El Poder Ejecutivo anunció ayer que el aumento de los salarios en el sector público será de 7%, por lo que se ubicaría por debajo de la inflación del año que termina. Algo similar ocurrirá en el sector privado, y desde el movimiento sindical denuncian que se está profundizando “una pérdida sostenida del salario real”. Pero desde el gobierno relativizan la gravedad del desfasaje entre salarios y precios. “Los sindicalistas tienen los papeles atrasados, como siempre. Están obsesionados con el tema del salario real. Que el salario real esto, que el salario real aquello. No se dan cuenta de que eso es parte del pasado. El futuro es el salario virtual, y hacia allí nos dirigimos”, explicó un jerarca del Ministerio de Economía y Finanzas.
Según la fuente, el gobierno comenzará en 2022 un plan “para que Uruguay se meta de lleno en el metaverso, explotando al máximo las posibilidades de la virtualidad. De hecho, se está considerando la posibilidad de cambiarle el nombre al país, que pasaría a llamarse República Oriental del Uruguay by Meta”.
En el caso concreto de las remuneraciones públicas y privadas, el mecanismo sería el siguiente: “Hoy por hoy, el salario aumenta menos que la inflación, por lo que hay una pérdida de poder adquisitivo. Eso es real. Pero el gobierno se comprometió a volver a alinear el salario con la inflación, por lo que virtualmente recuperó su capacidad adquisitiva. A eso le llamamos salario virtual”.