Desde ayer y hasta el domingo, está funcionando el primer Makeathon de Uruguay. Es un evento en el que se crean prototipos tecnológicos que solucionen un problema real en tan sólo 48 horas, para lo que se convoca a profesionales de diversas áreas. Lo organiza la ONG israelí TOM (iniciales de Tikkun Olam Makers, que, en hebreo, significaría “reparadores del mundo”), dedicada a crear herramientas que mejoren la calidad de vida de personas con discapacidad, utilizando la tecnología. El objetivo de la ONG es llegar a ayudar, en diez años, a 250 millones de individuos. En esta ocasión son seis los equipos favorecidos y 60 los voluntarios especialistas en diseño industrial, ingenieros, psicólogos, biólogos, carpinteros y electricistas.
El encuentro de 72 horas en El Parque Tecnológico Industrial (Haití 1500, en el Cerro) da apertura a la segunda edición nacional del FIIS (Festival Internacional de Innovación Social) que corre durante los mismos días, y que, siendo el más importante de su clase en Latinoamérica, se define como un movimiento de agentes de cambio.
La embajadora de Israel en Uruguay, Nina Ben Ami, dijo a la diaria que la idea de TOM existe hace varios años en el mundo, y que junto a FIIS, pudo concretarse: ambos tienen un trasfondo de innovación social; de hecho, TOM se define como “tecnología y valores para cambiar el mundo”. El FIIS está financiado por la embajada y los patrocinadores, que van desde empresas privadas hasta ONG, por lo que se trata de una instancia de modalidad sumamente voluntaria. “Como embajadora quiero generar puntos de unión entre Israel y Uruguay; y que ayude a las personas es fundamental. Si uno quiere algo no tiene que quedarse sólo con el sueño. Hay que llevarlo a la práctica”, afirmó.
Los seis equipos de diez voluntarios están trabajando hace tres semanas en el diseño y “movilizarán sus capacidades de innovación tecnológica para crear una solución tangible para el caso que les fue asignado”: comunicación, autonomía y acceso a la educación son los pilares fundamentales, explicó la encargada de prensa, Cecilia Lucas. El requisito para la selección de los jóvenes fue la dificultad de acceso a servicios o productos que mejoren su calidad de vida.
Entre las seis producciones que están construyendo hay un dispositivo que permite acceder con los pies al teclado y al mouse desde la silla; otro para poder comandar la silla motorizada con el muñón, de forma de tener habilitada la mano sana para otras acciones mientras se traslada; cada situación es particular.
Además, cada caso debe ser corroborado en la base de datos de TOM internacional para verificar si esas problemáticas aún no cuentan con solución a nivel mundial. Los resultados se transforman en tutoriales que se suben a Youtube, para globalizar las ideas en forma de manuales.