Con el recambio de su presidencia, el Partido Nacional inauguró un nuevo ritual para quienes ocupen cargos en el Honorable Directorio. Se trata de entregar el celular para que sea guardado en la caja fuerte de la sede partidaria. Según explicó Macarena Rubio, quien ayer asumió la presidencia y cumplió con el ritual mencionado más arriba, “Los dirigentes queremos demostrarle al electorado que los blancos aprendemos de nuestros errores. Y dejar que los celulares de nuestros dirigentes o representantes en el gobierno andaran sueltos por ahí claramente fue un error”. Rubio entiende que el uso del celular es “indispensable” para cualquier político, por lo que “obviamente” los dirigentes van a tener uno, pero lo que se busca es que “en caso de que, como parte de una actividad política, el celular termine en un juzgado, por lo menos que no salgan a la luz chats comprometedores del pasado. Una Gabriela Fossati no aparece todos los días”.
La primera medida: “Voy a crear un consejo de notables con todos esos blancos valientes e íntegros que renunciaron en medio de maniobras turbias”. Macarena Rubio, presidenta de partido pillo.