Ayer se conoció la noticia de que la jueza Pura Concepción Book emitió un fallo que le prohíbe a una mujer practicarse un aborto. El padre del feto había interpuesto un recurso, y, si bien la Justicia no tiene potestades para impedir un aborto, la magistrada decidió imponer una medida cautelar. La madre de la magistrada respaldó su actuación, aunque también confesó: “Si hubiera sabido que se iba a tomar tan en serio el nombre que le pusimos, la hubiera llamado Millonaria Generosa Con Sus Padres Book”.
La noticia despertó fuertes críticas por parte de diversas organizaciones feministas, que reclamaron a la justicia acciones más enérgicas la Justicia a la hora de proteger los derechos de las mujeres. También sugirieron que este es un buen momento para introducir cambios a la legislación sobre el aborto, debido al impulso que tomaron los proyectos de ley sobre violencia de género.
Un diputado oficialista estuvo de acuerdo con este diagnóstico y recordó que a fines del año pasado estos proyectos estaban estancados, pero “afortunadamente, el número de asesinatos de mujeres se disparó a comienzos de 2017, así que la cosa se empezó a mover bastante”. El legislador recordó que “las leyes como la de violencia de género no son del tipo que todo el mundo está ansioso por aprobar. Más bien son de esas que hasta que la situación no se vuelve insostenible se quedan encajonadas y sepultadas por discusiones eternas sobre cuánta plata debe ir a tal o cuál organismo público”. “Con la cantidad de femicidios por año que teníamos, difícilmente saliera algo antes de mediados del siglo XXI, pero si seguimos a este ritmo vamos a lograr que se apruebe una ley antes de 2050. Definitivamente, esta ola de asesinatos nos llena de satisfacción”, agregó.
Un diputado de Vamos Uruguay se mostró más escéptico acerca de los tiempos de aprobación de la ley, aunque aclaró: “Si alguna mujer de Carrasco llegara a morir a manos de su pareja sin dudas votaríamos la ley”.