El presidente de la Asociación de Vecinos de Ocean Park salió al cruce de representantes del colectivo Aruera que, la semana pasada, identificaron a la organización vecinal como parte de quienes hostigan y persiguen a familias que defienden la posesión de terrenos en el balneario.
En declaraciones a la diaria, Carlos Font puntualizó que “hace un par de años, ante un aumento exagerado de usurpaciones de terrenos en la zona, que llegó a generar una gran alarma pública entre los vecinos y motivó la intervención de la Intendencia Departamental de Maldonado (IDM)”, la asociación rechazó esa práctica y recomendó a sus afiliados que radicaran la denuncia policial en caso de constatar actividades que pudieran constituir un presunto delito.
“Ahí terminó toda la intervención de la Asociación de Vecinos en ese tema. No estamos en una campaña de denuncias ni hemos promovido más actuaciones mediante comunicados ni a través de nuestras redes sociales”, afirmó, en rechazo a las expresiones del vocero de Aruera, Marcos Montico, y otros miembros del colectivo.
No obstante, Font reconoció que él denunció un padrón ocupado por este vecino y su pareja, “a título personal y a pedido de una afiliada” a la asociación que no se encontraba en el balneario. Añadió que la denuncia “resultó en la formalización de los ocupantes y actualmente se encuentra en Fiscalía en fase de estudio de la documentación y otras pruebas presentadas por ellos”.
En otro caso, firmó una denuncia junto a un vecino que llamó al 911 para informar que había personas alambrando un padrón ajeno: “Los desalojaron porque apareció el propietario del terreno”, fue el desenlace. En otra oportunidad, aportó los datos del propietario de un terreno en el marco de una denuncia que presentó otro vecino.
Otra asociación “más decidida”
También resaltó que ha tenido con Montico “un par de conversaciones, siempre en tono cordial y respetuoso de ambas partes, en las que cada uno expuso sus puntos de vista sobre el tema”. En ese sentido, dijo que hubo un malentendido, porque la Asociación de Vecinos nunca usó sus redes sociales para incitar al odio y la violencia, y menos utilizando imágenes falsas.
“Esas publicaciones pertenecen a una página de Facebook denominada Ocean Park, paraíso del Este, que no tiene ninguna vinculación con nuestra asociación”, dijo Font, y afirmó que la actual comisión directiva “ha tenido como norte recomponer la armonía y la convivencia entre los vecinos”. Divulgar mensajes como los mencionados “sería contrario a los estatutos y a los principios éticos y morales que rigen nuestra gestión”, sostuvo.
A título personal, dijo que existe una agrupación sin personería jurídica que tiene “una actitud más decidida” con respecto a las posibles usurpaciones” y que ha llegado a recaudar dinero para recabar datos de registros sobre los padrones ocupados y sus propietarios. “Esa organización no tiene nada que ver con nosotros”, insistió.
De hecho, Font remarcó que él asistió a un conversatorio donde, días atrás, los vecinos expusieron los aspectos jurídicos por los que defienden su derecho a habitar la tierra. “Los escuché atentamente y me pareció una buena instancia, aunque cada uno tiene su visión. Quizás sea necesario reformar las leyes, porque no es posible que se penalice la usurpación y al mismo tiempo se habilite la posesión de los terrenos cuando son usurpados en determinadas condiciones”, opinó.
Negocios de gente influyente
Font entiende que estos conflictos perjudican la imagen del balneario porque exponen un clima de violencia entre vecinos que, a su juicio, no refleja la realidad. “No sé si hay hostigamiento ni persecuciones, no me consta, pero en todo caso no salen de nuestra parte y probablemente el incremento de las denuncias se da porque en enero comenzó a funcionar la Fiscalía semiespecializada en estos temas”, consideró.
También señaló que hay todo tipo de casos: no sólo se trata de vecinos con la sana intención de hacerse de los derechos posesorios para vivir ahí; hay gente con mucha influencia y contactos en la IDM para averiguar las deudas de contribución, que viene a hacer negocios”. De todos modos, subrayó que “los fiscales son los únicos que tienen las herramientas para investigar, recabar información e investigar a profesionales” que pueden participar en esas maniobras.
Finalmente, Font reivindicó las bondades del balneario: “Es un barrio muy lindo, con gente interesante. A la asociación se ha ido sumando gente muy participativa, aunque solamente representamos a la cuarta parte de quienes residen en la zona”.