El recuento final de los votos de Nevada le terminó dando una gran victoria en las elecciones de medio término al Partido Demócrata, que gracias a la ajustada imposición en ese estado de Catherine Cortez Masto sobre su oponente republicano, Adam Laxalt –un resultado decisivo en la batalla política estadounidense–, logró llegar a su escaño número 50 en la Cámara de Senadores, por lo que se aseguró la mayoría. Los republicanos tienen 49 bancas en el Senado, pero con la derrota en Nevada, incluso si logran el escaño 50 en la segunda vuelta de Georgia del 6 de diciembre, la vicepresidenta Kamala Harris podrá emitir un voto de desempate, lo que le asegura el control al oficialismo. Esto fue lo que sucedió durante los dos primeros años de la presidencia de Joe Biden, que podrá tener la tranquilidad de finalizar su mandato con esta ventaja en el Legislativo.
Quizá lo más relevante, de acuerdo a lo que informó la BBC, es que si queda vacante un escaño en la Corte Suprema debido a la jubilación inesperada o la muerte de un juez, los republicanos no tendrán la posibilidad de bloquear a la persona que Biden decida designar.
La victoria en Nevada le restó la trascendencia que se suponía iba a tener la segunda vuelta en Georgia, pero Biden aseguró que “simplemente es mejor” que su partido gane también en este estado y llegue a conseguir 51 escaños en la cámara alta.
Con la mayoría del Senado ya resuelta, aún queda por ver cómo quedará conformada la Cámara de Representantes. Hasta el momento, y mientras el conteo de votos continúa en varios distritos, los republicanos tienen aseguradas 211 bancas y los demócratas, 204. La mayoría para controlar esta cámara es de 218 escaños, por lo que, en cualquiera de los dos casos, así ganen los republicanos, lo que parece más probable, como los demócratas, la mayoría será muy estrecha, una gran decepción para el Partido Republicano, que horas antes de las elecciones vaticinaba “una gran ola roja” que cubriría el país, haciendo alusión a su color tradicional.
El domingo se refirió a este tema la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, quien en una entrevista con la cadena ABC consignada por el portal Politico, expresó: “Los expertos en Washington dijeron que no podíamos ganar porque ‘la historia, la historia, la historia’. Pero las elecciones son sobre el futuro”, afirmó Pelosi, quien además aseguró estar “orgullosa” de los candidatos de su partido.
Es que sin dudas las elecciones terminaron siendo un espaldarazo enorme para Biden y su partido y a la vez sumieron a los republicanos en una crisis interna. Luego de la caída de varios de sus candidatos fuertes, el liderazgo del expresidente Donald Trump quedó en cuestión, aunque aún queda mucho tiempo para que se defina quién será el aspirante a la presidencia del sector en las elecciones de 2024.
Biden se reúne con Xi
Al tiempo que el triunfo electoral de su sector en las elecciones le dio tranquilidad, el presidente Joe Biden tendrá este lunes un crucial encuentro con el presidente chino Xi Jinping en el marco de la cumbre del G20 que se está desarrollando en la localidad de Bali, en Indonesia.
El del lunes será el primer encuentro en persona entre los líderes de las dos economías más grandes del mundo desde que Biden asumió la presidencia en enero de 2021, y ocurre además pocas semanas después de que Xi fuera nominado para un tercer mandato de cinco años durante el congreso del Partido Comunista chino.
De acuerdo a lo que recogió Los Angeles Times, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, dijo en una declaración que Biden y Xi se reunirán para “discutir los esfuerzos para mantener y profundizar líneas de comunicación” entre los dos países y para “manejar responsablemente la competencia y trabajar juntos cuando nuestros intereses coinciden, especialmente en desafíos transnacionales que afectan a la comunidad internacional”.
En las últimas semanas funcionarios del gobierno estadounidense estuvieron trabajando con sus pares chinos organizando la reunión de este lunes. La semana pasada, en diálogo con algunos medios locales, Biden dijo que planeaba discutir con Xi las crecientes tensiones entre Washington y Pekín sobre Taiwán, políticas comerciales, las relaciones de China con Rusia, entre otros temas.
“Lo que quiero hacer con él cuando hablemos es decir cuáles son nuestras líneas rojas y entender los que él considera que son los intereses críticos de China, porque lo que sé yo son los intereses críticos de Estados Unidos”, remarcó el mandatario, que el domingo cumplirá 80 años.