El fiscal de Flagrancia de 2º turno, Carlos Negro, pidió formalizar la investigación contra nueve trabajadores que participaron en la ocupación de la planta de la empresa Friopan en mayo de 2019.
Fuentes allegadas a la investigación dijeron a la diaria que a los trabajadores se les imputó el delito de daño especialmente agravado porque habían afectado parte de la mercadería que estaba en la fábrica, unas 1.100 baguettes y 600 kilos de masa, según la denuncia.
La causa había sido archivada por la fiscal de Flagrancia de 3º turno, Silvia Pérez, pero los abogados denunciantes, Andrés Ojeda y Fernando Posada, pidieron la revisión del caso por un fiscal subrogante, tal como habilita el nuevo código de proceso. En la revisión, el fiscal Negro coincidió con Pérez en descartar los delitos de amenaza y apropiación indebida, que habían sido planteados por los empresarios al llevar el caso a la Justicia, pero advirtió que se configuró el delito de daño.
El fiscal no pidió medidas cautelares y si bien el Código Penal prevé para ese delito penas de prisión, se descarta que puedan ser privados de libertad, considerando la magnitud del delito y la calidad de primarios de los imputados.
El abogado de los trabajadores, Alberto Sánchez, dijo a la diaria que los hechos ocurrieron “en el ejercicio del derecho de huelga” y recordó que cuando se concretó la medida, la ocupación estaba reglamentada como una extensión de ese derecho.
Además, planteó que el daño sobre la mercadería fue un punto relevado por la escribana que actuó al inicio y al término de la ocupación porque así lo permitieron los trabajadores y señaló que se trata de “una impresión subjetiva”. “La escribana debe constatar un hecho, no dar una opinión cuando no tiene elementos para valorar el estado de la materia prima”, sostuvo.
En esa línea, Sánchez dijo que los daños producidos “son propios del desarrollo de cualquier ocupación” y destacó lo “desproporcionado” de llevar el caso a la Justicia penal, sin siquiera presentar una demanda en la Justicia civil. “Si lo que quieren es un resarcimiento económico, que vayan por la vía que corresponde”, agregó.
El abogado recordó que cuando terminó la ocupación no se registraron daños a la maquinaria y los trabajadores ofrecieron limpiar y reparar posibles pérdidas de insumos, pero la empresa se negó.
Sánchez recordó que “lo que llevó a la ocupación fue un incumplimiento gravísimo de las condiciones básicas laborales y sanitarias de la empresa”, como falta de acceso a agua potable y la presencia de roedores en la planta. “Ese debe ser un elemento a considerar en la Justicia”, señaló.
El Secretariado Ejecutivo del PIT-CNT
Tras conocerse el pedido de formalización, el Secretariado Ejecutivo del PIT-CNT emitió un comunicado en el que advierte que la ocupación de Friopan fue “desdibujada por una campaña de desprestigio contra la organización sindical”, que apuntó a “criminalizar la ocupación” y “estigmatizar a los trabajadores organizados”.
“La formalización de los nueve trabajadores es un nuevo intento de judicializar la negociación colectiva, de amedrentar a los trabajadores en el ejercicio del derecho de huelga y de desconocer la libertad sindical”, señala el documento de la central.
Además, resalta el incumplimiento por parte de la empresa de los acuerdos alcanzados en la negociación colectiva y el destrato sistemático a los trabajadores en el vínculo cotidiano. “Los intentos de humillación se constituyeron en un mecanismo corriente a la hora de dirigirse a la parte trabajadora, con calificativos como 'muertos de hambre, vayan al Mides [Ministerio de Desarrollo Social] a pedir comida', detalla la declaración.
Por otra parte, señala que la reivindicación de los trabajadores tiene que ver con medidas esenciales de sanidad ante condiciones “más propias del siglo XIX que del año en que transcurren los hechos”.
La empresa fue ocupada durante cuatro días en mayo de 2019, luego de que los trabajadores conocieran un plan de reestructura en la empresa de la que no habían sido informados. La reestructura, sostenida a partir de la compra de nueva maquinaria, implicaba un incumplimiento del convenio colectivo que fue reconocido por los empresarios.
En aquel momento, se viralizó un video de la planta cuando fue entregada, en el que se veía masa desperdiciada en las máquinas. Ante eso, el presidente del PIT-CNT, Fernando Pereira, publicó un comentario en su cuenta de Twitter en el que expresó la necesidad de no utilizar la medida de la ocupación sin agotar otras instancias de diálogo, pero aclaró que la masa que estaba pronta se preservó, y la que aparecía desperdiciada eran 30 kilos de un tipo de masa que no se puede preservar.