del 1° de julio de 2020 al 30 de junio de 2021, en el que no se convocará a los Consejos de Salarios.
Mientras tanto, habría un aumento nominal fijo de 3% al 1° de enero de 2021, pero los sectores más afectados podrán diferir el aumento al 1° abril de 2021. El documento define a los sectores más afectados “como aquellos que, a noviembre de 2020, registren un número de cotizantes igual o inferior a 90% de los cotizantes registrados en noviembre de 2019”. Finalmente, la propuesta de lineamientos establece que habría un correctivo final nominal “equivalente a la inflación del año móvil, descontando el aumento salarial otorgado en el período y también descontando la caída del PIB promedio en el año 2020”. “La pérdida del poder adquisitivo del salario verificada al finalizar la octava ronda será recuperada en posteriores negociaciones en la medida en que las condiciones de crecimiento lo permitan”, expresa, y finaliza: “El gobierno propondrá un diálogo social por el empleo en el ámbito del Consejo Superior Tripartito [...] y se compromete a seguir impulsando medidas de incentivo para la recuperación de puestos de trabajo”.
El objetivo: proteger el salario mínimo nacional
La reunión de este martes se hizo previo a la del Secretariado Ejecutivo del PIT-CNT, que se reúne este miércoles, para definir una posición sobre las pautas del Poder Ejecutivo, que se empezarán a discutir en la reunión del Consejo Superior Tripartito de mañana. La instancia de este martes fue “de consulta” como para “abrir un proceso de ver cómo nos paramos” ante la propuesta del Ejecutivo y “si construimos una alternativa, una contrapropuesta”, dijo a la diaria el secretario general del PIT-CNT, Marcelo Abdala. “Nosotros estamos parados en la movilización del [viernes] 4 de junio, y el planteo que se hizo allí fue de defender el interés integral de los trabajadores y las grandes mayorías, y simultáneamente el salario y el trabajo”.
Una de las cuestiones que se conversaron este martes en la sede de la central de trabajadores es la vinculación que hace la propuesta del Poder Ejecutivo entre el porcentaje del correctivo a ajustar a mediados del año que viene con “el deterioro del PIB de este año”. “Está garantizada la pérdida salarial, pero, por el contrario, todavía no está tan garantizado que si hay inflación y el PIB crece y se recupera la actividad, el salario real recupere sus pérdidas de inmediato”, opinó Abdala.
Otro de los temas que se estuvieron conversando este martes fue el de los salarios sumergidos y el salario mínimo nacional (SMN). “Es muy probable que el PIT-CNT involucre en esta conversación estos temas. El SMN es la referencia mínima básica que hay en el mundo del trabajo. Eso no está, y hay que tener en cuenta que el ajuste del SMN históricamente ha sido los primeros días de cada año. Entonces vamos a plantear que se desconecte la evolución del SMN de toda esta propuesta que hace el Poder Ejecutivo, que el SMN aumente al menos 100% del IPC [Índice de Precios del Consumo] de 2020”, adelantó el dirigente. La idea es “proteger” el SMN “para que no se altere su poder adquisitivo, su poder de compra”, y también “ponderar los salarios más sumergidos”.
Finalmente, Abdala dijo que el acuerdo con la postergación de la convocatoria de los Consejos de Salarios por un año tiene que ver con lo “complejo de la situación actual”, que “no es una situación normal”. “El interés nuestro es preservar la negociación colectiva, preservar su carácter democrático y la participación de la enorme mayoría de los trabajadores. Hoy, con la mayoría de la gente en seguro de paro, eso no está garantizado”, concluyó.