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Tierra, colonización y Universidad: propuestas y sinergias para el nuevo quinquenio

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Un documento elaborado en febrero y marzo de este año, que cuenta inicialmente con 25 firmas, refleja la voluntad de estudiantes, egresados y docentes de la Universidad de la República “convocados autónomamente” para avanzar en un mayor involucramiento con el Instituto Nacional de Colonización (INC). Con propuestas de corto, mediano y largo aliento, el documento invita a la construcción de una estrategia que permita la generación y socialización del conocimiento en distintas áreas y contribuya a la mejora de la producción y el bienestar de las familias rurales, tal como lo señala el artículo 1 de la Ley 11.029 que crea el INC. Para este grupo, el perfil de las candidaturas universitarias al directorio del INC debería contar con “experiencia y conocimiento en el ámbito de la institucionalidad agropecuaria y el INC”, “idoneidad para la construcción de política pública” y “capacidad de articulación e interlocución con el ámbito universitario y no universitario”.

Por estos días, las gremiales de productores rurales y centros de enseñanza terciaria son convocados a proponer candidatos y candidatas para terminar de componer el directorio (de cinco miembros) del ente. En la disposición transitoria G de la Constitución de 1967 se establece un mecanismo por el que tanto la Dirección General de Educación Técnico Profesional (ex-UTU) como la Universidad de la República (Udelar) remiten candidaturas al Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, que finalmente aconseja al Poder Ejecutivo las designaciones.

En los últimos períodos de gobierno no se han considerado los nombres propuestos por la Udelar. La última representación oficial de la Udelar en el INC recayó en el ingeniero agrónomo Yerú Pardiñas (2006-2008), quien entonces dirigía la Estación Experimental Bernardo Rosengurtt de la Facultad de Agronomía en Cerro Largo. La Comisión Sectorial de Extensión y Actividades en el Medio conformó entonces una subcomisión de Colonización y Soberanía Alimentaria que acompañó el período de gestión de Pardiñas, donde los diversos equipos y servicios universitarios podían participar en un intercambio de información con el representante. Esto colaboró en la articulación de una diversidad de iniciativas de trabajo con colonos y solicitantes de tierra en todo el territorio nacional, en una etapa previa a la descentralización de la Udelar y la creación de los Centros Universitarios Regionales.

En el segundo y tercer gobierno progresista, el Poder Ejecutivo designó profesores del Consejo de Educación Técnico Profesional-UTU, y en el último gobierno, presidido por Luis Lacalle Pou, se interpretó que un profesor egresado de lo que es hoy el Consejo de Formación en Educación también podía ejercer la “representación técnica” (Art. 3 de la Ley 11.029) que se espera de los centros de enseñanza.

El documento al que nos referimos, de marzo de 2025, reunió de manera individual y colectiva a distintos actores universitarios (agremiaciones, equipos de investigación y extensión) “para la convergencia de ideas y propuestas de cara al aporte de la comunidad universitaria en la política pública de colonización”. El documento apuesta a que las candidaturas que la Udelar proponga para el cargo puedan adherir a este espíritu de coordinación y optimización de esfuerzos, a la vez que propicia un espacio sostenido de interacción y confluencia entre actores vinculados al tema.

Desde los cañaverales de Bella Unión a los tambos de San José y en las regiones ganaderas, la Udelar tiene un amplio recorrido institucional en el desarrollo integral de sus funciones constitutivas, enseñanza, investigación y extensión, en territorios de colonización, con distintos acentos y generalmente vinculando las dimensiones sociales con las económico-productivas y ambientales.

En el documento1 se menciona una lista no exhaustiva de antecedentes de los últimos 20 años de trabajo universitario desde diversas facultades y Cenures de la Udelar, vinculado a las colonias del INC, las familias colonas y los/as aspirantes a colonización. Las iniciativas junto con familias productoras, jóvenes, mujeres y asalariados/as rurales contemplan abordajes desde los sistemas productivos, la calidad de vida y trabajo de la población, las experiencias asociativas, la gestión de bienes culturales, lo ambiental, la integración generacional, las desigualdades de género, entre otras.

Desde los cañaverales de Bella Unión a los tambos de San José y en las regiones ganaderas, la Udelar tiene un amplio recorrido institucional en territorios de Colonización.

En estos 20 años se han consolidado a su vez una serie de políticas diferenciales de desarrollo rural que hoy presentan espacios interinstitucionales donde la Udelar y el INC están presentes, como el Plan Nacional de Agricultura Familiar (PNAF) y el Plan Nacional de Agroecología (PNA). Asimismo, persisten desafíos cada vez más consensuados sobre la necesidad de una mayor confluencia de las distintas intervenciones técnicas y conocimientos acumulados, en un sistema nacional de extensión y asesoramiento a nivel rural. En el documento se señala que desde un “enfoque territorial y abordaje interdisciplinario” la Udelar puede aportar a “procesos de acceso a tierra desde una perspectiva integral e interseccional” en distintas áreas de trabajo, como ser: i) asistencia técnica en temas y desafíos del INC; ii) generación de conocimiento en áreas prioritarias para la política de tierra; iii) formación y capacitación de equipos técnicos, colonos y aspirantes a colonos; iv) asesoramiento técnico y apoyo a proyectos colonizadores.

Para abordar dichas áreas de trabajo se propone en el corto plazo la “creación de un espacio abierto para la elaboración y articulación de líneas de trabajo Udelar-INC”, la celebración de “convenios de colaboración en temas específicos” y la promoción de “líneas de investigación, innovación y desarrollo con financiamiento”. Mientras tanto, en el mediano y largo plazo, se apuesta a la creación de “un programa integral universitario” sobre “colonización y agricultura familiar en Uruguay”.

Estas estrategias de cooperación intrauniversitaria e interinstitucional pueden optimizar los recursos, siempre escasos, para el trabajo en el ámbito de la producción familiar y de una de las políticas más importantes que tiene el país históricamente en términos de radicación de población en el medio rural.

En este sentido, la discusión política en la coyuntura actual, sobre cómo recuperar la senda del crecimiento económico de forma sostenible y al mismo tiempo distribuir, tiene una referencia ineludible en los casi 80 años de política de tierra del Estado uruguayo a través del INC. Este fue uno de los motivos por el que, nuevamente, la Udelar “ha sido crítica sobre el proceso de debilitamiento institucional de la última administración de gobierno y sobre las consecuencias que algunas normativas” como las introducidas por la ley de urgente consideración, las leyes de presupuesto y de rendiciones de cuentas, que permitieron la desafectación de importantes volúmenes de tierras vinculadas al ente y el recorte de los fondos para compra de tierras.

Quizás hasta fines de abril, en el plano de la autonomía y el cogobierno universitario se siguen debatiendo no solamente nombres, sino también propuestas y perfiles de candidatos y candidatas universitarias al directorio de Colonización. Este documento apunta a que, a partir de la deliberación democrática y el trabajo mancomunado sostenido, se puedan favorecer sinergias y nutrir de mayor contenido a la mencionada “representatividad” en el órgano rector del INC, más allá del condicionamiento legal de que los y las representantes de la educación y de los productores resulten de la elección final por parte del Poder Ejecutivo.

Pablo Díaz Estévez es integrante del Observatorio de Política de Tierra y docente del Núcleo de Estudios Rurales del Centro Universitario Regional Noreste. Camila Gianotti García es responsable del Laboratorio de Arqueología del Paisaje y Patrimonio, y docente del Departamento de Sistemas Agrarios y Paisajes Culturales del Centro Universitario Regional del Este. Emiliano Guedes Bica es integrante del Observatorio de la Cuestión Agraria del Uruguay, docente del Departamento de Ciencias Sociales de la Facultad de Veterinaria de la Udelar. Verónica Núñez Scorza es integrante del Observatorio de Política de Tierra y docente de la Licenciatura en Economía Agrícola y Gestión de Agronegocios del Centro Universitario Regional Noreste de la Udelar.


  1. El texto está disponible y abierto a más adhesiones en https://nucleodeestudiosrurales.wordpress.com

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