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Gonzalo Casaravilla. (archivo, junio de 2010)

Foto: Victoria Rodríguez

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UTE lanza instrumento para pequeños ahorristas buscando “testear” interés de los hogares.

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A partir de mañana, UTE emitirá Obligaciones Negociables (ON) destinadas a pequeños y medianos ahorristas. El comunicado de la empresa indica que la rentabilidad promedio será de 4,23% anual en cinco años y brinda la posibilidad de realizar cancelaciones anuales.

Consultado por la diaria, el presidente de UTE, Gonzalo Casaravilla, dijo que la emisión persigue varios objetivos que “convergen en un mismo instrumento”. En primer lugar, destacó la necesidad de financiar el plan de inversiones de la empresa, que ronda los 400 millones de dólares. Actualmente, UTE financia las inversiones con diversos créditos que provienen de formas tradicionales, como el crédito bancario y los préstamos de organismos como la Corporación Andina de Fomento (CAF) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Según Casaravilla, la emisión de ON es un “nuevo instrumento que abre la posibilidad de contar con una línea de fianciamiento de mediano plazo”.

Las emisiones serán por un monto máximo de 30 millones de dólares y tendrán un valor mínimo de 1.000 dólares, lo que según el comunicado de prensa, busca que quienes las adquieran sean “partícipes directos en el financiamiento de distintos proyectos de la empresa”.

Casaravilla identificó esta emisión como “un nuevo camino” que busca además “testear” una línea de financimiento con la que “los usuarios de la empresa se conviertan en socios” de cara a la posibilidad de usarla en el financiamiento de las inversiones destinadas a la energía eólica. Si bien el instrumento a utilizar en este caso no serán ON, se recurrirá al pequeño y mediano ahorrista mediante la venta de acciones. Para las obras del parque eólico existirá además financiamiento de inversores institucionales, como las AFAP.

“Con esta emisión buscamos sondear el atractivo que tiene en pequeños ahorristas y por eso las opciones van de 1.000 a 20.000 dólares”, explicó el presidente. El período de suscripción se extenderá desde mañana hasta el lunes 29, y las dos primeras jornadas estarán reservadas para montos inferiores a 20.000 dólares. Para estos inversores la emisión puede representar una rentabilidad más elevada, ya que la comisión que el Banco de la República Oriental del Uruguay (BROU) cobra por la operación será asumida por UTE. Entre el viernes 26 y el lunes 29 se suscribirán las demandas de hasta 100.000 dólares.

Para Casaravilla, el atractivo de esta alternativa radica, por un lado, en la modalidad de tasas incrementales de interés que habilitan la obtención de una rentabilidad potencial elevada; por otro, en la posibilidad de “ir cancelando de forma parcial”. En este sentido destacó la importacia que tiene para el pequeño ahorrista “disponer del dinero en un determinado momento”. Además mencionó como otras ventajas la seguridad que tiene la emisión, no sólo porque es lanzada por una empresa estatal, sino porque la emisión tiene calificación “triple A” otorgada por la calificadora de riesgo Fitch.

Sin embargo, Casaravilla admitió que la modalidad -que implica realizar las demandas mediante internet y contar con una cuenta especial en el BROU- “quizá no sea la ideal para llegarle a doña María o don José”. Valoró los trámites como una limitación y destacó que si bien el BROU “tiene experiencia” en estas operaciones, de todas formas “sería importante recurrir a un mecanismo aun más sencillo, usando las redes de pagos, los supermercados o los propios locales comerciales de UTE”.

Consultado sobre el monto máximo de 30 millones de dólares que tiene prevista la emisión, Casaravilla recordó la que se realizó por 100 millones de dólares a fines de 2012 y que tuvo una demanda de 200 millones, “superando las expectativas”. Aclaró que si bien existieron consultas tanto al BROU como a la Bolsa de Valores de Montevideo sobre el monto a emitir, el directorio prefirió “no ser demasiado ambiciosos e ir con pie de plomo para evitar malas experiencias”. Agregó que “no es fácil llegar al pequeño ahorrista, por eso probaremos con un instrumento acotado”.

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