La empresa de productos lácteos Claldy emitió un comunicado en el cual expresa que “apuesta al futuro con inversión y trabajo”, pero que “enfrenta un bloqueo sindical injustificado”. Explica que en los últimos días se han visto afectadas algunas operaciones productivas de la firma, “a raíz de medidas impulsadas por la dirigencia sindical, que boicotean la normal implementación de una nueva maquinaria de producción, recientemente incorporada con el objetivo de mejorar la eficiencia y asegurar la sustentabilidad de la empresa”.
Señala que entre varias medidas, la dirigencia sindical “promueve que se impida que los supervisores puedan cumplir su función básica, que es supervisar las líneas de producción”, destaca que “el daño se concreta en el retiro por parte de los trabajadores de todas las líneas de producción que cuentan con supervisión, impidiendo no sólo la normal producción, sino generando importantes pérdidas”.
Según la empresa, “lo que está ocurriendo es grave y salta a la vista: se está bloqueando el derecho a trabajar, a producir y a supervisar, en condiciones legítimas y necesarias para cualquier industria”, y “como consecuencia, no se ha podido lograr que la nueva maquinaria trabaje con todo su potencial, no pudiendo avanzar con los objetivos de mejora y productividad necesarios para el futuro de todos”.
Para la dirección de Claldy, este conflicto “no nace de un recorte, ni de una pérdida de derechos. Por el contrario, comenzó cuando Claldy apostó por incorporar nueva maquinaria industrial para modernizar su planta, y aumentar sus niveles de productividad a partir del Fondo de Reconversión de Industrias Lácteas (FRlL), mejorar sus procesos y sostener las fuentes de trabajo en el largo plazo”.
Otro fragmento del comunicado señala que estas medidas impulsadas por la dirigencia sindical “se han ejecutado sin cumplir con los preavisos ni con los mecanismos de prevención de conflictos convencionales y legales”.
“Estamos apostando al diálogo, pero de persistir medidas como las descritas, se avanzará con el camino disciplinario, sin perjuicio de las acciones civiles y penales que correspondan. El poder de dirección cabe exclusivamente a la empresa, sin participación ni injerencia alguna de la plana sindical”, advierte la firma por la eventualidad de mantenerse la situación que denuncia.
Claldy fue fundada en 1966, y brinda empleo directo a unas 200 personas, y cuenta con una red de productores lecheros, cooperativas y familias rurales. “Confiamos en que la sociedad, productores, clientes y los actores políticos sabrán acompañar esta causa justa: la defensa de una industria nacional que quiere crecer, invertir y dar empleo genuino en el interior”, concluye.
Federación Láctea rechazó acusaciones de Claldy
Por su parte, y en respuesta al comunicado de la empresa, la Federación de Trabajadores de la Industria Láctea (FTIL) rechazó “profundamente las acciones de la empresa Claldy”, y aclaró que “ya no aceptamos ni aceptaremos nunca la aplicación de violencia ni actitudes represivas, tal como ha sucedido ahora a través del gerente general y de personas con cargos de dirección de la empresa en la propia planta industrial, contra trabajadoras y trabajadores”.
El dirigente de la FTIL, Pedro Toledo, señaló que el lunes 21, de 9.00 a 16.00 en la sede de la Asociación de Obreros y Empleados de Conaprole (AOEC), se desarrollará un Plenario Nacional de la Federación, y que “es posible que se resuelvan nuevas medidas si Claldy no retrocede o deja en stand-by las acciones que está tomando contra sus trabajadores”.
Explicó que “es una situación complicada, porque hay negociaciones de por medio. Sucede que la empresa resolvió unilateralmente avanzar con medidas, y se encontró con que los trabajadores no estuvieron de acuerdo” dijo, y que “la empresa tomó actitudes antisindicales, además de que días atrás hubo trabajadores empujados e insultados por cargos gerenciales”.
Acerca de este asunto, detalló que hace dos días atrás, y mientras trabajadores participaban de una asamblea permanente, “la empresa decidió enviar a los cargos gerenciales y a los mandos medios a trabajar en las máquinas, y cuando los funcionarios intentaron volver a sus tareas, “los sacaron con insultos y empujones a muchos de ellos. Esto en la planta ubicada en la ciudad de Young, en el departamento de Río Negro”.
Agregó que “además, los amenazaron. Los presionaron y amedrentaron, por una máquina que trajeron pero que tiene fallas, y que está mal. Y no es nueva. Es usada, y complicada de utilizar. No cumple con el funcionamiento que quieren, y responsabilizan a los trabajadores. El problema no son los trabajadores, sino la máquina”.
“La empresa viene en negociaciones con el sindicato hace tiempo. Pero tiene todo trancado. Se buscan soluciones a reclamos realizados por el sindicato, a los cuales la empresa hace caso omiso. Siempre tienen algún problema. Hace muy poco, el sueldo lo pagaron en cuotas, además de atrasos con los aguinaldos. También no quiere aprobar las licencias porque dicen que no tienen para pagar”, comentó.
En el comunicado, la Federación expresó que rechazan también la postura de la empresa, “de colocarse en términos de rompe-huelgas, para llevar adelante acciones intempestivas, en las líneas de trabajo, mientras los trabajadores y trabajadoras realizan horas de paro y asambleas”.
En otro fragmento del texto, la organización sindical expresa que “queremos recordar que cuando la empresa adujo que se fundía, fueron los trabajadores los que se pusieron al frente de la dura situación, soportando el impacto negativo sobre sus salarios, sobre sus puestos de trabajo, atendiendo descuelgues del Consejo de Salarios, e incluso, fueron las y los trabajadores quienes firmaron para respaldar en la negociación colectiva la posibilidad que la empresa se presentara a los Fondos de Reconversión de la Industria Láctea (FRIL)”.
“Mala memoria de los cargos gerenciales, pésima memoria de los empresarios, sobre la actitud que mantuvieron los trabajadores” dice la declaración, y afirma que “no están dispuestos a aceptar violencia. No hay espacio para actitudes patoteriles. Y si acaso, les pedimos que refresquen su memoria para recordar la grandeza que tuvieron los trabajadores en los momentos más duros. Confiamos que la empresa detendrá las provocaciones y razonablemente, se sentará a negociar”.