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Cosecha de naranjas en un predio de Forbel SA, en Paysandú. (archivo, agosto de 2010)

Foto: Sandro Pereyra

Cerdos y peces

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Producción citrícola litoraleña se concentra; condiciones de trabajo empeoran.

Existen mejores perspectivas para la actual zafra citrícola, horizontes tanto productivos como de posibilidades de comercialización de las cosechas, pero al mismo tiempo persisten las dificultades de estabilidad y calidad laboral en los empleos del litoral oeste del país, región en la que se concentra la producción nacional. Esta semana, representantes de la Organización Sindical de Trabajadores Rurales (Osdor), la Dirección Nacional de Trabajo (Dinatra) y empresarios del subsector mantendrán una nueva ronda de negociaciones en torno al asunto.

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La producción citrícola, que está en plena zafra, se incrementará en 18% este año con respecto al anterior, según la Encuesta Citrícola Otoño 2012 divulgada por el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP). La expectativa de producción para la zafra 2012 es de 318.000 toneladas, cifra similar a la alcanzada en 2010 y mayor que en 2011, cuando debido a la sequía cayó a 270.000 toneladas. Como consecuencia del saldo negativo, Uruguay, que desde hace cinco años venía ocupando el tercer puesto en el mercado mundial de cítricos detrás de Sudáfrica y Argentina, bajó el año pasado al quinto lugar por el avance de Chile y Australia, según el Anuario de la Oficina de Programación y Política Agropecuaria (OPYPA) del MGAP. Las pérdidas del último año en el sector citrícola impactaron sobre las empresas exportadoras. El año pasado, las empresas Cítricola Salteña y Sandupay, líderes en el mercado de cítricos del país, exportaron por valor de 32.011.300 dólares y 3.463.016 dólares, respectivamente, según datos del Instituto Uruguay XXI. Ambas compañías disminuyeron sus ingresos, que alcanzaron, en el caso de la salteña, un máximo de 36.599.004 dólares en 2010, mientras que para la firma sanducera el máximo fue 6.100.768 dólares en 2009. En este contexto, en febrero se concretó la venta de la empresa Sandupay, operación que puso en riesgo cerca de 200 puestos de trabajo, que fueron finalmente absorbidos por Citrícola Salteña con modificaciones en las condiciones laborales, que siguen discutiéndose en instancias de negociación (ver http://ladiaria.com.uy/articulo/2012/2/eucaliptos-por-naranjos/ ).

Producción y destino

Las naranjas y las mandarinas representaron aproximadamente 50% y 35%, respectivamente, del total de la producción de cítricos de Uruguay en 2011. Para 2012 se estima que la producción aumentará en 29% para las mandarinas y 16% para las naranjas, según datos del MGAP. Los principales destinos en 2011 para las frutas uruguayas fueron, en el caso de las naranjas, los mercados de España (27,7%), Holanda (35%) y Brasil (8%), mientras que las mandarinas tuvieron como principales compradores a Reino Unido (28,8%), Holanda (27,7%) y Rusia (14,1%). El Departamento de Agricultura de EEUU (USDA), en su estimación sobre la producción y el comercio mundial de cítricos 2011-2012, señala una baja de 4% en la producción global pero evalúa estabilidad en el comercio de estos bienes. Según los datos de la institución estatal, la disminución de la producción será consecuencia de la sequía que afecta a Brasil y a México. Sin embargo, señala que la demanda será cubierta por los otros principales países productores, que tienen mejores pronósticos. El informe señala que EEUU registrará una reducción de sus exportaciones debido a una menor producción en California y Texas. Con relación a los mercados, la USDA estima que la débil demanda de la Unión Europea será compensada por el consumo de Rusia.

Salto-Paysandú

Esta semana, delegados de la Osdor, representantes de la Dinatra y empresarios se reunirán para negociar las condiciones de trabajo de los empleados de la ex Sandupay que pasaron a la nómina de Citrícola Salteña. Consultado por la diaria el dirigente de Osdor Fernando Gutiérrez explicó que la evaluación del gremio en el transcurso del último trimestre, cuando se efectuó el traspaso, es “negativa”. Según el sindicalista “es como retroceder diez años” en cuanto a los beneficios conquistados por los trabajadores. Además de la pérdida de la antigüedad en el puesto de trabajo, hubo rebaja salarial, se suprimió un incentivo de 5% a la calidad por la recolección de frutas seleccionadas y no se respetó el feriado de los trabajadores citrícolas. El cambio de modalidad en el trabajo también afectó otras variables, según el delegado, dado que antes existía un salario base mientras que en la actualidad el pago se efectúa por ‘bolso’ recolectado. El sistema anterior contemplaba “a los ancianos y a las mujeres”, que tienen menos productividad. El régimen del ‘bolso’, denunció Gutiérrez, genera competencia entre obreros. “Querés sacarle los ojos a tu compañero”. El último convenio colectivo firmado por el gremio admite el pago de 85 pesos por día por concepto de alimentación y vivienda, 25 pesos por el desgaste de la indumentaria de trabajo y 8,70 pesos por cada bolso recolectado, aunque “nunca se llegó a un arreglo 100%”. El delegado marca una diferencia entre la situación de los trabajadores cítricos de Salto y la de los de Paysandú. Citrícola Salteña (Caputto) homogeneizó las condiciones de trabajo de los empleados en ambos departamentos, cuando los sanduceros contaban con antecedentes en negociaciones obrero-patronales. A esta situación se suma el conflicto en Forbel SA el mes pasado, firma que, denunció el dirigente sindical, fue tercerizada por sus dueños en plena negociación y los trabajadores se encontraron integrando la plantilla de otra empresa. “Nos sentimos totalmente impotentes, se mueven con total impunidad”, se quejó. Los miembros de Osdor toman medidas para presentar por escrito su denuncia ante el Banco de Previsión Social, dado que Forbel, según explicó Gutiérrez, envió al seguro de paro a la plantilla fija de trabajadores pero tomó asalariados a destajo. El gremio está a la espera de la próxima reunión con autoridades y empresarios para estudiar la adopción de medidas de lucha frente a la situación.

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