El 19 de marzo es el cumpleaños de Rossana Taddei y en 2020 se le ocurrió festejarlo exactamente ese día con un concierto en el teatro Solís, llamado Íntima porque se iba a basar en versiones despojadas de canciones de sus últimos dos discos, Semillas (2016) y Cuerpo eléctrico (2018). Pero, claro, seis días antes de aquel concierto fue el inicio oficial de la pandemia de coronavirus en Uruguay y el plan de Taddei –como todos los demás– se fue al garete. La cantante y compositora terminó festejando su cumpleaños con un minirrecital por streaming desde su casa. Pero la vida da revancha y el recital se hará, casi dos años después: será este jueves en el mismo escenario.
La música se presentará con Gustavo Etchenique (batería y percusión), Gastón Ackermann (teclado, trompeta y coros), Alejandro Moya (bajo) y Santiago Montoro (guitarra).
Hoy Taddei cuenta que en estos dos años pasaron tantas cosas que el espectáculo que iba a hacer se transformó, empezando por el nombre, “volar cantando”, ya que siempre está “bastante sincronizada” artísticamente con lo que va a ocurriendo. “Ahora es un momento de querer observar otros cielos, poder volar y cantar. Se conservan algunas canciones de las que iban a ir en el concierto Íntima, pero van a aparecer nuevas, de este período”, adelanta. Uno de los temas nuevos es “Reparación”, recién salido del horno; lo compuso hace tres semanas, cuando pudo comprender que iba a volar y llegar a Uruguay, porque la mayor parte de este período pandémico lo vivió en su segunda patria, Suiza, donde residió toda su infancia.
La cantante cuenta que durante estos dos años, al no poder tocar en vivo, se nutrió de información, de lecturas y cosas que había dejado en el tintero y no estaba pudiendo hacer debido a “la vorágine de la vida previa al parate”. Así las cosas, tomó ese período como de “introspección” y “crecimiento personal y espiritual”. En ese proceso también escuchó música diversa y de repente le aparecieron canciones en la memoria, de forma imprevista, “pero que traen un mensaje en el texto”. En general eran canciones folclóricas, como “Mi luna cautiva”, que cantaba el argentino Jorge Cafrune (cuyo autor es su compatriota José Ignacio Chango Rodríguez) y Taddei escuchaba en su infancia.
“De nuevo estoy de vuelta, después de larga ausencia, / Igual que la calandria que azota el vendaval. / Y traigo mil canciones, como leñita seca, / recuerdos de fogones que invitan a matear”, dice parte de la letra. Taddei se enteró de que la canción fue compuesta cuando Rodríguez estaba preso, entonces le cayó la ficha de que era sincrónico, porque “todos estábamos adentro” y había un paralelismo con la situación actual.
Además, hace un mes, antes de venirse a Uruguay, Taddei tocó en el teatro Sociale Bellinzona, que está ubicado en el cantón del Tesino, en Suiza, y armó un repertorio que incluyó canciones de raíz folclórica, como alguna zamba. En esa búsqueda también se conectó con el folclore latinoamericano y versionó “Los ejes de mi carreta”, de Atahualpa Yupanqui, que también sonará el jueves en el Solís.
La sincronía sigue con la imagen del vuelo, ya que la portada de Cuerpo eléctrico ostenta un pájaro. Aquella vez fue porque un animalito volador entró a la sala de ensayo, se daba contra las paredes y al tomarlo en su mano para salvarlo y liberarlo, a Taddei le transmitió una electricidad –de allí salió el nombre el disco–. Ahora sigue la idea por una relación con la libertad de volar y “salir de las represiones o de los esquemas que uno se puede poner o que el mismo sistema nos termina imponiendo desde la escuela”.
En el afiche que anuncia el espectáculo del jueves aparece un dibujo de la cantante con la mitad de su cara mezclada con la de un águila, porque es un ave que de vez en cuando se va a la montaña, se le caen las plumas y espera hasta que le vuelvan a crecer para iniciar nuevamente el vuelo. “Eso es una simbología muy clara de lo que está pasando con mi camino y la música”, finaliza.
Rosanna Taddei toca el jueves a las 21.00 en el teatro Solís. Entradas por Tickantel a $ 1.000 (hay 2x1 para suscriptores de la diaria).
Natalia Bolani. Foto: Captura
Lado B de Piazzolla
Natalia Bolani y Cuarteto Hagopián harán un recorrido por algunas de las obras menos conocidas de Astor Piazzolla, con una propuesta “que intenta resignificar los textos elegidos haciendo hincapié en la interpretación, con una impronta personal de Bolani desde su perspectiva como actriz, y valorizando muchas de las versiones escritas por Ángela Denia Tarenzi, cantante y poeta italiana, quien colaborara durante muchos años con Piazzolla en varios proyectos discográficos”, se indica en la gacetilla de prensa.
Se agrega que “el espectáculo tiene la intención y el deseo de acercar al público temas poco transitados y conocidos del revolucionario repertorio piazzolleano”. La cita será mañana a las 20.30 en la sala Zavala Muniz del teatro Solís. Las entradas valen $ 400 y se consiguen por Tickantel.
La Triple Nelson
La banda liderada por Christian Cary se presentará hoy a las 20.00 en Complejo Sala Show (Río Branco y Cerro Largo). Las entradas se venden por RedTickets y valen $ 770 y $ 970.
Diego Presa
El músico tocará en formato solista el jueves a las 21.00 en Hormiguero (San Salvador y Minas). El ticket artístico sale $ 350. Por reservas: 091 826 554
Samantha Navarro (archivo, agosto de 2018).
Foto: Ricardo Antúnez, adhocFOTOS
Mujeres rotas
“Reconocimiento a las mujeres, aquellas que por donde pasan dejan un pedazo de sí, permitiéndose vivir de forma intensa sin importar las consecuencias. Mujeres rotas somos todas las mujeres. Ana Prada, Samantha Navarro y La Dulce nos proponen la reedición de este hermoso disco”. Así se presenta el espectáculo que las artistas brindarán el viernes a las 21.00 en la sala principal del teatro Solís. Las entradas se consiguen por Tickantel y van desde $ 300 a $ 800.
Spuntone y Mendaro
El dúo dará su último show en vivo en Montevideo antes de entrar a grabar su nuevo disco de estudio. La cita será el viernes a las 21.00 en La Trastienda. Las entradas se venden por Abitab y valen $ 800 y $ 1.000.