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Sebastián Sabini y Fernando Amado

Foto: Victoria Rodríguez

Parecido no es lo mismo

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Entrevista con Sebastián Sabini y Fernando Amado, los dos diputados electos más jóvenes.

Son los dos representantes más jóvenes que tendrá el Parlamento, pero representan a trincheras ideológicas bien separadas. Eso se nota, por ejemplo, cuando opinan sobre la Ley de Caducidad. Sin embargo, coinciden en la necesidad de incorporar nuevas herramientas a la política, no tienen reparos en criticar a los veteranos de sus partidos y de sus propios sectores, y los dos ya anunciaron que a la hora de despenalizar el aborto sus manos estarán levantadas.

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Editar

El montevideano Fernando Amado tiene 27 años y es del barrio La Mondiola. Vivió dos años en Inglaterra, donde su padre, el teniente Fernán Amado, era agregado militar. Cursó primaria y secundaria en colegios privados y egresó como licenciado en Ciencias Políticas de la universidad pública. Empezó a militar en el Partido Colorado (PC) en 2001, dentro del Foro Batllista, en el que siguió hasta 2006, cuando comenzó su desencanto. Se define como socialdemócrata y “doctrinariamente” sanguinettista. En marzo de 2007, en Trinidad, participó en la fundación de Vamos Uruguay, sector que hoy preside.

Sebastián Sabini, diputado electo por Canelones, tiene 28 años y vive en Las Piedras. Nació en Montevideo pero cuando era adolescente su familia se mudó a una zona rural pedrense, y allí terminó el liceo público. En 2004 egresó como profesor de historia del IPA, cursó una maestría en historia económica y social en la Facultad de Ciencias Sociales y es director de Juventud de la Intendencia Canaria. Milita desde 1997 en el Movimiento de Liberación Nacional (MLN) y el Movimiento de Participación Popular (MPP). Ocupó el tercer lugar en la lista a diputados por el Espacio 609, que obtuvo cuatro de las ocho bancas del Frente Amplio (FA) en ese departamento.

Faltazo

La diputada blanca Verónica Alonso es la más joven del nuevo Parlamento, de 36 años, que ingresa por su partido. La secretaría de Alonso agendó con anticipación, fecha y hora de la entrevista junto a Amado y Sabini, pero unas horas más tarde pidió modificar la hora, excusándose en el lanzamiento de la campaña de su partido. El viernes, media hora antes de la nueva hora pactada para el encuentro, quien lleva su agenda se comunicó y volvió a excusarse en nombre de Verónica por compromisos partidarios. La próxima será.

-¿A quién sienten que representan?

FA: -Es inevitable que el primer reflejo sea recordar a quienes sostuvieron y apoyaron la candidatura desde la interna, cuando tuvimos que marcar votos. Pero también es cierto que un representante nacional ingresa por un partido pero tiene que pensar lo que es mejor para el país, y eso nuestra generación no lo maneja como un eslogan político de campaña, y trasciende la frontera de los partidos. Es fundamental que en esta legislatura se avance hacia la concreción de leyes y acuerdos entre todos los partidos, y creo que generacionalmente podemos ser buenos articuladores de eso. En el PC estamos pasando por un momento raro, y es de una franqueza animal lo que voy a decir, porque seguimos teniendo reflejos de nuestra historia en los últimos 20 años, una historia atada a la cercanía con el Partido Nacional [PN] y a un sentimiento antifrentista. Ese sentimiento anti-FA en mi generación no existe, sí está presente en los mayores y en quienes estuvieron hasta hace un tiempo en lugares de importancia del PC. Para ser sincero, en estos últimos días he recibido muchos correos y llamadas de compañeros, que han estado militando codo a codo durante estos últimos meses, a los que les cuesta votar al PN, y no lo quieren hacer. Prefieren votar en blanco porque sienten que, junto con la recuperación de la mística y el sentimiento de pertenencia, hemos logrado una diferenciación del PN. Es difícil hilar fino en esto, pero dentro del PC hay un choque de generaciones muy notorio, en el que nosotros nos sentimos muy lejanos al PN. Y me siento en el deber de representar a esa nueva generación de colorados, que no tiene ese reflejo de blancos y colorados por un lado y frentistas por otro. Puede resultar difícil de entender en esta coyuntura, pero estos cambios profundos se verán un poco más adelante. SS: -Tengo una paradoja, porque uno pelea por ampliar el campo de la democracia directa, y esto va en desmedro de la democracia representativa. En lo particular, siento que la primera representación es la de los canarios y, además, creemos que nos acompañaron muchos jóvenes. En lo ideológico, pienso representar a una izquierda atenta a los cambios que la sociedad nos exige, en materia de energía, ecología, derechos sexuales y reproductivos, y legalización de la marihuana, entre otras cosas. La izquierda tiene que renovarse o no es izquierda, y la renovación no pasa sólo por que haya caras nuevas, sino por la cabeza, que tiene que ser más abierta. Uno aspira a dedicar su trabajo a esas cosas, a mejorar la educación que tenemos, la inserción entre la ciencia, la tecnología y las empresas, a fortalecer las políticas sociales entre los más desprotegidos. Vengo de una tarea ejecutiva, y también tengo claro que los tiempos parlamentarios son diferentes, o tal vez se termina apreciando más lo que se dice que lo que se hace. En cuanto a una cosa que decía Fernando, creo que una parte de ser frenteamplista consiste en estar en contra, no puntualmente de los blancos y colorados, pero sí de una forma de hacer política que los dirigentes históricos de esas colectividades representan. Me refiero al clientelismo político y a la corrupción, y a la distancia entre discurso y práctica, y en cierta forma siento representar a la gente que está en contra de esas prácticas. Parte de la identidad frenteamplista tiene que ver con estar contra el clientelismo y la desidia en la administración de la cosa pública, y en Canelones tenemos un ejemplo más que claro de eso.

Fernando lo dijo

El álbum Blanco (1): El Partido Nacional pone a sus jóvenes en una cancha alternativa, como de la B. Y ése es un problema de los propios jóvenes, que no logran quebrar ese tabú mental. En política, a veces hay que patear las puertas para llegar a la cancha A. La renovación en el PN es absolutamente inexistente.

Ticket to ride: A veces una persona de 50 años con determinada experiencia política está en mejores condiciones de enfrentar una campaña que alguien de 20 años, que capaz que tiene a sus amigos intentando ver cómo sobreviven y no les va a ir a pedir que compren un ticket de 500 pesos.

Los dinosaurios: Muchas veces con Sanguinetti o Hierro López decodificamos las cosas de manera distinta, y por eso reafirmo que me siento sanguinettista en lo doctrinario, que es una cosa bien distinta.

El álbum Blanco (2): En 2004 el PC era una alternativa muy poco seductora para los jóvenes, mientras que el PN para llegar a los jóvenes siempre ha explotado esa veta romántica o épica de sus líderes, a pesar de que éstos nunca terminan concretando nada.

Bo cartero: El plebiscito por el voto epistolar fue importante, pero fue un error adelantar los tiempos. Es un proyecto que en esta legislatura va a terminar saliendo, habrá que ver los mecanismos.

-¿Qué balance hacen de la derrota del Sí rosado?

SS: -Es una decepción que nos deja la enseñanza de que en el marco de una elección nacional no podemos poner estos temas arriba de la mesa. Si queríamos analizar y debatir con seriedad los argumentos que había a favor y en contra, no lo deberíamos haber colocado junto a las elecciones. Fue un error de la fuerza política y lo tenemos que asumir. Las fuerzas sociales que lo promovieron también deberían asumir que una campaña como ésta termina tapando todo. Mucha gente que tal vez hubiera votado la anulación no tenía la más pálida idea de lo que se estaba votando, a pesar de que nadie en su sano juicio avalaría la desaparición de personas y los crímenes que hasta hoy seguimos sufriendo. Sanguinetti decía que esto daba punto final, y no es así. Hasta que no se sepa dónde están las personas, la gente va a seguir reclamando por verdad y justicia, porque la historia sigue. En España hoy los nietos y los bisnietos de las víctimas de la Guerra Civil de 1936 están reclamando.

-A los sectores mujiquistas se les ha cuestionado una falta de compromiso con la causa.

SS: -Esa crítica es injusta. El MPP mandó a imprimir más de un millón de papeletas rosadas, que ensobramos en todas las listas del sector más votado del FA. En todos los actos que hicimos pusimos el tema sobre la mesa y convocamos a actividades por el Sí. FA: -En mi caso, siento un profundo respeto por la gente que votó la rosada y por la gente que ha levantado estas banderas durante muchos años. Pido, en la misma línea, que se respete a quienes decidimos no ensobrar la papeleta por el Sí. Hemos recibido calificativos que no le hacen bien a nadie; parece que quienes no acompañamos somos una masa ignorante que no entiende cómo son las cosas, y es similar a que diga que el 48% que votó a Mujica es porque no tiene un conocimiento real de lo que puede llegar a ser como presidente. No va por ahí. Por otro lado, no me siento con la autoridad moral de dejar sin efecto algo que votaron los uruguayos y que seguramente lo hicieron con más información y cercanía a los acontecimientos. Me puedo generar una opinión acerca de lo que me puedan contar y, en mi caso, que vengo de un hogar militar, debería tener una influencia muy grande de una determinada posición. Sin embargo, me ha interesado más leer y escuchar a la parte que lo ha sufrido, y lo pude hacer porque en la Facultad de Ciencias Sociales hay un ambiente muy fermental, y he podido intercambiar con muchos amigos, hijos de exiliados o de presos políticos.

-Pero hay cosas que no te contaron, como los pronunciamientos de organismos internacionales y la Suprema Corte de Justicia. ¿No sentís que les estás dando la espalda?

FA: -Discrepo con Sanguinetti que salió al cruce de la declaración de inconstitucionalidad. Los políticos no debemos inmiscuirnos en el tema de la justicia, pero probablemente él lo haya hecho porque está preso de toda esa circunstancia histórica. Cantidad de gente siente que la Ley de Caducidad es una buena herramienta para llegar a buen puerto. No es nada menor que hoy estén presos emblemáticos dictadores y unos cuantos militares, y que se pueda ir sumando a eso una cantidad de casos como se ha venido sumando a lo largo de este gobierno.

-¿Y los que quedan amparados?

FA: -Quedan amparados. Excede mis posibilidades…

-¿Eso no es impunidad?

FA: -No. SS: -Pero es inevitable reconocer que estas cosas pasaron. Esto es una injusticia y nos afecta a todos. Si no, el asunto tendría que resolverse entre secuestradores y familiares. FA: -No. Hay que seguir aplicando la ley. SS: -Pero aplicando la ley estamos a merced de la política. Estuvimos 15 años sin investigar porque la política no te lo permitía. La Constitución dice que los poderes están separados y lo primero que hace esta ley es decirle al Ejecutivo que le diga al Judicial qué se puede investigar y qué no. No es válido el argumento de que no lo vivimos, porque con ese criterio no podríamos debatir nada. Imaginate que los tupamaros hubieran utilizado como arma de guerra la desaparición forzada de militares, ¿los familiares de militares no estarían reclamando verdad a los tupamaros? No se trata de otra cosa que de una cuestión humana, no de partidos políticos. Por eso hubo colorados que votraon la papeleta del Sí. La gente quiere la verdad.

-Sin embargo, la teoría de los dos demonios también la tomó la izquierda.

SS: -Que se hagan cargo los que la levantaron. Esto no tiene que ver con los demonios, los tupamaros habían sido derrotados militarmente hacía rato cuando el golpe. Esto va por otro lado. FA: -Comparto. Cuando se da el golpe de Estado los tupamaros estaban presos. En esa misma línea de razonamiento es bueno que se sincere esa suerte de idea que ha hecho carne en mucha gente de que el MLN combatió la dictadura. El MLN no pudo tirar ni un tiro contra la dictadura aunque antes creyeran, equivocadamente, que el camino para alcanzar el poder era la lucha armada.

Sebastián lo dijo

El último de la fila: El MPP no tiene una organización de jóvenes, militamos a la par con (Eduardo) Bonomi, (Lucía) Topolansky o (Ernesto) Agazzi, y no siento que haya un choque de generaciones. Uno espera no haber sido elegido sólo por ser joven, sino por alguna otra virtud, porque personas con 28 años que quieran ser diputados puede haber un montón.

Las pastillas del Abuelo: El FA no capitalizó la gran elección de jóvenes que tuvo el 12 de noviembre de 2007, con 100 mil votantes. Pero la izquierda sigue siendo sumamente atractiva para los jóvenes, y eso se vio en todos los actos de campaña y frente al NH Columbia el domingo 25. Igual hay mucha novelería para ver cuál es el partido de los jóvenes, y no creo que eso se logre por tener una elección de jóvenes.

Barón Rojo: Alguien como el vicepresidente de la Corte, Renán Rodríguez, que sale a decir en plena veda que el mecanismo del voto epistolar no da seguridad y, acto seguido, dice que son consideraciones técnicas y no políticas, tiene que renunciar.

Héroes del Silencio: Espero que en el marco de esta discusión sobre el equilibrio de poderes y la profundización de la democracia que llevan adelante el PN y el PC, también haya cambios en los organismos de contralor.

Otro tema

-¿Cómo impactaron en las estructuras orgánicas las nuevas tecnologías?

SS: -El FA notó un complemento enorme en las nuevas tecnologías entre las nuevas movilizaciones y la orgánica tradicional. Se debatieron en la interna la caminata en la rambla y la bandera; las dos nacieron de grupos de personas que no militaban en la orgánica, y la orgánica reaccionó. Hubo un impulso y un freno. Es lógico que lo nuevo genere temor, sobre todo en dirigentes que no están acostumbrados. Yo tengo Facebook hace dos semanas porque me obligaron [se ríe] pero demuestra que se puede hacer política de diferentes formas. FA: -Es imposible darles la espalda. Son herramientas muy útiles, sobre todo para quienes las utilizan como algo diario; no es mi caso. Yo tengo uno, pero no me lo administro yo [se ríe]. Prefiero el contacto cara a cara.

-¿Cuán proyectada tienen su carrera política?

SS: -Soy militante político y el político que diga que no está atrás del poder miente; si no, no haría política. Voy a estar donde el MPP crea que puedo serle útil. Hoy como diputado, o mañana volveré al liceo a dar clases. FA: -Hace siete años empezamos a trabajar pensando en ascender en una estructura de poder para poder decidir dentro de mi colectividad. Ahora lo que me saca el sueño, y es una obsesión, es recuperar Montevideo. Pienso trabajar mucho como diputado con una impronta montevideana. En estos cinco años me interesa armar un proyecto serio y estudiado para ofrecer alternativa.

-¿Hay que despenalizar el aborto?

SS: -Está en el programa de gobierno y el FA va a ganar. Yo voy a poner mi voto. Es un hecho que los abortos se producen, pero la mujer que no tiene 10 mil pesos tiene que practicárselo en un lugar inhóspito e insalubre, corriendo riesgo de vida. Termina siendo una cuestión de clases sociales. Es un tema que va más allá de los partidos… FA: -Excepto del PN, que tiene más unidad porque sus integrantes tienen un pensamiento bastante cercano a la Iglesia Católica. Me parece injusto que una mujer que se realiza un aborto pueda ir presa. Es una aberración. Hago mía la argumentación de Sanguinetti en el Senado cuando la votó [la Ley de Salud Sexual y Reproductiva]. No hay que lavarse las manos yéndose de sala, hay que decidir sin medir costos políticos.

-¿Y legalizar la marihuana?

SS: -La legalización puede generar problemas fronterizos. Ahora, tener a alguien preso por tener una planta me parece tan absurdo… La pasta base es un veneno, nadie puede estar a favor del consumo de pasta base, es una cosa muy diferente. En este caso hay que hacer un combate acérrimo. FA: -Esto se lo dedico a un amigo, el Yerba. Es un tipo muy pintoresco. Dardo Ortiz, una figura muy importante del PN -que proyectó a Lacalle para ser presidente-, me convenció de que el autocultivo de marihuana es algo sensato. Tiene que ver con la libertad, y un partido no puede estar en otra posición. Incluiría el alcohol y el tabaco, que también son drogas sociales. Son agresivas para quien las consume, pero la forma de revertirlo es a través de la educación. Comparto los postulados del Partido Socialista, de que en estos temas hay una gran hipocresía. Me pareció muy bueno lo de Vázquez con el tabaco, soy fumador pasivo. Pero debería haber lugares exclusivos para fumadores; cada uno sabe lo que hace.

-¿Qué opinan de la baja de la edad de imputabilidad?

FA: -Está en el programa de VU para los delitos de sangre. En general, a los 16 años los adolescentes son conscientes de lo que están haciendo. Pero esto va acompañado de un montón de medidas para que esa persona que quizás resulte procesada con prisión tenga un seguimiento para que se rehabilite. Bajar la edad solamente no sirve de nada. Además, nunca pensamos en que fueran a convivir con violadores o asesinos múltiples. SS: -Si se tomara esa medida habría que tomar otras, pero en relación con los derechos. Si son pasibles de ser encarcelados, que esto vaya acompañado del derecho al voto. Además, hay que tener en cuenta que quienes exigen la reducción de la edad son personas mayores que hacen la ecuación droga-delincuencia-juventud, criminalizando en general, cuando en realidad este tipo de jóvenes son una minoría y merecen un trato muy particular.

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