Poco después del intercambio de rehenes israelíes por palestinos detenidos en cárceles de Israel, previsto en su plan para Gaza, el presidente estadounidense, Donald Trump, afirmó: “Hemos logrado lo que todos decían que era imposible. Por fin tenemos paz en Medio Oriente”.
“Nadie pensó que esto pudiera suceder con el acuerdo histórico que acabamos de firmar. Esas oraciones de millones finalmente han sido escuchadas”, celebró Trump, pese a que tanto israelíes como palestinos expresaron recelos y cuestionamientos no sólo en el plan, sino en el propio intercambio de personas retenidas.
Una muestra de este estado de ánimo fue que Benjamin Netanyahu, el primer ministro israelí, rechazó la invitación de Trump de asistir a la firma del acuerdo sobre su plan en la ciudad egipcia de Sharm el Sheij.
Allí lo ratificaron los mandatarios de todos los países mediadores en las negociaciones entre Hamas e Israel: Trump, el presidente de Egipto, Adelfatah al Sisi, el de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, y el emir de Qatar, Tamim bin Hamad Al Thani. Gobernantes de varios países europeos y el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, acompañaron la ceremonia.
“Tras años de sufrimiento y derramamiento de sangre, la guerra en Gaza ha terminado. La ayuda humanitaria está llegando a raudales”, dijo Trump. Agregó que él logró varios acuerdos en conflictos, pero dijo que este es el “más grande y complejo” y “podría provocar problemas tremendos, como la Tercera Guerra Mundial”.
Trump, además, llamó a los gobiernos de la región a sumarse a los Acuerdos de Abraham, una iniciativa de su anterior mandato para normalizar las relaciones entre los países árabes e Israel, entre las cuales se interpuso históricamente el conflicto por Palestina. Por el momento, este conflicto sigue sin ningún tipo de resolución, y durante la mañana, cuando el presidente estadounidense dio un discurso en el Parlamento israelí, dos legisladores de la agrupación de izquierda Hadash, Ofer Cassif y Ayman Odeh, lo interrumpieron para reclamar el reconocimiento a un Estado palestino. Los dos fueron expulsados del recinto por funcionarios de seguridad.
Reencuentros y ausencias
Muchas de las expectativas de las familias de rehenes israelíes y detenidos palestinos terminaron en la mañana de este lunes en reencuentros y celebraciones. Pero otras, por el contrario, se vieron frustradas.
Hamas liberó a los 20 israelíes secuestrados hace dos años que todavía seguían con vida en la Franja de Gaza, que ya se reencontraron con sus familias. Sin embargo, causó malestar en las autoridades israelíes y en las organizaciones de familiares que Hamas sólo entregara los restos de cuatro de los 28 rehenes que murieron en cautiverio.
El ministro israelí de Defensa, Israel Katz, llegó a advertir a Hamas que “cualquier retraso u omisión intencionado será considerado una violación flagrante del acuerdo y será respondido en consecuencia”.
Según publicó The Times of Israel, el gobierno de Netanyahu no cree en el argumento de Hamas de que necesita más tiempo para reunir los cuerpos de esas personas.
En cuanto a los 1.986 palestinos liberados, en su mayoría detenidos después de los ataques de Hamas de octubre de 2023, el Comité Internacional de la Cruz Roja informó que 1.809 volvieron de forma segura a Gaza y Cisjordania. Otros, un número cercano a 160, fueron trasladados al norte de Egipto y se prevé que sean deportados.
De acuerdo con la cadena Al Jazeera, son 154 las personas que están en esa situación, y sus familias están conmocionadas por esa noticia. Se prevé que los envíen a países de la región, entre ellos Túnez, Argelia y Turquía.
Tamer Qarmout, profesor asociado de políticas públicas, calificó estas deportaciones de “exilio forzado”. Dijo a la cadena qatarí que “es evidente que es ilegal” su expulsión, porque “son ciudadanos de Palestina” y los envían “lejos de su sociedad, a nuevos países donde enfrentarán importantes restricciones. Es inhumano”.
Dos organizaciones sociales palestinas, la Comisión de Asuntos de los Detenidos y Exdetenidos y el Club de los Prisioneros, denunciaron que muchas de las personas que Israel liberó “presentaban claros signos de tortura física y psicológica”, en algunos casos, hasta los últimos momentos de su liberación”.
Pero este lunes fue un día de alivio y alegría para muchos de los liberados. “Estoy feliz, así de sencillo. La gente nos recibe con los brazos abiertos. La prisión fue realmente terrible, las condiciones pésimas, sobre todo en los últimos dos años”, dijo a la agencia Efe Mohamed Ahmad al Khatib, condenado a 20 años de prisión, que cumplía su condena en la cárcel de Rimon, en Belén.
La madre de Musab Khwazeh, condenado a diez meses de prisión, dijo a la agencia que, desde octubre de 2023, las incursiones militares en Cisjordania incluyen detenciones injustificadas de jóvenes, algunos todavía estudiantes. “En las cárceles son maltratados y torturados, y algunos terminan confesando cosas que no han hecho”, agregó, y dijo conocer varios casos.
El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, exhortó este lunes “a todas las partes a aprovechar este impulso y a cumplir sus compromisos en virtud del alto el fuego para poner fin a la pesadilla en Gaza”.