Desde este miércoles y hasta el 30 de octubre, el Museo Reina Sofía de Madrid presentará la exposición Giro gráfico. Como en el muro la hiedra, un recorrido por las iniciativas gráficas de América Latina en contextos políticamente críticos, convulsos, represivos o urgentes. Con el comisariado de la Red Conceptualismos del Sur, la muestra incluye un conjunto de gráficos realizados por la ex Escuela Nacional de Bellas Artes (ENBA) de Uruguay durante los años 60 y hasta 1973, cuando fue clausurada por el gobierno dictatorial. La selección estuvo a cargo de los artistas y docentes de la Facultad de Artes Sebastián Alonso, Fernando Miranda y Gonzalo Vicci.
“El seleccionado es un material que corresponde al archivo y acervo de la institución, que se fue recuperando luego de la reapertura de la Escuela en el año 85”, dijo Alonso a la diaria. “Todo lo que fue material de archivo, acervo, materiales de la institución, fue destruido por la dictadura. Gonzalo Vicci y Paula Espert, a través de un proyecto, intentaron recuperar material que las personas pudieran tener, ya fuera afiches, volantes, fanzines, etcétera”.
A partir de este trabajo de hace unos años se recuperó “buena parte” del archivo, que se suma al de profesores universitarios que también tenían material. “La selección de las piezas gráficas tiene que ver un poco con las posibilidades y con la propia historia de la institución. Hay algunas piezas que se solicitaron a privados y otras piezas que hoy integran el acervo institucional”, agregó el investigador.
“Por otro lado, nos interesó construir un mapa de las distintas propuestas de la ENBA de las que la gráfica daba cuenta. Hay afiches que tienen que ver con las ventas populares en los distintos barrios, en las que la Escuela incursionaba en forma muy protagónica con producciones de cerámica para que la gente pudiera hacerse de una pieza y utilizarla. Eran objetos de utilidad, mayormente, y esas ventas tenían una comunicación gráfica”. Hay dos o tres afiches de la muestra relacionados con eso, “con la comunicación como elemento central para convocar a la ciudadanía a ser parte de esas ventas populares”.
“Luego hay algunos afiches que son más abstractos, que tienen una condición estética muy fuerte y no portan textualidades en la imagen. También nos parecían importantes, porque las investigaciones de color y las investigaciones plásticas estuvieron siempre muy presentes en la institución, y esos afiches por momentos daban cuenta de una necesidad de comunicación, y por otro momento daban cuenta de una propuesta estética. Esos mismos afiches se vendían en las ventas populares. Y también se seleccionaron algunos afiches que daban cuenta de la conflictividad interna de la institución Udelar”.
Sobre los materiales enviados, Alonso explicó que básicamente están en soporte papel, y que en muchos casos sufrieron deterioros producto del tiempo, de la calidad original, y de la “urgencia” de su creación. “La idea no era generar obras artísticas en sí mismas, sino que era un material de circulación en el espacio público, en la ciudad. Entonces, su condición de urgencia tiene que ver con eso, con que es más importante que el afiche, el volante, el material impreso llegue a la gente, que que efectivamente se conserve para el futuro”.
De una primera selección de 40 ejemplares, provenientes del acervo de la hoy Facultad de Artes, colecciones privadas y resguardos de profesores de la institución, el equipo de Miranda, Vicci y Alonso seleccionó nueve afiches de acuerdo a los criterios de su proceso curatorial. “Pero a su vez nos parecía que el envío debía ser completado con producciones audiovisuales que dieran cuenta del entorno de época, tanto universitario como social, y que dieran un poco de marco de idea de las condiciones de la protesta, de los momentos coyunturales políticos que vivía el país en ese momento, particularmente en la década del 60, y el compromiso en un período efervescente y conflictivo. Estas producciones son películas documentales producidas en la época por autores de trayectoria asociados con el cine y con el audiovisual en Uruguay”. Para los investigadores era muy importante dar contexto al contacto directo que se pretendía entre la Universidad y la gente en su momento, “que actualmente también defendemos”.
“Nuestra intención es que en 2023 pueda existir una edición de esta muestra en Uruguay, quizás con la prevalencia de los materiales propios de la institución, para que esto pueda tener una divulgación fuerte, importante, a nivel local. No es una tarea sencilla, pero estamos progresando hacia ese lugar”, detalló. “Con respecto al acervo de la institución, la Facultad tiene un acervo permanente que se está digitalizando y resguardando de forma continua en procura de condiciones cada vez más cuidadas de preservación y de activación de ese acervo, que incluye materiales que la escuela pudo recuperar y otros que está en proceso de hacerlo. De manera que estamos considerando la posibilidad de hacer una publicación, en cuanto llegue la ocasión de la posible muestra en Montevideo, así como de ir generando progresivamente su disponibilidad digital, abierta a todo el mundo”.
En la muestra Giro gráfico. Como en el muro la hiedra también participa desde Uruguay el investigador e historiador Gabriel Peluffo Linari, con quien trabajan en colaboración.
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