Mediante la firma de dos decretos, el presidente ecuatoriano, Guillermo Lasso, concedió el indulto a presos con sentencia por infracciones de tránsito menores y también a aquellos que padezcan enfermedades graves o terminales, en un intento por aliviar el hacinamiento en las cárceles del país, dijo su oficina de prensa en un comunicado.
Según informó Reuters, la decisión del mandatario forma parte de un plan diseñado para aliviar la violencia en el sistema penitenciario, que en el último año aumentó por la lucha de pandillas por captar el liderazgo y las rutas del narcotráfico, dejando en lo que va del año un saldo de al menos 300 muertos.
Además del problema de la violencia, el sistema penitenciario ecuatoriano está signado por un hacinamiento cercano a 30%, lo cual empeora las condiciones de vida de las casi 40.000 personas privadas de libertad que hay en el país.
El gobierno no manifestó cuántos presos recibirán el indulto presidencial, pero se especificó que la medida beneficiará a los reclusos con una sentencia por infracciones de tránsito, como manejar sin permiso o exceder el límite de velocidad, en los casos en que no haya implicado la muerte o lesiones de terceros.
Además, podrán salir en libertad los reclusos con enfermedades graves y tuberculosis que no tengan condenas por delitos imprescriptibles como enriquecimiento ilícito, tráfico de personas, secuestro, delincuencia organizada, entre otros.