El ministro de Justicia de Argentina, Mariano Cúneo Libarona, anunció el viernes la eliminación de 13 programas de protección de mujeres, infancias y personas LGBTI+, en una nueva decisión del gobierno libertario que atenta contra los derechos de estas poblaciones. En un mensaje publicado en su cuenta de X, el jerarca señaló que se trata de programas “ideológicos, creados por el kirchnerismo” y los calificó de “innecesarios”. “Eliminar estos despilfarros absurdos le ahorrará más de 6.000 millones de pesos por año a los argentinos de bien”, justificó Cúneo Libarona, y agregó que ninguna de esas políticas “contaba con evidencia contrastable de impacto real, criterios de evaluación o control de resultados”.
Las iniciativas en cuestión fueron impulsadas por el ex Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad, que fue eliminado por el presidente Javier Milei apenas llegó al gobierno, una medida que derivó en que estas políticas fueran absorbidas por el Ministerio de Justicia.
Cúneo Libarona criticó especialmente el programa MenstruAR, que tildó de “insólito”. Esta política disponía la entrega de copas menstruales a municipios de todo el país “para garantizar el acceso igualitario de las personas menstruantes a insumos de gestión menstrual”, según indica la página web del ex ministerio, todavía activa, de acuerdo a lo que consignó el diario Perfil. En Argentina, y en otros países que adoptaron políticas similares, este tipo de medidas busca evitar que las niñas y adolescentes de bajos recursos dejen de ir a clases por los inconvenientes que acarrea la imposibilidad de comprar productos de gestión menstrual.
También fue derogado el Programa de Apoyo Urgente y Asistencia Integral Inmediata ante Casos de Violencias Extremas por Motivos de Género, que ofrecía apoyo económico, asistencia psicológica, asesoramiento jurídico y orientación en la tramitación de la reparación para niñas y niños huérfanos de mujeres víctimas de femicidio.
Otros programas eliminados son el de Fortalecimiento de los Dispositivos Territoriales, que apuntaba a construir casas-refugio para mujeres que debían huir de sus hogares en el marco de situaciones de extrema violencia de género, y el de Fortalecimiento del Acceso a Derechos para Personas Travestis, Transexuales y Transgénero, que brindaba apoyo económico a las personas de este colectivo que tuvieran más de 50 años y no contaran con trabajo registrado.
A su vez, el gobierno dio de baja a los programas Producir, que ofrecía una salida laboral a mujeres y disidencias mediante proyectos productivos, y Generar, que buscaba “fortalecer la capacidad de los municipios en materia de políticas de género”, según indica el sitio oficial.
La lista de políticas eliminadas la completan el registro nacional de promotores territoriales de género y diversidad a nivel comunitario; el programa para el fortalecimiento de las organizaciones sociales de género y diversidad; el programa Igualar para la igualdad de géneros en el trabajo, el empleo y la producción; el Sembrar Igualdad para el fortalecimiento de la perspectiva de género e igualdad en la diversidad en el desarrollo rural; el programa Macachas y Remedios de escuelas populares de formación en género y diversidad; el Formar Igualdad para la capacitación en perspectiva de género y diversidad en el sector privado; y el el de fortalecimiento de la participación social y ciudadana en materia de género y diversidad.
Un anuncio que confirma lo que ya se daba
Especialistas en políticas sociales y referentes de género de la administración anterior aseguraron que, en los hechos, estos programas fueron desfinanciados el año pasado, por lo que el anuncio viene sólo a oficializar un recorte que ya existía.
“Nada de lo que está ahí es noticia. Todas las acciones que hacía el ministerio [de las Mujeres] se discontinuaron o se terminaron los procesos administrativos”, explicó en esta línea Lucía Cirmi Obón, exsubsecretaria de Políticas de Igualdad de la antigua cartera, a Página 12. La economista dijo que este ataque no es por un problema “presupuestario”, sino por una visión “ideológica” de La Libertad Avanza, el partido de Milei, que “no cree en las desigualdades de género”.
A su vez, aseguró que el Ministerio de las Mujeres, “en su versión de máxima expansión, significaba solamente 20 centavos de cada 100 pesos que gastaba el gobierno nacional. Entonces, estos 6.000 millones que destaca el gobierno representan una quinta parte de lo que se recaudaba por el Impuesto a la Transferencia de Bienes, que Milei derogó diciendo que como recaudaba poco, no hacía falta sostenerlo”. “A la gente le digo, además: 6.000 millones es poquísimo, y a ellos se les van recursos por otras canaletas con montos mucho mayores”, agregó.