El directorio del Banco de Previsión Social (BPS) emitió ayer un comunicado en el que califica de “falsas” las afirmaciones de la Asociación de Trabajadores de la Seguridad Social (ATSS) relativas a la “desregulación” de los acuerdos laborales en el BPS. “Descartamos de plano cualquier asimilación de hecho alguno en el BPS, racionalmente comparable al contenido de la reforma laboral que está en proceso en Brasil”, dice la comunicación.
La directora del BPS, María del Rosario Oiz, dijo a la diaria que “se hacen algunas aseveraciones en el comunicado de la ATSS que no corresponden a la realidad”. Según la jerarca, se ha intentado “en varias instancias” entablar negociaciones con el sindicato para llevar a cabo la reglamentación “en forma específica” de la situación laboral de los trabajadores del área de salud que prevé el artículo 75 del Estatuto del Funcionario del BPS. Sobre esto, el comunicado difundido por la institución afirma que “se ha avanzado pero sin llegar a concretar, entre otras cosas por falta de definiciones de la ATSS”.
Además, Oiz se refirió a la denuncia de que se estaban llevando a cabo negociaciones “uno a uno” con los ginecólogos en huelga en el sanatorio Canzani, que están siendo reubicados debido a que se resolvió el cierre de esa institución. Según el sindicato de trabajadores de la seguridad social, estos acuerdos “no pasan por la órbita colectiva”, algo que rompe con la “justicia y equidad en la forma de distribuir la carga horaria y las condiciones de trabajo”. Sin embargo, tanto la directora del BPS como el texto del comunicado aseguran que no se desconoce al sindicato. Oiz aseguró que “prácticamente todos los ginecólogos ya aceptaron un lugar de trabajo con horarios acordados con cada uno de ellos sobre las bases dispuestas”. “No es un acuerdo uno a uno”, afirmó; “lo que se les permitió a los trabajadores es elegir a cuál lugar querían ir, no lo decidimos nosotros”.
Consultada acerca del “régimen transitorio” propuesto por la ATSS, que suponía pasar a los trabajadores “a una media horaria” hasta que se reglamentara lo comprendido en el artículo 75, Oiz sostuvo que la propuesta del sindicato fue que “cobraran por 40 horas y realizaran 20 horas efectivas de trabajo”. “Esa no es la media de horas de trabajo. En el BPS los trabajadores cumplen 40 horas de trabajo”, explicó. Las únicas excepciones, afirmó, son los profesionales universitarios que hacen “35 horas efectivas y cinco a la orden”, y los médicos, que a veces tienen guardias con “más carga horaria”.
En contraposición, la vicepresidenta de la ATSS, Verónica Miranda, señaló a la diaria que, según un estudio que realizaron, “95% de los profesionales del área [de la salud] trabajan diez, 15 o 24 horas semanales”. Al respecto, Oiz respondió: “Si hay algún trabajador que tiene esa carga horaria, yo quisiera saber quién es, porque está incumpliendo con sus obligaciones laborales”.
Y agregó: “Insto a que el sindicato nos diga quiénes son para hacer las investigaciones correspondientes”.