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Gente ansiosa

Gente ansiosa: equilibrio perfecto entre lo gracioso y lo conmovedor

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En la miniserie de Netflix se mezclan las historias de un grupo de rehenes, y la comedia con el drama.

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Leído por Abril Mederos.
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Para los amantes de las producciones nórdicas (y los que aún no lo son deberían probarlas), se estrenó esta nueva miniserie sueca de seis capítulos en Netflix. Está basada en la exitosa novela homónima de Fredrik Backman, publicada en 2021, y cada capítulo se presenta como un misterio a resolver que involucra a un equipo de policías un poco torpes (padre e hijo), a un ladrón de bancos bastante inepto y a un grupo muy dispar de personas a las que este toma de rehenes. Pero de lo que realmente trata Gente ansiosa es de la vida de cada una de esas personas y de cómo se unieron en ese momento en particular; eso de estar en el lugar indicado en el momento indicado.

El director Felix Herngren y la escritora Camilla Ahlgren lograron tomar la historia de Backman y tejer una narrativa que a veces es absurda y ridícula y otras es genuinamente emocionante. Es justamente esa mezcla de comedia, drama y emotividad lo que la hace tan interesante. El elenco está integrado por Carla Sehn, Sascha Zacharias, Alfred Svensson, Dan Ekborg, Petrina Solange, Marika Lagercrantz, Leif Andrée, Anna Granath, Per Andersson, Lottie Ejebrant y Sofia Ledarp.

El protagonista es un ladrón de bancos sin mucha suerte que se equivoca y elige robar uno que en ese momento no tiene efectivo. Tras el fracaso, decide tomar a ocho rehenes que estaban cerca, de pura casualidad, en la exhibición de una muestra abierta de un apartamento en venta. En la situación irrumpen Jack y Jim, una pareja de policías disfuncionales que además son padre e hijo (su vínculo es de lo más interesante). Se encuentran con una pareja que, como sus hijos crecieron, quiere cambiar de casa, una pareja gay que está esperando un hijo, una gerente de banco despistada que sólo mira las fotos de las paredes del apartamento, un actor contratado para hacer bajar los precios de las casas, entre otros. Después del truncado evento de la toma de rehenes y de su liberación, los policías parecen enfrentarse a un pacto de silencio entre los secuestrados, lo que hace todo más complicado.

A medida que los capítulos avanzan, nos muestran cómo todos los rehenes van generando una especie de intimidad entre ellos en cuanto a sus problemas y realidades. Gran parte de lo buena y entretenida que es esta miniserie es la capacidad de su director de entrelazar las historias, una magnífica cadena de micromundos y de personajes comunes que podríamos ser cualquiera de nosotros. Y la forma en que un evento fortuito saca a la luz secretos de todo tipo y angustias de la vida cotidiana. Esa toma de rehenes frustrada es el disparador de muchos movimientos y cambios en las vidas de los personajes, y esa es la mayor cualidad de la serie: reflejar la vida con sus casualidades y sus causalidades; con la “ansiedad” como denominador común.

Gente ansiosa es un drama con toques de comedia, muy bien realizado y muy bien actuado. Entre secretos y humor, esta producción sueca es magnífica. Una historia llena de humanidad que refleja cómo la compasión, la solidaridad y la tolerancia pueden salvar a personas que sufren y se equivocan, entendiéndolas en lugar de juzgarlos. Además, ayuda a comprender cómo aquellos que practican la empatía pueden y suelen mejorar su propio mundo y ser más felices. Pero también son historias de perdón, de segundas oportunidades y de amor. Original, inteligente e ingeniosa; altamente recomendable.

Gente ansiosa. Miniserie de seis episodios de 23 a 34 minutos. En Netflix.

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