Los empleados de una cafetería de la cadena Starbucks de la ciudad de Búfalo, en el estado de Nueva York, votaron a favor de crear el primer sindicato de la empresa, que tiene más de 9.000 locales en el país, 50 años después de su fundación.
Los trabajadores de tres locales de esta cadena de cafeterías empezaron a votar por correo el mes pasado sobre si querían ser representados por Workers United, una filial del Sindicato Internacional de Empleados de Servicios. Mientras aún faltaba por confirmarse los resultados en las otras dos sucursales, este jueves se confirmó que los empleados del local situado en la calle Elmwood apoyaron en forma mayoritaria la creación de su sindicato.
Ahora los representantes de los empleados y de la empresa estadounidense, que ha luchado por todos los medios para evitar este desenlace, deberán sentarse para negociar un convenio colectivo, el primero al que se enfrentará Starbucks, informó Televisión Española. Desde la dirección de la empresa se intentó convencer a sus “socios”, como denomina a sus trabajadores, de que poner un representante entre ellos y la dirección traiciona la cultura solidaria de la empresa. Starbucks ha luchado activamente contra la sindicalización en sus tiendas durante décadas, diciendo que sus tiendas funcionan mejor cuando trabaja directamente con los empleados, según recordó la cadena Univisión.
“Si Starbucks tiene el dinero para pagar a su director general una indemnización de casi 15 millones de dólares, creo que tal vez pueda permitirse pagar a sus trabajadores un salario decente con mejores beneficios”, dijo el senador por Vermont Bernie Sanders, en una reciente publicación en su cuenta de Twitter. Starbucks rechazó anteriormente los intentos de sindicalización en Nueva York y Filadelfia. Pero el año pasado los trabajadores de una tienda de la cadena en Canadá lograron crear un sindicato.
La elección en la sucursal de Búfalo marca una de las victorias sindicales más destacadas para los trabajadores de los restaurantes de Estados Unidos, que se encuentran entre los menos sindicalizados del país.
Pero el severo deterioro de las condiciones laborales que vinieron como consecuencia de la pandemia de coronavirus fueron el detonante que movilizó a estos trabajadores y a muchos de otros sectores en todo el país a exigir mejoras laborales y comenzar procesos de sindicalización.
Medios estadounidenses informaron que los trabajadores de varias secciones de la empresa agroalimentaria Kellogg están actualmente en huelga y rechazaron una nueva oferta de contrato a principios de esta semana. Paralelamente, hace pocos meses miles de empleados de la empresa de maquinaria agrícola Deere & Co., popularmente conocida por su marca comercial John Deere, mantuvieron una huelga en reclamo de mejoras salariales. A estos casos se suma el de la empresa Amazon, en la que recientemente se aprobó la votación de la creación de un sindicato en una tienda del estado de Alabama.
En Estados Unidos poco más de 6% de los trabajadores están afiliados a un gremio, y ese porcentaje es todavía más bajo entre los trabajadores de cafeterías y restaurantes, donde el nivel de afiliación sólo alcanza 1,2% de la fuerza laboral.