“Tenemos un pronóstico de poca lluvia, hay baja humedad en los suelos. Estamos en un proceso donde varias zonas del país todavía no están en rojo, pero es probable que en la próxima información que genere el Sistema Nacional de Información Agropecuaria la situación sea más crítica. De no haber lluvias en estos días, claramente nos vamos encaminando a una futura declaración de emergencia agropecuaria”, apuntó en conferencia de prensa el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), Fernando Mattos. Agregó que Uruguay está transitando el tercer año de déficit hídrico, que “impacta en la producción y afecta la economía”.
En este contexto, se presentó la estrategia climática a largo plazo que busca determinar el camino hacia la adaptación y mitigación del cambio climático en el país. Adrián Peña, ministro de Ambiente (MA), dijo que contiene “compromisos ambiciosos” pero “alcanzables”, que deben “bajarse a tierra” cada cinco años en contribuciones determinadas a nivel nacional. “Hay proyecciones a finales de siglo que hablan de un aumento de la temperatura en Uruguay de entre 1,5 y 3 grados; también un aumento en el nivel medio del mar que compromete 12.000 hectáreas posiblemente inundables, 30.000 kilómetros cuadrados comprometidos por erosión, un aumento de las precipitaciones anuales de 35%, olas de frío, de calor, ciclones y probabilidad de más viento en el territorio. A este escenario debemos adaptarnos”, señaló el ministro.
Peña agregó que el proceso es fundamental para un país “con base agropecuaria, de economía abierta, donde 80% de sus exportaciones corresponden a productos y alimentos”. Su correligionario, Mattos, minutos más tarde, planteó que la “emergencia agropecuaria” genera “un perjuicio en los cultivos”, “en la disponibilidad forrajera para los ganados” y en “la escasez de agua, inclusive para el consumo humano en muchos establecimientos”. Esperan datos que estarán disponibles a partir del 3 de enero para avanzar en la declaración con base en “información objetiva” y a partir de ese punto “desatar ayudas”. “Si en los próximos días no hay precipitaciones, estaremos comprometiendo el potencial productivo en forma importante”, agregó.
El ministro de Ambiente planteó que la estrategia a largo plazo busca “la neutralidad de emisiones de CO2 al año 2050”. Comentó que el foco principal está en el transporte, “donde se concentra gran parte de las emisiones”. “Allí la estrategia es la transición al eléctrico y la transición a vehículos propulsados a hidrógeno. Con estas estrategias funcionando podríamos tener reducciones al 2050 de 50% de las emisiones del sector energía”, manifestó. Durante la presentación estuvo presente el ministro de Industria, Energía y Minería, Omar Paganini. Declaró que una de las apuestas a futuro es invertir en “tecnología de almacenamiento” de energías renovables para “cuando no hay” disponibles.
A su vez, sobre el metano -gas de efecto invernadero-, Peña planteó que 94% es producido por el sector agropecuario, pero que “la estrategia del país es ir al no aumento de emisiones en términos absolutos” y “a un aumento de la productividad”. El otro 6% de las emisiones del gas corresponden al “sector residuo”, del cual un gran porcentaje proviene de los vertederos a cielo abierto que las autoridades planean cerrar a 2025. Mattos expresó que el sector agropecuario “es responsable de la mayor parte de las emisiones”, y la ganadería en particular es “el único sector que captura carbono de la atmósfera”. El ministro del MGAP apuesta a “la captura o secuestro de carbono en el suelo” y a “sectores que son claves”, como el forestal.
Por último, la ministra de Economía y Finanzas, Azucena Arbeleche, dijo que para determinar las contribuciones a nivel nacional se debe “medir el impacto macroeconómico para lograr estos objetivos”. “Es importante tener en cuenta que tenemos distintos caminos. Es necesario elegir el camino que sea más costo-efectivo. Los recursos son acotados y son los mismos que tenemos para atender y dar respuesta al desafío ambiental, para dar respuesta a la inclusión social y recuperar económicamente luego del covid”, concluyó.